Javier Milei busca celebrar su primer año de mandato con la venta de IMPSA
El ofrecimiento del gobierno nacional para que un inversor privado se haga cargo de la suerte de IMPSA no tuvo el éxito esperado ya que no despertó el interés de casi ningún grupo ni local ni extranjero por la metalúrgica mendocina fundada por la familia Pescarmona.
Solamente el holding norteamericano ARC Energy, desconocido para el mercado local, mantuvo sus intenciones que ya había hecho públicas a principio de año con una oferta para tomar el control de la compañía que hasta ahora mantiene un control estatal a partir de las acciones conjuntas que están en manos de la provincia de Mendoza y del propio gobierno nacional que encabeza el privatizador Javier Milei.
Luego de haber sido la única ofertante en el proceso abierto para recibir propuestas de venta de esas tenencias accionarias que organizó el Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (Fondep), como accionista mayoritario, ahora se abre una instancia de "vistas de ofertas", además de que la licitación exige una capitalización mínima de u$s25 millones como requisito de inversión para ingresar a IMPSA con el objetivo de garantizar el cumplimiento de contratos con empresas, operatividad de la compañía y el pago de las deudas.
Cronología de un traspaso
En este contexto, ARC Energy, que nació en Houston en el 2011, pretende inyectar capital de trabajo a través de dinero que recibiría del Fondo de Inversión Americano (IAF), especializado en temas de energía e integrado por referentes de dicha industria y que tiene como uno de sus fundadores a Jason Arcenaux, quien a la vez es el CEO de ARC Energy.
Lo que no dice esta empresa es cómo hará para reordenar el millonario pasivo de la ex empresa de los Pescarmona que en la actualidad supera los u$s600 millones y que fue el motivo por el cual otros interesados se bajaron de la compulsa a pesar de haber comprado los pliegos para participar del proceso de venta del capital en manos del Estado Nacional (63,5%) y el provincial (21,2%).
La cronología del traspaso estipula que, luego del período de vistas de las ofertas que ocurrió el pasado 2 de noviembre, entre este 5 y el 15 de noviembre habrá un compas de espera para luego obtener un dictamen de evaluación de ofertas, con base en el orden de mérito.
Se trata de un documento con carácter de recomendación de adjudicación, por lo cual no es vinculante, mientras que el 30 de noviembre deberá publicarse la resolución de la adjudicación y entre el 8 y el 10 de diciembre se tendría que firmar el contrato de compraventa con el adjudicatario.
Si en el camino no ocurre nada extraño, a partir de ese día, que coincide con la fecha de asunción de La Libertad Avanza en el gobierno nacional, IMPSA tendrá nuevo dueño y la administración que conduce Javier Milei su primer proceso privatizador éxitoso, con el desembarco de ARC Energy accionista mayoritario de la metalúrgica mendocina.
Sin opciones
Si bien todavía falta recorrer ese procedimiento administrativo, en el mercado no existen dudas de que el grupo norteamericano será el elegido por los libertarios, teniendo en cuenta que no existe otra opción ni siquiera en estudio para poder salvar a la compañía de la quiebra y de su posible disolución.
Es que, si bien ya arrastraba una millonaria deuda contraída en los tiempos de los Pescarmona, las medidas tomadas por la gestión libertaria de frenar la obra pública y varios de los contratos que el anterior gobierno kirchnerista le había suministrado profundizaron la crisis de IMPSA.
Es por eso que los ejecutivos de ARC Energy ya se encuentran elaborando el plan de negocios para la "nueva IMPSA" como bautizaron a esta etapa en la cual buscan impulsar el potencial de la empresa como referente en América Latina, que cuenta con una tecnología propia para equipos de generación hidroeléctrica y con certificaciones para el diseño y fabricación de componentes nucleares que la puede convertir en un actor protagónico del sector energético mundial.
A esto se suma el expertise para la producción de turbinas para centrales hidroeléctricas y la construcción de elementos para reactores nucleares, equipos para la industria del petróleo y para la prestación de servicios de alta exigencia para el mantenimiento de esas tecnologías.
El plan de ARC Energy
Pero además, el grupo norteamericano diseña fórmulas para hacerse cargo de la "hererencia" que deberá asumir a partir de los incumplimientos de contrato de IMPSA, por ejemplo, teniendo en cuenta que se vende como una empresa en marcha y también con dinero que le entraría en su caja de manera inmediata si es que logra cobrar varias de las obras que ya llevó a cabo.
Una es con YPF para la construcción de un reactor de certificación de procesos, que debería haberlo entregado en noviembre de 2023 pero que todavía no se llevó a cabo, al igual que los fondos que le adeuda Yacyretá por provisión de insumos.
Por eso, desde el inicio de las conversaciones con las autoridades nacionales y provinciales ARC Energy planteó un escenario de due diligence para conocer los detalles de la situación general de la empresa y colaborar en el proceso de reestructuración de la deuda con el objetivo de poder generar las condiciones necesarias para el relanzamiento de Impsa a los mercados internacionales.
La compañía pretende potenciar el Centro de Desarrollo Tecnológico de Mendoza de IMPSA para hacerla crecer en el mercado y llevar alianzas estratégicas con compañías referentes de la industria de todo el mundo.
Además, ARC Energy tiene intenciones de sumar a la metalúrgica mendocina a su enfoque en el suministro de equipos para la industria de petróleo y gas, cubriendo los sectores de upstream, midstream y downstream. Del mismo modo, especializarla en la compra, venta y alquiler de una amplia gama de equipos para procesamiento de hidrocarburos, incluyendo tanques, bombas, compresores, calentadores y otros dispositivos para la producción y tratamiento de gas y petróleo y para los servicios de suministro, fabricación y mantenimiento de equipos industriales en el sector energético.