Los echaron de un hipermercado y se animaron a emprender: armaron una franquicia con 15 locales
"Al principio perdíamos plata, compramos mal y se nos vino encima una estantería que si no fuera por la pared, nos mataba". Así comienza la aventura emprendedora de Andrés Rexach, cofundador de la Franquicia Eneldo.
Hoy cuentan con 15 locales, una propuesta diferencial que se basa en locales amplios y gran surtido de productos pero hasta hace unos años, era una de las tantas idea que barajaban tres compañeros de un hipermercado luego de ser echados.
¿Cómo hicieron para crear un negocio de la nada y crecer?
Andrés Rexach fue empleado en una empresa de retail por varios años, llegó a ser jefe de compras de lácteos y un tiempo después lo echaron por haber cumplido un ciclo en la empresa. Con menos de 40 años se vio desempleado y con ganas de reinventarse.
Luego de un mes de descanso decidió convocar a dos ex compañeros para emprender en conjunto. Uno de sus socios (padrino de su hija) era jefe de compras de congelados y había sido echado poco tiempo antes que él y el otro era encargado de logística y reabastecimiento y también se había desvinculado de la empresa luego de su salida.
Andrés vio una oportunidad en el mercado de las dietéticas y valiéndose de su experiencia como supermercadistas, quiso invertir en grande para armar una nueva propuesta.
Así nació Eneldo, un mercado natural que propone una experiencia totalmente distinta a las dietéticas de barrio, ofreciendo un paseo de compras con un surtido mucho más amplio, ordenado y vistoso con precios competitivos.
Rexach cuenta que siempre tuvo la inquietud por emprender heredada de su padre que, luego de ser empleado, fundó una fábrica de helados que llegó a tener varias franquicias. Recuerda de dónde provino la idea de invertir en este rubro, "iba a la dietética de mi barrio y notaba que la experiencia de compra era mala, no tenía recorrido, siempre me preguntaban que quería y yo no podía ver nada. Veía que había ahí un nicho potencial espectacular".
Los tres socios contaban con experiencia en todas las áreas de hipermercado, por lo que conocían de compra, armado de góndola, estrategia de precios y acuerdo con proveedores, así que durante unos meses contactaron proveedores, consultaron agencias de marketing, armaron el sistema de compra y pedidos hasta lanzar su primer local en el barrio de Caballito.
Los primeros tres meses fueron los más duros ya que requirió de trabajo continuo y de aprender de los errores. "Una noche luego de cerrar el local se nos vino encima una estantería por haberla armado mal, por suerte no salimos lastimados. Otro error fue comprar bolsas de papel madera como se usan en Estados Unidos, pero acá en Argentina eso no funciona, tuvimos que revenderlas porque quedaron en desuso" nos menciona recordando algunas experiencias que los ayudaron a crecer.
Andrés reconoce que lo que tuvieron que atravesar en esa etapa, en algunos casos perder plata y aprender que hay cosas que no salen como uno espera, fue el costo por no haber pagado una franquicia. "La ventaja de comprar una franquicia es ahorrarse todo eso: tiempo, estrés y dinero. Es acotar el margen de fracaso".
Pero los socios de Eneldo tenían claro el modelo de negocio y el diferencial que venían a ofrecer en el rubro: hacer bien lo que el resto estaba haciendo mal. Fueron en contra de la tendencia de locales chicos de la competencia; optaron por locales amplios en los que se poder armar un recorrido donde la variedad de productos estén bien ubicados y que el cliente pueda encontrar fácilmente sin necesitar interactuar con el vendedor. "Nosotros invertimos más. Desde el primer local de Caballito apuntado a un público y ofrecimos una mejor experiencia de compra" destaca.
Rápidamente lograron expandirse y durante la pandemia aprovecharon la baja de precio de locales que antes eran imposibles por lo que lograron ganar locaciones muy buenas.
Cuando llegaron a 5 tiendas se dieron cuenta de que ya no podían manejar más locales propios pero sabían que había muchas más ubicaciones que podían funcionar, por eso decidieron abrir franquicias.
El primer franquiciado fue el padre de Andrés. "Fue un aprendizaje y pudimos hacer un prueba y error. Al final fue replicar lo que habíamos hecho nosotros pero en un lugar más chicos" nos cuenta. Al ver el éxito empezaron a ofrecer su franquicia y tuvieron gran aceptación. Al día de hoy cuentan con 15 locales: 5 propios, 5 franquicias funcionando y 5 locales por abrir.
Una pregunta que surge es ¿cómo puede funcionar este modelo de negocio en un mercado que parece estar saturado de tiendas naturales?
Una de las principales claves fue la irrupción de la novedad. Al ofrecer una experiencia de compra novedosa, capturaron a un consumidor con necesidades no cubiertas y ávido de nuevas propuestas. Por otro lado, mejores precios sin bajar la calidad. Esto lo lograron, en principio bajando los márgenes de ganancia, pero luego al alcanzar un gran volumen de compra al expandirse en muchos locales. Eneldo se adecuó a la tendencia del mercado donde están triunfando los locales de cadena que ofrecen mejor precio y servicio. Por esta razón es que las franquicias tienen cada vez más éxito.
"Un comercio muy bien puesto que ofrece variedad y precio, es difícil que le vaya mal."