El dólar blue cayó $20 y llegó al precio más bajo desde principio de julio: ¿se activa la fase 3?
En la primera rueda de la semana, el dólar blue se vendió este lunes con una baja de veinte pesos, $1.415 en las cuevas del microcentro porteño. Se trata de la cotización más baja desde el 2 de julio, cuando había llegado a los $1.405. En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación se negoció a $1.294, mientras que el dólar MEP operó en $1.296.
El gobierno argentino trazó una hoja de ruta ambiciosa para estabilizar la economía y superar la crisis. La estrategia, que bautizada como "Fase 3", apunta a un superávit fiscal, una política monetaria restrictiva y, eventualmente, la eliminación del control de cambios y la libre competencia entre monedas. Sin embargo, esta transición plantea una serie de desafíos y riesgos que podrían complicar el camino hacia la recuperación.
Los expertos advierten que la inflación podría no ceder al ritmo esperado, especialmente si la brecha cambiaria no se reduce significativamente. La persistencia de la inflación podría dificultar el anclaje de las expectativas y socavar la confianza de los inversores.
Por otro lado, señalaron que el tipo de cambio real se encuentra actualmente subvaluado debido al control de cambios. Si bien el gobierno busca mantener esta situación para favorecer las exportaciones, existe el riesgo de que el mercado se vuelva "irracional" y exija una devaluación abrupta.
Además, alertaron que las reservas netas del Banco Central se encuentran en niveles críticos, lo que podría dificultar el pago de la deuda externa y generar presiones sobre el tipo de cambio. En paralelo Un alto riesgo país limita el acceso de Argentina a los mercados de capitales. Si la situación no mejora, el gobierno podría verse obligado a renegociar la deuda o recurrir a organismos multilaterales.
A pesar de los desafíos, el gobierno ha comenzado a flexibilizar gradualmente el control de cambios, lo que se considera un paso necesario para avanzar hacia una economía más abierta. Sin embargo, la falta de dólares en el mercado y las perspectivas económicas inciertas generan dudas sobre la sostenibilidad de esta política.
Argentina se encuentra en un momento crucial de su historia económica. La transición hacia la Fase 3 plantea una serie de desafíos y oportunidades. El éxito de esta estrategia dependerá de la capacidad del gobierno para controlar la inflación, fortalecer las reservas internacionales y restaurar la confianza de los inversores. Sin embargo, los expertos advierten que el camino hacia la recuperación será largo y lleno de obstáculos.
La transición hacia la Fase 3
De acuerdo con el bróker GMA Capital, el gobierno apuesta por el superávit financiero y un marco "duro" de política monetaria para torcer la mano del mercado y promover una descompresión en la brecha y facilitar el sendero de desinflación. En este sentido, estimaron que el logro de estos objetivos permitiría la introducción de la "Fase 3", que implicarían la salida del cepo y la competencia de monedas.
Sin embargo, los expertos explicaron que la estrategia encarna una serie de riesgos: el primero, es que la inflación no ceda a la velocidad planeada, dado que la Fase 2 todavía no incluye el desmontaje de las restricciones cambiarias, la fecha especial del evento podría continuar pesando sobre todas las decisiones financieras y podría dificultar anclar expectativas a la baja si la brecha no cediera.
"Vinculado con la dinámica nominal, una segunda fuente de riesgo se relaciona con el atraso cambiario. Parafraseando a Keynes, el mercado puede permanecer irracional (o desconfiado) más tiempo del que el Gobierno puede sostener la competitividad. Si bien no hay consenso de cuál es el tipo de cambio real de equilibrio, sí hay bastante acuerdo en torno a que este valor no lo es porque hay cepo. Aunque el nivel no luce amenazante, sí lo podría ser la secuencia de inflación mensual de 4% y crawl de 2% durante un tiempo prolongado", advirtieron.
En tercer lugar, indicaron que, como el BCRA decidió sacrificar capacidad de acumulación de divisas para cerrar una canilla de emisión de pesos, la historia de las reservas netas (hoy en terreno negativo de u$s2.800 millones) podría agregar cuotas de dramatismo de cara al rollover de vencimientos de 2025, dado que hay casi u$s 9.000 millones solo en bonos en dólares.
