• 16/12/2024

Certificación negativa de ANSES como autónomo o monotributista

La certificación negativa de ANSES es esencial para una gran cantidad de trámites, especialmente para aquellos relacionados con prestaciones sociales
16/09/2023 - 08:00hs
Certificación negativa de ANSES como autónomo o monotributista

La certificación negativa de ANSES es de suma importancia para realizar una gran variedad de operaciones, sobre todo cuando se accede a ciertas prestaciones sociales como, por ejemplo, un plan social.

Sin embargo, al aparecer la leyenda "no es posible emitir la certificación debido a que registras transferencias como autónomo o monotributista" no podrás obtener la mencionada certificación.

¿Qué significa registrar transferencia como autónomo o monotributista?

En términos simples, la certificación negativa de ANSES registra que no tenés ningún tipo de ingreso formal ni ayudas del Estado. Este certificado suele solicitarse para acceder a ciertas prestaciones como, por ejemplo, inscribirse en planes sociales.

En el caso de que ANSES registre operaciones como autónomo o monotributista, no podrás realizar la operación. Esto se debe a que estarías contando con ingresos formales, por lo que la solicitud no sería válida.

¿Qué significa "no es posible emitir la certificación debido a que registrás transferencias como autónomo o monotributista"?

Como mencionamos anteriormente, la certificación negativa de ANSES es un comprobante que, en términos simples, certifica que no tenés ingresos formales como tampoco beneficios por parte del estado (como un plan social).

Al aparecer la leyenda "no es posible emitir la certificación debido a que registras transferencias como autónomo o monotributista" no podrás completar la solicitud, ya que ANSES detectó que sos monotributista o autónomo y realizaste operaciones formales.

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ANSES se encarga de emitir la certificación negativa

¿Cuál es la diferencia entre autónomo y monotributista?

La diferencia entre autónomo (mejor conocido como responsable inscripto) y monotributista son varias. En este sentido podemos destacar las siguientes:

  • Tipo de pago: el monotributista es un régimen simplificado en el que, en una sola cuota mensual, agrupa el componente impositivo nacional (IVA y Ganancias) más los aportes previsionales (obra social y jubilación). En cambio, en el caso de los autónomos, estos deben inscribirse en cada impuesto de forma individual
  • Pago mensual: en el caso del monotributista, durante los meses anteriores a la recategorización y siempre que no quede excluido, paga en función a su categoría. En cambio, el autónomo debe generar una declaración jurada individual por cada tributo y paga en función a los ingresos de ese mes
  • Pago de tributos provinciales: en el caso del monotributo, recientemente incorporaron la opción de pagar Ingresos Brutos (aunque no se incluyen otros impuestos provinciales ni tasas municipales) de forma unificada siempre y cuando se cumplan algunas condiciones como, por ejemplo, ejercer tu actividad en una sola jurisdicción. En cambio, en el caso de los autónomos, independientemente de su actividad deberán generar una declaración jurada mensual, junto con una anual, de los ingresos que obtuvieron. Además, al igual que los monotributistas que no estén adheridos al régimen unificado, sufrirán retenciones a cuenta de este tributo
  • Limitaciones: el monotributo suele tener muchos limitantes como, por ejemplo, a los ingresos brutos que se pueden obtener anualmente, la cantidad de energía eléctrica consumida, entre otros. En cambio, este tipo de limitaciones tan estricta no se aplican (al menos de esa forma) al trabajador autónomo

Cómo se calcula el Impuesto a los ingresos brutos

Para calcular el Impuesto a los Ingresos Brutos, sin estar en el régimen unificado, se toma como base imponible la totalidad de los ingresos del contribuyente y se aplica una alícuota que, por lo general, es del 3% al 3,5%. A dicho porcentaje se le debe descontar las retenciones sufridas que, por lo general, son del 2,5% aunque el porcentaje varía según cada persona.

Sin embargo, debido a su complejidad, siempre es aconsejable contar con el asesoramiento de un contador público.

¿Cómo saber mi categoría de monotributista?

Para saber tu categoría de monotributista es necesario tener en cuenta todos los aspectos del monotributo: tipo de actividad, superficie afectada al negocio, cantidad de energía eléctrica consumida, alquileres devengados mensualmente, ingresos brutos, entre otros.

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Para saber tu categoría de monotributista deberás tener en cuenta varios aspectos como el tipo de actividad que desarrollás

Dependiendo de la categoría del monotributo es la cuota mensual que deberás abonar. En este sentido, de momento, los pagos mensuales son los siguientes:

  • Categoría A: $5.750,75 mensuales para prestación de servicios y venta de bienes muebles
  • Categoría B: $6.430,38 mensuales para prestación de servicios y venta de bienes muebles
  • Categoría C: $7.351,10 para prestación de servicios y $7.226,83 para venta de bienes muebles
  • Categoría D: $9.245,06 para prestación de servicios y $9.040,47 para venta de bienes muebles
  • Categoría E: $12.776,61 para prestación de servicios y $11.629,37 para venta de bienes muebles
  • Categoría F: $15.712,40 para prestación de servicios y $13.856,32 para venta de bienes muebles
  • Categoría G: $18.347,44 para prestación de servicios y $15.855,59 para venta de bienes muebles
  • Categoría H: $31.347,16 para prestación de servicios y $26.743,66 para venta de bienes muebles
  • Categoría I: $38.464,47 para venta de bienes muebles
  • Categoría J: $44.390,28 para venta de bienes muebles
  • Categoría K: $50.717,92 para venta de bienes muebles

Es importante señalar que tu caso podría tener particularidades no contempladas en este instructivo, por lo que te recomendamos consultar con un contador público matriculado. Además, en algunas cuestiones tributarias, podrías necesitar el asesoramiento de un abogado especialista en materia tributaria.