La fórmula de Metrogas para mejorar su situación financiera
Después de varios años de balances en rojo, la mayor distribuidora de gas de la Argentina acaba de revertir el escenario financiero negativo. Es decir, Metrogas que opera en el ámbito de la Capital Federal y brinda sus servicios a más de 2,4 millones de clientes.
En lo que va del año, la empresa que es controlada 100% por la petrolera estatal YPF, logró ganancias operativas por $1.290 millones, respecto de una pérdida de $2.144 obtenida en el mismo período del ejercicio anterior.
Se trata de una fuerte mejora en los resultados de la compañía que, sin embargo, no fue impulsado por la recomposición de sus tarifas sino por la implementación de una estrategia de austeridad comercial y financiera; por una mejor performance de uno de sus negocios aleatorios y también por la fuerte reducción de la incobrabilidad o la mora de sus clientes.
Por lo menos así surge del balance correspondiente a los primeros nueve meses de este 2022 que Metrogas acaba de presentar ante la Comisión Nacional de Valores (CNV) y que fue el primero de la gestión de Osvaldo Barcelona, como presidente de la distribuidora.
De la lectura del informe se desprende que la reversión de las pérdidas operativas registradas al 30 de septiembre pasado respecto del año anterior se debe principalmente a los mejores resultados obtenidos por su filial MetroENERGÍA, dedicada a la comercialización de gas que llegaron a los $19.878 millones que representan un aumento del 43,2% con relación al mismo período del año pasado. Dicha mejora se dio por el aumento de los precios del gas y de la reventa del transporte.
Otro factor que incidió en la mejora de la caja de Metrogas fue impulsada por la disminución de los costos de administración y comercialización, generada fundamentalmente por la reducción de la previsión para deudores incobrables debido a una menor morosidad.
Metrogas: mejora en sus resultados financieros
De hecho, los costos operativos disminuyeron un 7,2% totalizando $55.210 millones debido a una caída en los gastos de compra de gas y de transporte que cayeron un 21,3% llegando a los $23.134 millones.
Del mismo modo, la empresa evidenció una mejora en sus resultados financieros que le generaron una ganancia de $6.575 millones respecto de los $2.636 millones que había logrado entre enero y septiembre del 2021. La diferencia se debe al efecto del resultado por exposición a la mayor inflación en el período de 9 meses de este año respecto a igual período del año pasado.
Es decir, la mejora en sus cifras no fue impulsada por el nuevo esquema tarifario ideado por el Gobierno que no parece generar efectos positivos ni siquiera a partir de la segmentación tarifaria, que se aplica en medio de un contexto de incertidumbre; una fuerte suba de la inflación; controles de precios y falta de claridad con respecto a los marcos regulatorios aplicables a las empresas de servicios públicos.
Metrogas viene reclamando al Gobierno medidas que le permitan corregir la afectación del mecanismo de mantenimiento en valores constantes de la tarifa de distribución ya que si no existen señales hacia ese sentido seguirá sufriendo el impacto en su caja, disminuyendo el flujo de ingresos y empeorando la actual situación económico-financiera que ya atraviesa.
"Sobre la base del resultado al que arribe la sociedad al finalizar el proceso de la Revisión Tarifaria Integral en curso, Metrogas prevé continuar centrando sus esfuerzos para ser referente de la distribución de gas y líder en la comercialización de productos energéticos, contribuyendo al desarrollo del país y a la calidad de vida de los argentinos poniendo al cliente en el centro de sus acciones", anticipa el documento de la compañía que preside Barcelona presentado ante la CNV.
Lo cierto es que, en los primeros nueve meses de este año, sus ventas disminuyeron un 2,4% finalizado el período en $72.192 millones, respecto de los $73.944 millones del mismo período del ejercicio anterior.
Esta caída se origina principalmente por menores ventas a sus clientes residenciales en un 19,9%, pasando de $46.547 millones a $37.281 millones, respectivamente debido a que la tarifa quedó en niveles inferiores al ajuste por reexpresión de las ventas registradas al 30 de septiembre del 2021.
