Un emblema porteño, en caída: San Telmo suma 700 comercios en peligro y un mercado casi "fantasma"
El declive que evidencian las principales zonas comerciales de la Ciudad a raíz del Covid-19 y la cuarentena impuesta suma, cada día, nuevos capítulos a una novela indiscutidamente de terror.
En ese sentido, el barrio de San Telmo, con su tradicional paseo de tiendas, galerías y locales gastronómicos, aparece como una de las áreas más golpeadas por el parate en tanto el 90 por ciento de su actividad depende de un turismo hoy inexistente.
Cerca de 700 puntos comerciales sufren una afectación directa por la ausencia de visitantes y alrededor del 50 por ciento de ese número aún no volvió a reabrir sus puertas desde que se activó el aislamiento social en marzo.
En ese paisaje de persianas bajas se destaca el tradicional Mercado de San Telmo, que hoy nuclea a un grupo cada vez más acotado de comerciantes que pelean por mantener la vida comercial del lugar.
Apenas un puñado de verdulerías y carnicerías, y tres locales gastronómicos adaptados al delivery y el "take away", operan de lunes a viernes -la Ciudad mantiene el veto al funcionamiento del grueso de los rubros gastronómicos durante el fin de semana- mientras crece el cierre definitivo de puestos y la venta de fondos de comercio.
Según indicaron a iProfesional empresarios pyme que operan en el mercado, los comercios que se mantienen en sus lugares sobreviven a partir del pago fraccionado de los alquileres -previo acuerdo con los propietarios-, ventas puntuales de alimentos en el caso de los gastronómicos, y el consumo de ahorros propios mientras se aguarda por un retorno del turismo que podría tomar forma con la eventual vuelta de los vuelos a partir del mes de julio.
"Le estamos poniendo garra. El mercado no abre todas sus puertas, en mi caso comercializo productos regionales y estamos de lunes a viernes. Hacemos envíos. En el mercado cuento con 4 empleados y enormes dificultades para cubrir los sueldos. El banco nos dio el crédito al 24 por ciento pero tomando en cuenta el monto de los salarios de febrero, así que no nos alcanza además de generarnos un endeudamiento hacia adelante", contó a este medio una comerciante del paseo.
"En el caso del alquiler, logramos que el propietario nos permita pagar sólo una parte. Por otro lado, observamos lo complicada que está toda la cadena de producción de los artículos que luego vendemos en el mercado. Antes recibíamos productos de Salta, Catamarca, Jujuy, ahora todo ese trabajo está totalmente parado en el Norte por la pandemia. Dependemos que vuelva el turismo, que representa casi la totalidad de las ventas que hacemos usualmente", añadió.
El titular de una panadería y restaurante también instalado en el interior del Mercado de San Telmo acercó más precisiones respecto del escenario comercial en ese punto clave del turismo en la Ciudad.
"El restaurante está cerrado, la panadería sí sigue funcionando. Arrancamos un delivery de pizza para ocupar un poco la cocina, pero creo que no vendemos más de 5 por día", confesó ante iProfesional.
"Pasamos nuestra panadería a un puesto que da a la calle. Después en el mercado sólo abren 2 o 3 restaurantes, las verdulerías y las carnicerías. Está prohibido sentarse y (el producto) sólo se puede llevar", añadió. El empresario pyme sostuvo que, por estos días, suman tres los fondos de comercio a la venta y que corresponden a los rubros de pescadería y gastronomía -crepería, en concreto-.
Todo San Telmo, en riesgo
En diálogo con iProfesional, Edio Bassi, presidente de la Asociación de Comerciantes, Empresarios y Profesionales del Casco Histórico de la Ciudad, comentó que todo el polo comercial de San Telmo enfrenta grande dificultades económicas y que peligra la supervivencia de los 700 locales de la zona.
"Las galerías comerciales, por ejemplo, siguen sin habilitación para volver a abrir. Hay dos que son complejos cerrados y tres instaladas en casas antiguas, abiertas, con patios y lugar para la movilidad. Le estamos solicitando al Gobierno porteño que, justamente, permita la reapertura de esos espacios", comentó.
En términos de afectación, a la par del mercado tradicional, Bassi mencionó a los "bares nocturnos" como los emprendimientos que más vienen sufriendo la cuarentena. "No pueden realizar ningún tipo de delivery. La gastronomía en general, las casas de antigüedades, están muy complicadas también. Todo el paseo de los domingos está gravemente afectado, ni hablar de los hoteles", expuso.
"Las ferias de los domingos en la actualidad tampoco pueden trabajar. El riesgo de un cierre definitivo de una enorme cantidad de locales es algo que crece cada día. Hoy San Telmo, los comercios de la zona, están en una pelea de resistencia para ver quién sobrevive a este momento", concluyó.