El papa Francisco cumple un mes en el hospital y estiman que su dependencia del oxígeno podría ser definitiva

Las condiciones de salud del papa Francisco se mantienen estables, lo cual es un dato positivo, ya que indica que su cuerpo se está recuperando, según informó una fuente vaticana este viernes por la mañana. "Ha pasado una noche tranquila", añadió, en el marco del primer mes de su internación.

Francisco celebra doce años de papado mientras continúa su recuperación en el hospital

El papa fue internado a mediados de febrero en el Hospital Gemelli debido a una bronquitis asmática, a la que se sumó una grave neumonía bilateral que comprometió su vida. Afortunadamente, los médicos han informado que la neumonía está retrocediendo.

El pasado lunes, el Papa dejó de estar "bajo pronóstico reservado" y comenzaron a especular sobre su posible regreso a la Casa de Santa Marta, su residencia en el Vaticano. No obstante, los médicos consideran que aún requiere un tiempo indefinido de "tratamiento hospitalario" para garantizar su recuperación y alejar los riesgos.

Una fuente del Vaticano señaló que la recuperación de un cuerpo de 88 años que ha sufrido neumonía bilateral requiere tiempo, especialmente en términos de energía y fuerza. El jueves, Francisco celebró sus doce años de papado con los trabajadores del hospital, quienes le llevaron una tarta con velas a su apartamento en el décimo piso.

El pontífice dedica el día a realizar ejercicios de fisioterapia respiratoria y motora. Además, sigue a través de una conexión televisiva los ejercicios espirituales que la Curia Romana está llevando a cabo por la Cuaresma en el Aula Pablo VI del Vaticano.

La dependencia del oxígeno del Papa sigue siendo una preocupación médica

El Papa continúa recibiendo oxígeno durante todo el día, utilizando altos flujos a través de cánulas nasales. Durante la noche, recurre a la ventilación mecánica no invasiva, lo que indica que aún experimenta dificultades para respirar.

Según el infectólogo Matteo Basetti, del hospital San Martino de Génova, el pontífice podría llegar a "quedar totalmente dependiente del oxígeno". Por su parte, el virólogo Fabrizio Precliasco señaló que, aunque la situación es de "relativa estabilidad", teme que "probablemente no habrá un mejoramiento consistente". Agregó que podría ser necesario "un soporte nocturno de oxígeno".

Fuentes vaticanas indicaron que "hace falta tiempo para que un anciano con neumonía bilateral se recupere". Añadieron que la situación estacionaria se debe a este proceso, aunque destacaron que el cuerpo del Papa está mostrando signos de recuperación.

También señalaron que "los médicos lo saben, al igual que son conscientes de que el cuadro clínico sigue siendo complejo. Esperan recibir diferentes indicaciones para evaluar las mejoras y ofrecer información más detallada en el futuro".

Putin y la Casa Blanca envían mensajes al Papa en su recuperación

El papa continúa atendiendo los asuntos de la Iglesia junto a sus colaboradores más cercanos. Recibió un mensaje cordial del presidente ruso, Vladimir Putin, quien además de desearle "buena salud", le expresó reflexiones personales, subrayando lo "particularmente útil" que es para el complejo escenario internacional que Rusia y la Santa Sede sigan manteniendo un diálogo.

Este mensaje también hace referencia al canal de comunicación establecido entre la Santa Sede y el Kremlin en el ámbito humanitario, que ha sido efectivo durante los tres años de conflicto, especialmente en momentos críticos, facilitando intercambios de prisioneros de guerra ucranianos y rusos.

En este contexto de relaciones positivas entre el Vaticano y Rusia, se destacan las misiones del cardenal Matteo Zuppi, presidente de la Conferencia Episcopal italiana. El Papa envió a Zuppi el año pasado incluso a China para promover la paz, y Putin en su carta destaca los "esfuerzos significativos" del cardenal en la promoción de la paz y la armonía de los pueblos.

Por su parte, Estados Unidos también intervino para elogiar el papel del Papa. En una declaración de la Casa Blanca, se expresó que "los Estados Unidos valoran la relación de larga data con la Santa Sede, basada en el compromiso común de promover la paz en todo el mundo, fomentar el diálogo interreligioso y proteger la libertad religiosa".