Plazos fijos: más argentinos apostaron por efecto tasa y aguinaldo, ¿ganaron o perdieron?
Con la inflación relativamente estancada, los plazos fijos tradicionales volvieron a ganar terreno en junio, mientras los que ajustan por UVA retrocedieron el mes pasado. Así lo muestran las estadísticas publicadas por el Banco Central (BCRA).
En las entidades financieras señalan que el efecto tasa mínima de 30%, junto con el exceso de pesos en la economía y el pago del aguinaldo, explican parte de la mejora en las colocaciones bancarias.
Tal como habían anticipado los expertos, el rendimiento mensual de 2,5% que ofrece el plazo fijo le habría ganado a la inflación de junio, que las consultoras estiman en 2%. Por el lado opuesto, la desaceleración de la inflación por la cuarentena desalentó los depósitos UVA.
Al cierre del mes pasado, el stock de plazos fijos tradicionales registró una suba promedio de 12,6% mensual. El aumento promedio del saldo fue de $192.500 millones. En comparación con los últimos 12 meses, en tanto, esas colocaciones bancarias anotaron un alza de 44%.
De acuerdo con los cálculos de la consultora LCG, esos datos nominales también se traducen en las cifras reales del stock de plazos fijos. Una vez descontado el efecto de la inflación, el saldo de depósitos a plazo creció 9,7% en el mes, aunque cae 2,2% en la comparación interanual.
El informe monetario mensual del BCRA destacó la suma de los plazos fijos en relación con el Producto. "En términos del PIB, estas colocaciones representaron 6,7%, acumulando un aumento de 1,9 puntos porcentuales en el primer semestre del año. Dicho ratio se encontró entre los más altos de la serie, cercano a los máximos observados a principios de 2016 y de 2019", afirmó el organismo.
Mayoristas, tentados por la tasa mínima
La tasa mínima de 30,02% rigió durante todo junio para las colocaciones a plazo fijo de cualquier tipo de cliente. Por ello, se vio una mayor participación de los mayoristas al momento de constituir plazos fijos.
Al separar por segmento, los números muestran que los plazos fijos minoristas cayeron 0,4% real en junio, mientras los mayoristas mostraron un alza de 15,3% real. La tendencia se replica en los números interanuales. En comparación con junio de 2019, los depósitos minoristas mostraron un retroceso real de casi 30% frente a la mejor de 18% de las colocaciones mayoristas.
"El segmento mayorista sigue cautivo del sistema financiero a partir del endurecimiento del cepo que limitó las operaciones en el mercado del dólar MEP y contado con liquidación y esto explica el crecimiento del 15,3% mensual real de depósitos a plazo de más de $1 millón", señaló LCG.
En un banco, comentaron que "desde mediados de mayo se veía un aumento de los plazos fijos mayoristas, pero en junio se disparó, ya que el stock creció 40%".
No obstante, es importante recordar que las empresas que hayan accedido a los créditos subsidiados al 24% no pueden acceder a esa tasa al momento de hacer un plazo fijo.
Minoristas, con efecto aguinaldo
Los datos del sistema mostraron que los clientes de menor patrimonio constituyeron menos plazos fijos en junio.
"En el segmento minorista las colocaciones retrocedieron en términos reales 0,4% contra mayo en un contexto en el cual la tasa mínima regulada por el BCRA para estas colocaciones se ubica 10 puntos porcentuales por debajo de la inflación ex-ante", añadió LCG en referencia a la tasa anual de plazos fijos en comparación con la inflación esperada para los próximos 12 meses.
Pese a ello, en las entidades consultadas aseguraron que el incremento que se empezó a ver desde abril, cuando se publicaron las primeras normativas sobre tasa mínima, se mantuvo en mayo y siguió estable 一o incluso aumentóー en junio.
Desde el sector de Inversiones de Santander Argentina, afirmaron: "El crecimiento de los plazos fijos minoristas es sostenido. En parte, porque hay excedente de pesos y no se registra demasiado consumo pero también hay que considerar que en los meses de junio y julio está el efecto aguinaldo. Además, está también la cuestión de la tasa mínima".
"En términos de individuos, los depósitos en plazo fijo pesos aumentaron un 11,3%, siendo el crecimiento producto de la gran liquidez que muestra el sistema más la estacionalidad propia del mes por efecto del pago del aguinaldo. Además, la tasa regulada hizo que no hubiera transferencia de depósitos entre los bancos", dijeron en Banco Comafi sobre la posibilidad de constituir plazos fijos en entidades sin necesidad de ser clientes.
Además, argumentaron que "el home office adoptado por gran parte de las empresas, la cuarentena social obligatoria y parte de los comercios cerrados disminuyeron los gastos mensuales de los clientes que invierten y les permitieron destinar algo más de dinero a inversiones a plazo".
En otra entidad privada se manifestaron en la misma línea. "Tanto en abril como en mayo hubo un comportamiento positivo. Los depósitos minoristas venían bastante bien y habían aumentado 3% en cada mes. Sin embargo, en junio triplicamos el crecimiento ya que subió 9% el stock", contaron.
Al mismo tiempo, anticiparon que para este mes esperan "un crecimiento similar al de junio" debido a la "gran liquidez en pesos y las pocas alternativas de inversión". "Hay un efecto que tiene que ver con la tasa mínima de 30% y la baja en las expectativas de inflación. Ese doble factor hizo que vuelen los plazos fijos tradicionales mientras se cancelaron los que ajustan por UVA", explicaron en el mismo banco.
Desde una entidad colega, coincidieron: "Tuvimos un crecimiento importante del stock, se puede atribuir a la tasa mínima porque fue un aumento del volumen mayor al visto en los meses anteriores".
Menor inflación, menos plazos fijos UVA
A medida que los datos de inflación se acomodaron debajo de 2% mensual en respuesta al freno económico impuesto por la cuarentena, el interés del público sobre los plazos fijos UVA fue disminuyendo.
Según las estadísticas oficiales, los depósitos que ajustan por inflación hilvanaron la segunda caída mensual. Su stock promedio cayó $4.000 millones, lo que representó un retroceso de 7,6% en el mes.
En su informe monetario mensual, el propio BCRA reconoció la baja: "Los depósitos en UVA mostraron en junio una tendencia descendente, explicada tanto por las imposiciones tradicionales como por las precancelables".
"En abril, los plazos fijos UVA habían crecido 70%; en mayo, habían aumentado 50%. En junio, el aumento del stock fue de solo 7%. Tuvimos más pedidos de precancelaciones de los plazos fijos UVA, ante la baja de los números y las expectativas de inflación futura. Además, hubo un descenso en las nuevas constituciones de este tipo de depósitos", admitieron en una entidad privada.
Por el contrario, en Banco Ciudad apuntaron: "Los plazos fijos tradicionales se mantuvieron estables pero se duplicaron las colocaciones UVA no precancelables".
Depósitos atados al dólar
A mediados de junio, el BCRA lanzó una nueva modalidad de depósitos a tasa variable (DIVA). Se trata de los plazos fijos atados a la cotización del dólar y están reservados para los productores agropecuarios y "por un importe de hasta 2 veces el valor total de sus ventas de cereales y/u oleaginosas registradas a partir del 1 de noviembre de 2019", destacó el informe monetario mensual.
Sin embargo, el reporte no informó datos concretos sobre el stock de plazos fijos de este tipo que, por ahora, solo ofrece el Banco Nación.