Orlando Ferreres: "La AFIP no puede prorrogar todos los vencimientos de impuestos porque ya va a tener muchos que no se van a poder pagar"
El ex-viceministro de Economía, Orlando Ferreres, dio respuesta a las inquietudes que plantea la coyuntura económica y señaló a Infobae: "hay que apelar al crédito, pero si no hay ventas es más difícil cumplir con los sueldos y otras obligaciones como las fiscales".
"El Gobierno ya adoptado muchas definiciones que incluso, por lo que se ve en los medios de comunicación, todas no se cumplen en su plenitud, pero como evaluación podemos decir que son correctas. Creo que las condiciones actuales de no tener el invierno en nuestra situación nos dieron tiempo suficiente como para observar las experiencias de China y sobre todo las de Italia y España que son países que pueden ir con nuestra idiosincrasia cultural. Tenemos que aplanar la curva de contagios pues esto podría hacernos entrar en problemas en los hospitales y llevaría a muchas personas a la situación más extrema, por falta de respiradores o sistemas de testeo. Me parece que un toque de queda militar no ayudaría mucho a la situación, más que ahora ya hace falta pagar los sueldos o retirar dinero de los sistemas bancarios. El tema también es económico hoy y hay que mirar este aspecto también sin desconocer la gran trasmisión de esta coronavirus en el mundo entero", detalló Ferreres.
Respecto a la situación de las compañías, el economistas señaló: "Creo que cada empresa tiene que resolver el problema de sueldos de acuerdo con sus posibilidades. Por mi experiencia cuando fui director Financiero de una empresa, especialmente cuando había muchos días que por algún conflicto no se trabajaba, se apelaba al crédito bancario. Ahora la situación es bastante distinta pues las aerolíneas, los aeropuertos, el turismo y muchos sectores no trabajan más que de forma remota, salvo la alimentación y bebidas, laboratorios y farmacias y otras. Con lo cual no tienen recursos de venta y es más difícil pagar los sueldos si no hay actividad, por más que no se pague más que lo necesario. En universidades en las que estoy en el tema salarial, se trabaja con clases remotas y esto puede significar algún ingreso aun en esta época. Hay que apelar al crédito, pero si no hay ventas es más difícil cumplir con los sueldos y otras obligaciones como las fiscales y proveedores".
Respecto al Banco Central indicó: "Si bien el BCRA ha flexibilizado la política monetaria, esto no implica que ello sea suficiente para poder hacer frente a todos los compromisos que puede tener una empresa, empezando por los salariales, pues la gente necesita comer y gastar en remedios, amén de otras cosas fundamentales. Creo que el BCRA ha actuado bien, pero la situación es muy difícil de anticipar en todos sus detalles".
En relación al pago de impuestos, Ferreres indicó a Infobae: "La AFIP en mi opinión no puede prorrogar todos los vencimientos de impuestos pues ya van a tener muchos que quizá no se van a poder pagar, pero a los demás que eventualmente puedan no hay más remedio que cobrarles. Sino el déficit fiscal sería muy grande y esto pone en riesgo otras variables económicas, pues todo el dinero tendría que salir del Banco Central y ya es bastante lo que está poniendo este organismo. No se puede descansar solo en la base monetaria, aunque sea por un plazo corto".
Consultado sobre los escenarios económicos de la cuarentena el ex-viceministro de Economía indicó: "Se pueden hacer algunos escenarios según lo que tarde la cuarentena, su prórroga y cuánto demore la población en recuperarse de la enfermedad y varios casos de solución de los temas de la deuda pública. Para este año ya teníamos una caída de 1,4% en el PBI del país del 2020 versus 2019, que ahora en el mejor de los casos seria de una baja en el rango de 4% hasta 8% en el peor de las situaciones. Esto va a depender de las decisiones políticas, de cuantas empresas tengan que cerrar y les sea más difícil la recuperación posterior y del tamaño del problema que queramos seguir sosteniendo con cuarentena total o parcial".
"La economía y el coronavirus están muy relacionados y hay que ver hasta qué punto se puede escuchar a los que razonan desde el punto de vista de la enfermedad, que es muy grave, hay que sumar la economía también, aunque esto no es lo que esperamos", indicó.
En relación a las perspectivas de crecimiento del país, Ferreres puntualizó: "Seguramente vamos a crecer en 2021 y cuánto mayor sea la reducción en 2020, mayor será la recuperación el año siguiente. Creo que las cifras de Guzmán son correctas en el largo plazo, que es lo que tenemos que ver. Hay que observar también la economía internacional, en la cual se aprecian muchas reducciones del PBI, por la COVID-19".
"Creo que es una buena oportunidad para una negociación de la deuda adecuada, pero hay que hacerla ahora y no esperar las cifras de los próximos trimestres. Total se espera una renegociación no para el próximo trimestre o semestre sino para dentro de 2 o 3 años", adelantó el economista.
"Las formas de bajar la deuda son cuatro: 1. Por quita, 2. Por mayor plazo, 3. Por período de gracia, y 4. Por menores intereses. Esa combinación debe darse para obtener lo que pidió el Fondo Monetario Internacional como mayor quita (u$s85.000 millones en 10 años), que no incluye al FMI ni otros organismos de crédito multilateral. Esto significa que la quita debería ser alrededor del 40% tomando todo en consideración y sacando el valor presente de la deuda comparada con lo que tenemos hoy", agregó.
Asimismo, Ferreres aseguró al portal de noticias que la política económica debería tener los siguientes aspectos:
1. Atender el problema sanitario y dar los préstamos y bonos necesarios para mantener a la población en una situación de cuarentena, donde hay una muy alta presión social;
2. Atender el problema de la deuda, con lo cual se disminuyen los escenarios para las proyecciones, los que pasan a depender de nuestra situación interna más el efecto de la economía global; y
3. Encargarse de la situación económica que no debe olvidarse que es secundaria, pero que debe atenderse igual para evitar un mal mayor al que el que se quiere resolver.
Respecto a cómo se imagina a la Argentina para el día después del COVID-19, Ferreres señaló: "Me lo imagino bien, con una reacción rápida después frente a la crisis. Es decir, si bien ahora puede haber una reducción significativa del PBI por tener muchas actividades detenidas, esto puede cambiar rápidamente para el día después de terminada la pandemia. Allí el crecimiento del país puede ser muy rápido e incluso puede cambiar el grado de estatismo que hay en la economía que es bastante alto, dando mayor participación a la actividad privada, aunque esta no fuere la intención original del Gobierno. La realidad nos puede llevar a tener una mejor definición estructural del país. Esperemos que así sea".