Los números del balance
En el caso de las ventas a clientes industriales, comerciales y entidades públicas aumentaron un 17,2% totalizando $6.817 millones debido a un aumento de los volúmenes entregados del 46,9% que, de todos modos, fue parcialmente compensada por la disminución de la tarifa que quedó en niveles inferiores a la inflación.
En el caso de las ventas del servicio de transporte y distribución a las estaciones de GNC, disminuyeron un 11,6%, llegando a los $917 millones causado por las mismas razones anteriores. Esto es, por la falta de adecuación de los precios a la inflación del período.
En relación a los costos de compra de gas natural para distribución de gas y transporte disminuyeron un 21,3%, de $29.436 millones el año pasado a $23.174 millones durante este último período debido principalmente a una disminución de los precios de compra de la compañía, que quedaron en niveles inferiores a la reexpresión de los costos registrados en el 2021.
En este sentido, el balance informa que en lo que va del año, Metrogas adquirió 2.284 millones de metros cúbicos que representan un aumento del 3,8% respecto de los volúmenes de gas comprados en el mismo período del ejercicio anterior.
En el caso de los costos de compra de gas natural y transporte para comercialización y transporte aumentaron un 24,7% y cerraron en $14.657 millones como consecuencia de un aumento en el precio de compra de gas y a un aumento en los volúmenes comprados.
En cuanto a su liquidez y financiamiento, el endeudamiento de Metrogas era de $17.663 millones, compuesto por $17.655 millones de deuda financiera y el resto por pasivos por arrendamientos. En ese marco, la empresa presentó en este balance un capital de trabajo negativo de $36.624 millones
Reclamos recurrentes
A pesar de haber cerrado este balance con ganancias, la empresa insiste en sus pedidos al Gobierno para que aplique medidas que le permitan mejorar sus ingresos.
Mientras esto no ocurre, sigue aplicando un agresivo plan de control de gastos y reducción de costos para poder mantener sus niveles de servicio y calidad a pesar de que su situación financiera se mantiene complicada y con cierto grado de inestabilidad hacia el futuro, con una parte de la deuda denominada en dólares y expuesta a las variaciones en el tipo de cambio.
En un informe anterior enviado también a la CNV ya advertía que cualquier variación no prevista y abrupta del dólar "resultaría en cambios significativos en los montos necesarios para ser aplicados al pago de servicios de deuda, afectando de tal manera los resultados y la condición financiera".
El mismo impacto tendrían las altas tasas de interés o el aumento de la inflación ya que impactan directamente en una suba de sus costos de operación e influyen negativamente en los resultados de operación y en la situación financiera.
Para el directorio de Metrogas la situación obliga a "monitorear permanentemente la evolución de las variables económico-financieras y el impacto de la Ley de Solidaridad, y las normas derivadas de ella, para adoptar medidas tendientes a disminuir los impactos negativos y su consecuente reflejo en los estados financieros de períodos futuros".
Los ejecutivos también cuestionan el proceso de actualización tarifaria adoptado por el Gobierno por entender que los aumentos se encuentran por debajo del incremento general de precios de la economía y de los costos.
"Ha tenido efectos negativos significativos sobre la liquidez, la posición financiera y los resultados de la sociedad durante el período de seis meses finalizado el 30 de junio de 2022", aseguraban en el informe presentado en julio pasado en la web de la CNV.
Es más, la proyección futura es similar ya que desde la empresa estiman que dichos impactos negativos continuarán "en la medida que no se obtenga una adecuada recomposición tarifaria o se implementen otros mecanismos que permitan equilibrar la situación de liquidez y la posición financiera".
En este contexto, la empresa obtuvo la dispensa formal de todos sus acreedores en relación a los indicadores mencionados debido al deterioro de su liquidez, lo cual la llevó a tener que refinanciar parte de la deuda financiera cuyos vencimientos operaron en los meses anteriores y estima que deberá encarar el mismo proceso con el resto del pasivo que todavía no venció.
"Si la Sociedad no fuera capaz de refinanciar su deuda financiera y/u obtener la dispensa o enmienda de los contratos ante los eventuales incumplimientos de los indicadores financieros establecidos contractualmente, se podría producir la aceleración de los plazos para el pago del saldo total de la deuda financiera pendiente a la fecha del incumplimiento", señalaba el trabajo.