Depredación en el sur: chinos controlan barcos argentinos y Prefectura ya detectó capturas ilegales
La actividad de los buques que efectúan pesca ilegal al borde de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la Argentina no deja de ganar en intensidad durante este inicio de 2025. Pero otro aspecto no menor en ese extractivismo está dado por el control cada vez más evidente que las compañías chinas poseen sobre buques de bandera argentina. Así, en este primer tramo de año una de las particularidades en la flota que captura sobre todo calamar en el Atlántico Sur radica en que buena parte de las embarcaciones que partieron desde los puertos de Buenos Aires y Belgrano, este último muy cerca de Bahía Blanca, poseen tripulaciones asiáticas en su gran mayoría. Las empresas orientales se cuidan de no quebrar la ley manteniendo mandos argentinos. A la par de estos buques, se estima que alrededor de 500 unidades extranjeras se acumularán en torno a la ZEE para efectuar pesca ilegal en estos meses.
La presencia de tripulantes chinos en buques con bandera nacional viene siendo reportada por los gremios del sector y sendas publicaciones especializadas. Entre diciembre y el inicio de enero, sólo desde Puerto Belgrano partieron buques "poteros" –como se denomina a aquellos que se centran en la captura del calamar– con nombres chinos como Hu Yu 962, Hu Shun Yu 06, Hu Yu 961 y Hu Shun Yu 07 aunque ondeando bandera argentina.
Al mismo tiempo, señala la revista Pescare, desde la terminal porteña se dio el caso de la flotilla integrada por los poteros Lu Qing Yuan Yu 280, 286, 287, 275 y 277, también con la proa puesta hacia el Atlántico Sur.
"Aunque estas embarcaciones operan bajo bandera argentina y pertenecen a empresas nacionales, su administración responde mayoritariamente a intereses chinos. De hecho, las áreas operativas clave a bordo, como las secciones de pesca y máquinas, están en manos de tripulantes experimentados asiáticos, aunque las posiciones de la oficialidad son argentinas cumpliendo con la legislación argentina vigente", indicó la publicación.
Buques chinos depredan en el Atlántico Sur
Los analistas de la actividad también destacan la injerencia de capitales españoles en el negocio pesquero local. Otro rasgo de los movimientos de los buques en el sur está marcado por la presencia de unidades "bajo banderas de conveniencia como Vanuatu, pero vinculados a intereses chinos".
La mención a Vanuatu no es casual: en el inicio de año, Prefectura Naval Argentina (PNA) detectó a pesquero XinRun 579, con bandera de ese país de Oceanía pero tripulación china, haciendo capturas ilegales dentro de la ZEE.
Según se informó, el buque en cuestión "fue detectado ingresando a la Zona Económica Exclusiva Argentina el 5 de enero cerca del mediodía y se mantuvo en el sector hasta entrada la tarde, navegando a una velocidad menor a 6 nudos, hecho que acorde la normativa pesquera argentina, constituye la presunción de que el buque se encontraba en tareas de pesca".
La detección del buque redundó en la intervención del guardacostas GC-25 Azopardo, que interceptó la embarcación y procedió a informar las sanciones administrativas pertinentes. Muy cerca del XinRun 579, pero ya del otro lado de la milla fijada como límite, PNA detectó la presencia de otras seis embarcaciones de nombre similar (XinRun 179, 579, 679, 779, 879 y 979) por lo que se dio por descontado que el infractor opera dentro de esa mini flota.
La flota china, en movimiento hacia la Patagonia
Al margen de las empresas chinas que ya controlan buques argentinos, lo cierto es que la flota de pesca distante de la potencia asiática comenzó a trasladarse hacia el Atlántico Sur el en transcurso de diciembre.
Según datos de la PNA, sólo en los últimos días del mes pasado se detectó el arribo de 60 buques provenientes de Chile a través del Estrecho de Magallanes y se estima que la "armada" acumulará 500 embarcaciones hacia fines de enero.
En cuanto a las características de la "armada" asiática, el tamaño de la flota creció al menos un 800 por ciento en la última década y todo indica que la potencia asiática incentivará aún más el arribo de sus embarcaciones al Atlántico Sur.
A estos números hay que añadirles una flota que, integrada por embarcaciones de la misma Argentina y mediante asociaciones, arriendos, y hasta la entrega de licencias de pesca, operan al servicio de la voracidad pesquera asiática.
Los buques chinos por lo general fondean en el límite de la ZEE a la altura de la ciudad de Comodoro Rivadavia. El negocio de depredación que llevan a cabo los barcos asiáticos mueve más de 700 millones de dólares al año.