¿Conocés los mejores 5 bodegones porteños para comer bien y barato?
La ciudad de Buenos Aires, famosa por su ecléctica y deliciosa oferta culinaria, alberga un tesoro gastronómico que ha capturado el corazón y el apetito de locales y visitantes por igual: los bodegones. Estos establecimientos son auténticos emblemas de tradición y sabor, donde la generosidad de sus platos y el ambiente nostálgico se entrelazan para brindar experiencias gastronómicas inolvidables.
En medio de la vastedad de opciones culinarias de la Ciudad, los bodegones emergen como un faro de autenticidad y calidez. En estos lugares, los comensales son transportados a una época pasada, donde la comida casera y apetitosa era la protagonista. La comodidad de sentirse como en casa se fusiona con la emoción de saborear porciones generosas a precios accesibles, creando una sinfonía que deleita tanto el paladar como el alma.
Ya sea en el mismo corazón de la Capital o en los rincones de la Provincia de Buenos Aires, los bodegones ejercen una fascinación irresistible sobre aquellos amantes de la buena mesa dispuestos a esperar pacientemente en las filas para degustar sus propuestas llenas de sabor y asequibilidad.
Recientemente, una figura en las redes sociales, la instagramer Rocío, bajo su cuenta @lachicadelbrunch, compartió con su comunidad cinco tesoros gastronómicos que conjugan la economía y la abundancia en la Ciudad. "Cinco lugares económicos para comer en Buenos Aires", empieza Rocío, y nos guía por un viaje culinario por los bodegones que, sin lugar a dudas, hacen palpitar los corazones de los aficionados a la buena comida y aquellos que desean satisfacer sus apetitos sin dañar sus carteras.
La primera parada que nos presenta Rocío es "El bodegón de las Abuelas", un rincón acogedor en Villa Crespo (Pasaje Cantina, Rojas 2050). Aquí, los tallarines caseros con tuco y pesto son la estrella, creados con el cariño de las abuelas mismas. Y todo esto por menos de $3.000, que te permite no solo saborear un plato generoso, sino también culminar la experiencia con un budín de pan y chocolate, un placer para los sentidos.
Nuestra siguiente escala nos lleva a "La Conga" (La Rioja 39), en el vibrante barrio de Once, donde la cocina peruana se mezcla con platos excesivamente copiosos. En este caso, la clave es compartir, ya que un solo plato puede saciar a tres personas. Con un promedio de $2.500 por cabeza, la relación calidad-precio se torna imbatible.
El "Restaurante Cervantes" (Juan Domingo Perón 1883) es nuestra siguiente parada recomendada por Rocío. Sin lujo ostentoso, este lugar se erige como uno de los más económicos, con los ñoquis estofados como su carta de presentación. Aquí, por alrededor de $3.000 por persona sin incluir vino, se puede disfrutar de autenticidad y sabor en cada bocado.
No podemos dejar de visitar "Antigoumet" (Soler 5901) y deleitarnos con su famoso sándwich de milanesa. Aunque el sándwich tiene un costo de $4.000, este precio es para dos personas, y se suma a la tentación de una provoleta con panceta y huevo frito que no puedes resistir.
Y finalmente, cerramos nuestra travesía culinaria en "Doña Cocina" (Bulnes 802), en el barrio de Almagro. Aquí, las fuentes de pasta con salsa incluida tienen un precio promedio de $2.500. Lo que destaca aún más es que toda la pasta es amasada en el propio salón, garantizando una frescura que se refleja en cada bocado. Los fusilli escarparo y los Sorrentinos Príncipe de Nápoli son algunas de las opciones que no puedes dejar de probar.
Así concluye el recorrido gastronómico propuesto por Rocío, una mirada a los bodegones más asequibles y llenos de sabor de Buenos Aires. Una guía invaluable para quienes desean satisfacer su apetito por la autenticidad culinaria sin hacer estragos en sus presupuestos.