Por qué el argentino trabaja más días para pagarle al Estado que para sí mismo, según el abogado Martín Litwak
Martín Litwak es un abogado argentino especializado en planificación patrimonial internacional y estructuración de fondos de inversión. Es el fundador de Untitled (anteriormente conocida como "Litwak & Partners"), un estudio de abogados boutique y el primer Legal Family Office de América, y actualmente se desempeña como CEO de la firma que tiene sede en Miami, Estados Unidos.
Obtuvo su título de abogado cum laude en la Universidad de Buenos Aires (Argentina) en 1998 y, dos años más tarde, su maestría en finanzas en la Universidad del CEMA (Argentina). Posteriormente, su práctica profesional también fue habilitada en Inglaterra & Gales y en las Islas Vírgenes Británicas.
A lo largo de su dilatada carrera profesional, durante la cual vivió y trabajó en Argentina, en las Islas Vírgenes Británicas, en Uruguay y finalmente en Estados Unidos, Litwak se ha concentrado mayormente en el asesoramiento a familias de alto poder adquisitivo con respecto al establecimiento y administración de estructuras fiduciarias.
Litwak sonó como posible candidato a embajador durante el gobierno de Mauricio Macri, luego de la salida de Martín Lousteau, principalmente por su buena llegada a la familia Trump y su círculo. Este es el diálogo que mantuvo con iProfesional:
El caos de los impuestos
-En medio de la discusión por un impuesto a la riqueza, que tiene el aval político del gobierno, ¿cuál es la reacción de tus clientes?
-Los clientes están cansando de los tributos que existen en la Argentina y de los rumores que siempre hay sobre esto. Argentina se está transformando en un país donde es imposible emprender y generar riqueza. De todas formas, la mayor parte de la gente piensa que este impuesto no va a salir, porque es un impuesto que además de ser ineficiente y no recaudaría nada, la mayoría lo ve como algo inconstitucional porque ya existe el impuesto a la riqueza que se llama Bienes personales.
Es casi igual de grave el aumento de la presión fiscal como la amenaza permanente. Eso tiene que ver también con la inseguridad jurídica.
-Vos estructurás patrimonios de personas con alto poder adquisitivo, millonarios en algunos casos. ¿Se cansaron de la Argentina y se están yendo?
-Nosotros estructuramos el patrimonio de personas con mucho poder adquisitivo, pero también medianos y algunos pequeños. Cualquiera en la Argentina que tenga un ahorro quiere protegerlo. No sólo de la presión fiscal sino también de la inseguridad jurídica. Fundamentalmente de ésta última. La planificación patrimonial está al alcance de todos. Y es cierto que muchos se cansaron, otros se cansaron antes, y mucha gente está pensando en emigrar no sólo a Uruguay sino a otros países.
-¿Qué alternativas tienen las personas que no se quieren ir de la Argentina pero necesita poner a resguardo su patrimonio?
-No todos se pueden ir del país o quizás no quieren. Cuando uno no se puede ir lo que hay que usar son las herramientas que hay para planificar cómo cuidar el patrimonio. Ver si uno puede llevar afuera parte del negocio, pero en serio. Armar una estructura donde pueda tener operaciones en otro país porque facturar en otro país implica tener ventajas tributarias y en cuanto al régimen del tipo de cambio.
Si uno no puede ni mudarse ni pasarse a otra actividad, como sucede con la gente del campo, en ese caso lo que hace la gente es resguardar sus activos que estén fuera del país. Cuando uno hace eso obtiene más beneficios.
Inseguridad jurídica y su rol
-Siempre en la Argentina, sea por las crisis o las razones que sean, el Estado no hace el ajuste y le pide al contribuyente siempre más. ¿Hay algún caso similar de tanta presión tributaria como la Argentina?
-Definitivamente no hay ejemplos de tanta presión fiscal como la Argentina. El país tiene la mayor cantidad de impuestos del mundo, 170 impuestos, donde más días se trabaja para al Estado que para uno mismos. El día de liberación fiscal suele estar en agosto o fines de julio cuando en otros países eso ocurre en abril o mayo. El argentino trabaja más para darle plata al Estado que para sí mismo.
Puede haber casos de algún país puntual con algún impuesto puntual que sea más alto que en la Argentina, pero en la cantidad de impuestos y en la presión fiscal el país tiene el record mundial. Y esa es una de las razones de por qué el país no crece. El sistema tributario hace que ni el país ni su población se pueda desarrollar y es lo primero que habría que cambiar.
Hay que entender que la gente no busca jurisdicciones offshore básicamente para pagar menos impuestos, la principal preocupación de esa gente es la falta de seguridad jurídica. La amenaza constante de nuevos impuestos, la interpretación caprichosa de la ley, esta sensación de que no hay justicia y demás.
-¿Qué países tienen las políticas más atractivas para atraer a los contribuyentes argentinos? ¿Influye que tengan tratados de intercambio de información con el país?
-El intercambio de información no es tan relevante acá, lo es más cuando uno estructura activos financieros y cuando el objetivo de la familia pasa por la privacidad. Si cambio mi residencia con otro país ya no va a haber intercambio con Argentina a pesar de que haya un tratado, el tema es hacer el cambio bien y no tanto el tema de los tratados. La clave es evitar la doble tributación, darte de baja en la argentina y estar de alta en tu nuevo país pero sin tener que tributar en 2 países.