El BCRA tomó decisión clave que afecta a los ahorristas que invierten sus pesos en plazo fijo
En una decisión que afecta a los inversores que invierten en plazos fijos, el Banco Central de la República Argentina decidió mantener sin modificaciones la tasa de interés que rige a estas colocaciones.
Los últimos datos difundidos por el INDEC de inflación mensual de 12,4% que hubo en agosto generan un duro impacto en los ahorristas que se volcaron a invertir en un plazo fijo tradicional, ya que tuvieron una renta negativa en dicho período. Pese a ello, el Banco Central sostuvo este jueves la misma tasa de interés que venía ofreciendo.
Cabe recordar que después de las elecciones PASO de mediados de agosto, el Gobierno devaluó el tipo de cambio oficial alrededor de 20%, algo que generó que las autoridades también decidan subir 21 puntos porcentuales las tasas para que no pierdan atractivo las colocaciones bancarias. Sin embargo, tras un septiembre sin cambios y con un dólar al rojo vivo, el BCRA decidió no subir los tipos de interés.
Hay un dato preocupante: el stock de esos depósitos a plazo fijo cayó fuerte en términos reales durante septiembre. Esa baja fue del 8,1%. Son pesos que fueron directamente a presionar sobre el tipo de cambio.
Los registros en este comienzo de octubre marcarían una aceleración de esa dinámica perniciosa, por lo que una tasa "congelada" por parte del BCRA podría ahuyentar aun más a los ahorristas de estas inversiones en pesos.
Cuánto rinde un plazo fijo de $100.000
En el caso de que un ahorrista opte por hacer un plazo fijo "tradicional" obtendrá un interés del 9,7% nominal mensual, lo que se traduce en $9.700 de intereses. Sin embargo, a esa cifra hay que restarle la inflación para obtener la rentabilidad real.
Si la inflación de septiembre (que informará en octubre por el INDEC) sube abruptamente y alcanza las 2 cifras (por ejemplo un 14%), entonces la ganancia real sería negativa en un 4%, ya que no se podría conservar el poder adquisitivo de los ahorros.
Plazo fijo versus inflación y dolarización
Las primeras estimaciones que realizan en el equipo de Sergio Massa dan que la inflación de este mes se ubicará por encima del 12,5%. Esa es la proyección de los primeros días.
Hay una gran preocupación por la suba de los alimentos, que supera holgadamente el tope del 5% de los últimos acuerdos de precios. Algunos datos sorprenden: una de las principales fábricas de alimentos del país anunció incrementos de 18% en los precios de los paquetes de fideos.
En las últimas jornadas se exacerbó la dolarización de las carteras de los inversores, ya sean pequeños o grandes. A tal punto, que el martes el Banco Central quebró la racha de 35 jornadas consecutivas de compras de dólares y se vio obligado a vender u$s19 millones. El dato negativo se acentuó este miércoles, dado que el BCRA tuvo un saldo neto negativo de u$s80 millones. Todo un dato de la dinámica de la crisis.
Los principales activos financieros se desploman, suben los futuros del dólar y los depósitos a plazo fijo muestran una caída en términos reales, por primera vez en mucho tiempo.
La creciente dolarización queda, además, en evidencia en las intervenciones del Banco Central en la brecha cambiaria, con el objetivo de enfriar la cotización del dólar MEP.
De acuerdo a las estimaciones de Portfolio Personal Inversiones (PPI), las ventas del BCRA ya superaron los u$s60 millones diarios. El martes fueron por unos u$s85 millones, en una tendencia creciente.
El monto diario ya se acerca a lo que pasó en la semana previa a las PASO, cuando la autoridad monetaria llegó a vender u$s110 millones por día.
Desde que comenzó el año, la intervención en la brecha acumula alrededor de u$s3.000 millones. Más de la mitad de las ventas se concretaron entre agosto, septiembre y los primeros dos días de esta semana.
Esa intervención no alcanza para evitar un salto de la brecha, que ahora superó el 140% y se acerca peligrosamente al 161% que llegó a tener durante la gestión de Martín Guzmán.