• 23/11/2024

El drama de la inflación: ¿qué caos recibe el próximo gobierno y qué nivel de crisis deberá gestionar?

La inflación está fuera de control. Los elementos de la canasta básica tienen aumentos de 3 cifras, lo cual es aún más grave al compararlo con los salarios
20/09/2023 - 15:22hs
El drama de la inflación: ¿qué caos recibe el próximo gobierno y qué nivel de crisis deberá gestionar?

La gestión presidencial que vendrá por delante tendrá como objetivo cambiar el pensamiento social y cultural de una generación política que intenta mejorar su resultado eleccionario en forma permanente a costa de prometer una mejora de la calidad de vida del electorado, pero al precio de - inflación descontrolada mediante- deteriorarla permanentemente.

Un contrasentido existente en Argentina. Desde la actual gestión de la cartera de Economía se han tomado más de 20 medidas con la búsqueda de mejorar ingresos, bajar impuestos o expandir el crédito por un total de $3 billones. Esto representa ni más ni menos que el 58% del déficit fiscal de todo el primer semestre de 2023, 78% del Monto de financiamiento que consiguió el tesoro en todo el año y 86% de los vencimientos de Deuda entre septiembre y diciembre 2023. A su vez, se ha sumado bono para los jubilados por $15.000 entre octubre y diciembre además de suba del salario mínimo vital y móvil que impacta en jubilaciones y pensiones y planes sociales. Este plan expansionista tiene pendiente, a su vez, mayor colocación de deuda local con pasivos remunerados en el banco central por $28 billones.

Desde la expansión fiscal y actual política monetaria se está agravando el cuadro del paciente diluyéndose las ayudas y beneficios cada vez más rápido, siendo un perjuicio mayor en un corto plazo. Los daños serán mucho mayores que los problemas que se desean contener en la cura. Desequilibrio fiscal y monetaria, aumento de la inflación y recesión será la herencia a corregir por delante en un estadío cada vez más preocupante. 

Impacto de la inflación descontrolada en la canasta básica

Si tomamos los principales productos de la canasta básica en todo el período presidencial (diciembre 2019 – agosrto 2023), se puede ver que la papa aumentó un 1.855%, el azúcar un 1.622%, la naranja un 1.342%, el tomate 1.212% y huevos 1.055%, entre otros. Es decir, en 45 meses se tuvieron aumentos de más del 1.000 por ciento.

 

El drama de la inflación, más grave al comparar con los sueldos

La problemática inflacionaria se encuentra fuera de control. Mientras los elementos de la canasta básica tienen aumentos de 3 cifras, al compararlo con los salarios, veremos que la situación es aún más problemática.

En el mismo período de tiempo, los salarios privados no registrados aumentaron un 380%, el salario privado registrado un 504%, y el salario del sector público en 520%. Mientras los productos de la canasta básica suben por el ascensor en un 639%, los ingresos de los trabajadores van por las escaleras, siendo los más perjudicados los que tienen en empleos no registrados.

 

Si bien la inflación de agosto es del 12,4% y el valor más alto en 32 años, las proyecciones para 2024 no son de las mejores. Mientras se debate sobre el bimonetarismo o dolarización, pocos candidatos hablan sobre qué van a hacer en los primeros días de gobierno para restablecer los equilibrios sin que el peso termine en destrucción total.

Es como pedirle a un conductor que va a 400 km/h que baje su velocidad a permitida de 60 Km/h sin transición en el medio. Es lo que sucederá en la transición: la velocidad no se podrá reducir sino incluso incrementar para luego con un buen plan de manejo poder ir desacelerando, embreagando y bajando el cambio mendiante una política fiscal y monetaria sólida y creíble.

Argentina lidera el ranking de inflación entre los países del BRICS

El gobierno nacional, en este sentido, no solo está tomando medidas paliativas fiscales y monetarias, sino que en el plano internacional se está por incorporar al bloque de países del BRICS (5 economías emergentes más poderosas del mundos: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica que equivalen al 25,7% del PBI mundial, 16,1% de las exportaciones mundiales, 14,9% importaciones, el 40,8% de la población y 29,5% de la superficie del planeta).

