Qué es la dieta GAPS y por qué se desaconseja seguir este plan de alimentación
Hay cientos de planes de alimentación que las personas pueden elegir en relación a sus objetivos, a sus necesidades y a los alimentos que incluyen. La dieta cetogénica, la dieta Atkins, los ayunos intermintenes, entre otros, son algunos de los planes de alimentación que existen actualmente. Cada una de ellas tiene objetivos diferentes e incluye productos distintos.
Una de las dietas más conocidas actualmente es la dieta conocida como GAPS, cuatro letras que hacen referencia a lasa iniciales que tiene en inglés. El nombre preciso de la dieta es Gut and Psychology Syndrome o síndrome psico-intestinal y fue creada por la neuróloga y neurocirujana Natasha Campbell.
¿Qué es la dieta GAPS?
La dieta GAPS es una dieta cuyo objetivo, según lo que explican desde Bussines Insider, es mejorar la composición del microbiota intestinal. Teóricamente, este plan de alimentación se creó, en principio, para aliviar los síntomas de enfermedades inflamatorias intestinales, así como para mejorar los síntomas del autismo.
Creada por la neuróloga y neurocirujana Natasha Campbell, la dieta GAPS (Gut and Psychology Syndrome o síndrome psico-intestinal) es una dieta cuyo objetivo es mejorar la composición del microbiota intestinal.
¿Qué comer y qué no en la dieta GAPS?
Para poder lograr el objetivo que propone la dieta, es de vital importancia dejar de lado el consumo de alimentos de digestión más compleja como los granos, carbohidratos refinados, azúcares, alimentos procesados o verduras con almidón. Se recomienda optar por aquellos ricos en nutrientes.
Algunos ejemplos de estos alimentos serían los productos fermentados, la carne, el pescado, el marisco, el yogur, los huevos, el caldo casero hecho, los frutos secos y los alimentos ricos en grasas como el aceite de coco.
De esta manera, de acuerdo a lo que indican quienes recomiendan esta dieta, también ayuda a desintoxicar el cuerpo, además de contribuir en el desarrollo y funcionamiento del cerebro, pues esta dieta recomienda consumir batidos y zumos de frutas para esta tarea que favorecen ese proceso.
Cómo seguir esta dieta
Para realizarla correctamente es necesario que la persona pase por las 6 etapas, que transcurren entre 1 y 2 meses para evitar problemas digestivos. A partir de ahí se realizará por completo durante al menos año y medio o 2 años.
Es necesario tener en cuenta que cuando se finaliza el período de dieta no se debe reintroducir todos los alimentos que se habían dejado de manera abrupta, sino que es un proceso que se debe hacer poco a poco.
Por qué se desaconseja esta dieta
Según lo que dice la teoría esta dieta podría parecer ideal. Lo mismo sucede con otros planes de alimentación, que parecen perfectos para cumplir con los objetivos que dicen.
Sin embargo, hay expertos que consideran que esta dieta no es apta para la pérdida de peso y ponen en duda los otros beneficios que dice tener, ya que las investigaciones en torno a este tema son muy escasas.
Además, es esencial tener en cuenta que hasta el momento no hay evidencias concretas de que la dieta GAPS realmente tenga un impacto en la salud mental, a pesar de que algunos estudios sí que relacionen el bienestar de intestinal con la salud mental.
Por otro lado, se trata de una dieta demasiado larga y muy restrictiva que recomienda el consumo continuado de alimentos como los jugos de frutas que pueden llegar a tener grandes cantidades de azúcar.
También limita el consumo de otros que sí aportan muchísimo al organismo, como los granos o las verduras, por lo que esta dieta realmente solo deberían seguirla aquellas personas que tengan una recomendación médica.