El Banco Central incluye sus títulos en el canje y espera descomprimir el "contado con liqui"
Lo hizo cuando faltaban apenas horas para que cerrara el plazo de adhesión temprana al canje de la deuda. Pero lo hizo. En la tarde de este jueves el directorio del Banco Central anunció que canjeará los bonos que tiene en su poder emitidos bajo legislación local y se sumará al canje de deuda propuesto por el Gobierno.
De esta manera, la autoridad monetaria no sólo evitará convertirse en un hold out, sino que también conseguirá entre 5.000 y 7.600 millones de dólares en nuevos bonos (especialmente 2030 y 2035) que pasarán a formar parte de las reservas. Y que podría utilizar para hacer bajar el precio del dólar "contado con liquidación" en los próximos meses.
Parece complejo de entender, pero no lo es tanto. Hoy el Banco Central tiene entre sus activos bonos que podrán ser canjeados por los nuevos títulos que emitirá el Gobierno. Al decidir ingresar en el canje, el organismo que conduce Miguel Pesce cambiará los bonos viejos y las Letes (que son papeles que casi no tienen mercado donde ser vendidos) por los flamantes bonos 2029, 2030, 2035, 2038 y 2041.
A diferencia de sus antecesores, los nuevos títulos públicos que emitirá el Gobierno serán muy operados en el mercado. De hecho, ya se sabe que el 2030 reemplazará al AY24 en la adquisición de dólares MEP y contado con liquidación (CCL). Al conseguir estos bonos, el Banco Central se asegura que tiene entre sus activos títulos que podrá vender en operaciones de mercado abierto, tal como lo hace la Reserva Federal de los Estados Unidos.
Si el Banco Central vendiera estos bonos que recibirá por ingresar al canje de la deuda, podría hacer que el precio del dólar contado con liqui baje sustancialmente. De hecho, esta medida venía siendo aconsejada por expertos cercanos al Gobierno.
El secreto parece estar en cómo los venda y cuánto tiempo los haga durar. El factor sorpresa, aseguran los expertos, es fundamental. Y todo esto está en manos de quienes dirigen la mesa de dinero del Banco Central.
"La incorporación de estos bonos es como si se produjera un aumento en las reservas del Banco Central", explicó didácticamente Norberto Sosa, director de IEB. Y agregó: "Según las cotizaciones del día de hoy y tomando un exit yield del 12%, nos da como resultado que el Central conseguiría sumar 7.611 millones de dólares a las reservas al ingresar en el canje y recibir una buena cantidad de bonos 2030 y 2035".
¿Una bomba estabilizadora?
Así, con esos millones más de dólares en su poder, el Banco Central aumentará su poder de fuego para combatir la suba del precio del dólar, en este caso el que se opera en el mercado bursátil y que tiene una gran brecha con el dólar oficial: mientras el CCL cerró en 125,57 pesos el oficial terminó el día a 78,12 pesos el minorista para la venta.
Según explicó Sosa, "con los nuevos títulos, equivalentes a 7.611 millones de dólares, el BCRA podría venderlos contra pesos en el mercado y de esa forma suavizar la presión contra el CCL. Además, los pesos obtenidos saldrían de circulación, actuando la venta de estos bonos como una fuente de esterilización no remunerada".
El analista explicó que "este monto de bonos equivale al volumen de 66 ruedas de renta fija en ByMA (PPT), 44% de la base monetaria o, 38% de los pasivos remunerados del BCRA (Pases + Leliqs)". Y precisó que según las estimaciones que realizaron desde IEB, con la ayuda de estos bonos el dólar "contado con liqui" proyectado para septiembre debería valer alrededor de 118,7 pesos, bastante por debajo de los niveles actuales.
"Esto no significa necesariamente que el CCL converja a dicho valor, pero constituye una métrica de cómo el BCRA podría compensar las presiones alcistas", explicó Sosa.
En buena medida, el impacto que las posibles ventas de los nuevos bonos por parte del Central tengan en precio del "contado con liqui" dependerá de cómo se hagan las intervenciones. Hay quienes aseguran que el factor sorpresa es fundamental y que no sirve venderlos a cuentagotas porque entonces el mercado le tomaría el tiempo a los movimientos de la mesa de dinero del BCRA.
¿Cuánto tiempo durará esto? Es difícil estimarlo, pero algunos analistas del mercado aseguran que alcanzará para calmar el mercado en septiembre y octubre, y así llegar al 3 de noviembre (día de las elecciones en los Estados Unidos) con la esperanza de que Joe Biden sea el próximo presidente estadounidense.
"En realidad, no solucionas el problema de la brecha, sólo ganas tiempo. Es como si estuvieras en un juego on line y ganaste vidas extra", explicó un experimentado analista del mercado.
Este tipo de intervenciones en el mercado, ya se habían hecho en 2009, cuando Martín Redrado estuvo al frente del Banco Central. De hecho, hace pocos días el economista y ex titular del BCRA recomendó hacer este tipo de operaciones junto con otras tres herramientas: generar bonos en pesos con distintos tipos de índices, acordar con empresas exportadoras de cereales adelantar las prefinanciación de la cosecha 2021, y convertir de yuanes a dólares u$s9.000 millones del swap con el Banco Central de China. Esto último, también lo hicieron ya Redrado y Alfonso Prat Gay que lo sucedió al frente del Banco Central.