"El tiro podría salir por la culata si todas estas condiciones no son suficientes para que los inversores demanden ahora mismo títulos en dólares. Es decir, si el riesgo país no se hunde pronto por debajo de los 1.000 puntos básicos, el acceso al mercado internacional se postergaría aún más. Y esta situación metería presión o para reestructurar, o para conseguir financiamiento de un organismo multilateral, o sobre el tipo de cambio real para hacer el ajuste externo necesario para obtener dólares por la vía comercial que no aparecen por el canal financiero", advirtieron.
Desarmando el cepo
De acuerdo con un informe de Delphos Investment, las reservas brutas alcanzaron los u$s 27.302 millones, el menor nivel desde marzo y las reservas netas siguen negativas cerca de los 5.000 millones si se cuentan los vencimientos de u$s 2.000 millones de BOPREAL en los próximos 12 meses.
"En este contexto el gobierno tomó medidas para flexibilizar del cepo cambiario. Se acortaron los plazos de pagos de las importaciones a partir del 1 de enero, se amplió la franquicia para exportaciones de la economía del conocimiento y se relajaron las restricciones para operar CCL/MEP instauradas como consecuencia de las ayudas estatales en la pandemia o por los subsidios a los servicios públicos", indicaron.
Según los analistas, la iniciativa representa "un paso adelante" en la normalización de flujos externos, por lo que mantienen la visión sobre una flexibilización progresiva del cepo, que incluye el incremento del acceso de personas y empresas al mercado oficial de cambios, la reducción del "blend" y la finalización del impuesto PAIS, quedando además la posibilidad de compensar estos cambios mediante un ajuste del tipo de cambio oficial.
No obstante desde de la consultora económica Invecq, indicaron que la incógnita pasa por dónde saldrán los dólares, producto de que los anuncios se dan justo en un momento en el que la dinámica cambiaria se alteró de manera notable, y en donde las perspectivas hacia adelante tampoco son favorables.
"Si bien era esperable que el BCRA pierda reservas en el segundo semestre -estaba estipulado en el acuerdo con el Fondo-, dicho período se adelantó y ahora los ojos se posan sobre los próximos meses. De no haber una recalibración del esquema cambiario, las RIN oscilarán en niveles sumamente bajos en lo que resta del año, lo cual atenta contra la eliminación de las restricciones vigentes. ¿Qué podría alterar el panorama? Otro acuerdo con el FMI, que incluya nuevos desembolsos -además de una modificación en la política cambiaria-", señalaron.
La actividad ya vio el piso, pero ¿cuándo verá la luz?
Para GMA Capital, después de haber peregrinado 8 meses en terreno recesivo el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), proxy del PIB argentino, se recuperó 1,3% en mayo. Y en la medición interanual, la mejoría alcanzó 2,3%. Sin embargo, aunque hay buenas sensaciones en los últimos dos meses que invitan a pensar que el piso de la recesión estuvo entre marzo y abril, detallaron que los monitores económicos avizoran debilidad en junio.
"El escenario de recuperación está postergado. Las fases de desarmes del cepo podrían tener la clave para acelerar el proceso. La reducción del impuesto PAIS prevista para septiembre podría mejorar los costos de la industria. ¿Puede el sector agropecuario seguir siendo el líder? Lo determinará el apartado cambiario, específicamente la brecha cambiaria y las expectativas de devaluación, dos aspectos que llevaron a una liquidación actual por debajo del promedio histórico", indicaron.
Según los expertos, bajar la inflación a toda costa es el objetivo primordial del gobierno, quien tolera extender la recesión y el atraso cambiario para facilitar su tarea. Más allá de esto, la ausencia de medidas cambiarias y la postergación de la salida del cepo perpetúan el amesetamiento de la actividad económica.
A cuánto cotiza el dólar blue hoy
El dólar blue se ubicó en $1.415 para la venta y a $1.390 para la compra.
Cómo operan los dólares financieros
En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación se negoció a $1.294, mientras que el dólar MEP operó en $1.296.
Cuál es el precio del dólar oficial
La cotización del dólar minorista del Banco Nación cerró a $950,50.
El dólar mayorista se negoció a un promedio de $932.
Por su parte, el dólar solidario y dólar tarjeta se ubicaron en $1.520,80.
La brecha cambiaria
Por último, la brecha cambiaria entre el dólar mayorista y los diferentes tipos de cambio, se encuentra de la siguiente manera:
• Blue: 52%
• CCL: 39%
• MEP: 39%