Su objetivo es promocionar acuerdos bilaterales de comercio y encontrar mayor financiamiento de proyectos a través de un Nuevo Banco de Desarrollo. Este bloque no implica un grupo de países de libre comercio ni menos aun reducir aranceles sino que se parece más bien a un acuerdo de gobiernos y no de mercados. Si sumamos las condiciones básicas iniciales con las que ingresaríamos al bloque, veremos que en el mismo período de nuestro país es el que más inflación acumuló, por lo que sin una macro aliviada los beneficios comerciales serían nulos para nosotros.

 

Si focalizamos el análisis a nivel Sudamérica para el mismo período, acumulamos mayores niveles inflacionarios que hace que ningún acuerdo, bloque o unión comercial sea factible sin encontrar una solución a la crisis inflacionaria.

 

El fantasma de la hiperinflación

La inflación es hoy el mayor de los problemas que tenemos. Es inevitable que aparezcan los fantasmas hiperinflacionarios del pasado como la crisis de 1988, en donde un fracasado Plan Primavera que tenía la característica de control de costos para estabilizar los precios, aumentos tarifarios de más del 30%, aumentos de paritarias sin topes, devaluaciones nominales del 11%, aumento de la tasa de interés para absorber australes fueron algunas de las medidas que derivaron en el cambio de gobierno inmediato.

Ya para 1989 los niveles de inflación registraron niveles anuales de más del 3.000%, una grave crisis financiera y altos niveles de pobreza que desencadenó en la Ley de Convertibilidad que en definitiva tenía la base de imprimir un peso si en el BCRA había un dólar que los respaldara, lo que permitió en cierta medida reducir el colapso inflacionario y estabilización de la economia. Estamos en los preludios de una nueva crisis de corte monetario.

El plano fiscal es lo que presiona a la inflación que es en lo que, en definitiva, aún no logramos vencer, porque la historia se repite una y otra vez ante la falta institucional de correcciones firmes así como un ordenamiento de los precios relativos.  

 

Wilhelm Röpke, economista y filósofo alemán, comenta en su artículo "Economía Libre y Orden Social" dos historias muy interesantes para representar lo que está sucediendo en el último tramo del actual gobierno en contexto eleccionario: "A finales de 1870, Gambetta, líder de la Resistencia Francesa después de la derrota del Segundo Imperio, abandona la capital sitiada en globo dirigiéndose a Tours para crear un nuevo ejército republicano. En su desesperada necesidad de dinero, recordó que sus admirados predecesores de la Revolución habían financiado sus guerras imprimiendo asignados. Pidió a los representantes del Banco de Francia imprimir unos pocos cientos de millones en billetes. Pero se encontró con un rechazo de plano e indignado. En ese tiempo, una demanda así era considerada tan monstruosa que Gambetta no insistió. El instigador jacobino y dictador todopoderoso cedió ante la negativa terminante del representante del banco central, que no habría aceptado ni siquiera una emergencia nacional suprema como excusa para el delito de inflación"

"Unos pocos meses después, se produjo en París la revuelta socialista conocida como La Comuna. Las reservas de oro y las planchas de billetes del Banco de Francia estuvieron a merced de los revolucionarios. Pero a pesar de su necesidad de dinero y sus pocos escrúpulos políticos, resistieron a la tentación de poner sus manos en ellas. En medio de una guerra civil, el banco central y su dinero les resultaban sacrosantos", relata.

El respeto por la moneda a través de una política fiscal y monetaria prudente y sólida es el respeto por los valores democráticos de un pueblo que cobra, se esfuerza, produce y trabaja con el dinero que imprime un sector elegido para representar esos valores no para destruirlos a estos y a la moneda.

Temas relacionados