La inteligencia artificial generativa acelerará las Fintech argentinas

Los proveedores tecnológicos coinciden en que el 2024 continuará el despliegue de la inteligencia artificial generativa (IAG) en todos los rubros de la actividad económica. El sector de las empresas financieras apalancadas en las tecnologías de la información y la comunicación ("fintech") será una de las grandes beneficiadas por esta innovación.

Según un estudio realizado por la compañía Búmeran, sólo tres de cada diez empresas argentinas utilizan esta herramienta en sus tareas diarias, el 31% del total. En América latina, está detrás de Panamá con el 32%, Chile y Ecuador con el 36% y Perú con el 49%, el líder de la región. Más del 70% de las empresas argentinas creen que es una herramienta beneficiosa y esperan incorporarla en el corto plazo.

Los sectores que más utilizan la IA son marketing, finanzas y tecnología. El uso que le dan es para automatizar procesos y generar mejores experiencias de cara a clientes y usuarios, que impacta tanto en empresas B2C como B2B. Generalmente, se asocia a poder optimizar los talentos en la rutina laboral o con un simple chat Bot, pero IAG, es mucho más que eso

La inteligencia artificial generativa tiene la capacidad de generar nuevos datos basados en una instrucción y una fuente de datos ingresada previamente. A la hora diseñar y desarrollar productos, podemos utilizar esta tecnología analizando variables complejas como mercados, costos, consumidores, los comportamientos de todas las anteriores, requerimientos, velocidad de desarrollo y distribución, entre otros. Todas estas variables son analizadas para arrojar resultados que permitan crear productos financieros más personalizados y eficientes.

A través del uso de esta tecnología las compañías transforman sus procesos en una manera más práctica. "En Pomelo, los procesos que anteriormente demoraban días, los hemos reducido a minutos, como es el caso de la traducción de documentos multilingües o la creación de piezas gráficas", explicó Diego Burgos, director general de tecnología de Pomelo, una empresa de infraestructura tecnológica de emisión, procesamiento y gestión de pagos con tarjetas.

"Además, hemos implementado herramientas que asisten a nuestros desarrolladores y estamos realizando pruebas en el entrenamiento de modelos capaces de crear códigos basados en nuestras propias interfaces de programación de aplicaciones (API, sigla en inglés). Esto no solo mejora la velocidad, sino que también comienza a ser parte de nuestra cadena de procesos", agregó, citado en un comunicado que envió la compañía a iProfesional.

La IA generativa tiene capacidad de generar nuevos datos basados en instrucciones y fuente de datos ingresada previamente.

Inteligencia artificial contra delitos financieros

En el ecosistema fintech, el aprovechamiento con IAG se vincula también con la detección de fraudes. La capacidad de procesar datos masivos y cotejarlos con patrones preestablecidos, permite una actualización dinámica y un aprendizaje automático constante y profundo para trabajar en delitos fraudulentos. Esto no solo mejora la protección contra fraudes, sino que también optimiza la gestión de riesgos.

Esta tecnología funciona para hacer aún más concisos los planes de acción a futuro. "Estamos haciendo pruebas" con IAG "que puedan anticipar las necesidades de los clientes y las de sus consumidores mediante el análisis predictivo, agregando valor en los datos para el consumo de información que viaja por nuestra plataforma. De esta manera, nuestros clientes tienen la posibilidad de tomar mejores decisiones", explicó Burgos.

"Estas pruebas iniciales han mostrado el potencial" de IAG "para transformar nuestras operaciones. Su implementación representa una oportunidad transformadora para una empresa de servicios financieros", detalló Juan José Behrend, director de ingeniería de Pomelo.

Según un informe de la consultora Accenture, se prevé que para el 2025 el 77% de las instituciones financieras utilizarán IAG para mejorar la experiencia del cliente y optimizar sus procesos internos. Con su potencial para monitorear mercados, anticipar tendencias y detectar fraudes, la IAG allana el camino hacia una transformación digital más eficiente y segura.