La inflación no da tregua a los argentinos: qué esperan los analistas para después de las elecciones
El Gobierno aplicó una batería de medidas y controles para intentar contener la inflación. Lo logró, parcialmente, durante agosto: el Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió 2,5% y anotó su quinta "baja" consecutiva.
Sin embargo, el resultado fue efímero: en septiembre el índice se aceleró hasta el 3,5% y lo mismo sucedió en octubre: el INDEC informó este jueves un alza mensual del 3,5% y un aumento interanual de 52,1%.
Y analistas pronostican números superiores al 3% para después de las elecciones legislativas de noviembre, producto de la presión que generará el movimiento del tipo de cambio oficial y el descongelamiento de algunos precios regulados. Se le sumará, remarcan, una mayor liquidez en la economía a raíz de los anuncios oficiales.
"Después de las elecciones hay dos incógnitas muy importantes. Primero, cuál va a ser el ritmo de movimiento del tipo de cambio oficial. Sabemos que antes de las elecciones, el tipo de cambio estuvo moviéndose a mucho menor ritmo que la inflación: 1% promedio mensual en los últimos meses, con la inflación rondando el 3%. Y ese retraso no se puede sostener indefinidamente. Por eso, pensamos que después de las elecciones el tipo de cambio oficial se va a empezar a mover en línea con la suba de precios", señaló a iProfesional Lorenzo Sigaut Gravina, economista de la consultora Equilibra.
Todo esto, claro, con un dólar blue ya superando cómodamente los $200 y con una "súper brecha" por encima del 100%, que impacta en las expectativas inflacionarias.
"Y en materia tarifas y bienes regulados, que a partir de mayo y junio comenzaron a moverse muy poco, la incógnita es la misma. No necesariamente el día después de las elecciones, pero por ejemplo en el caso de las naftas y tarifas como luz y gas, habrá que ver cuándo se van a descongelar. Y eso son presiones importantes", remarcó el analista de Equilibra.
"La inflación post elecciones se va a acelerar por varios motivos. El primer motivo, va a ser una cuestión de tipo de cambio. La depreciación de tipo de cambio al ritmo que viene, no se va a poder sostener. Entonces, eso va a impactar en productos importados, en general en alimentos que tiene alta correlación", coincidió el economista Jorge Neyro.
"Uno ve que, así como la inflación se logró bajar a menos del 3% en el periodo pre electoral, después va a venir una inflación de 3% o más. Obviamente, en la medida que el mercado cambiario esté contenido. Sino, podemos tener una aceleración más brusca", señaló Sigaut Gravina.
Más pesos en circulación
Las medidas anunciadas por el Gobierno para buscar revertir el resultado de las PASO, sumaron mayor liquidez a la economía, otro factor que viene presionando sobre el índice de precios.
Además, "diciembre es un mes inflacionario porque todo el mundo está dispuesto a gastar un poquito más, por las Fiestas o las vacaciones. Y cuando hay más predisposición al gasto, siempre algún precio aumenta un poco más", señaló Neyro al respecto.
"Preveíamos que de acá a noviembre la inflación iba a viajar en una velocidad crucero del orden del 2,7% promedio. Pero, con las baterías de medidas que se aplicaron y la cantidad de pesos que se fueron volcando al mercado, probablemente ese sea el piso y estemos sembrando las condiciones para cosechar una fuerte inflación a partir del mes de diciembre, diría en el orden del 4%. Y a partir de enero del año que viene, una inflación sostenida elevada", sostuvo por su parte Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.
"Me parece que la discusión sobre las tarifas se va a dar más adelante. O quizá los impactos inflacionarios sean más adelante. Pero en el corto plazo después de las elecciones, por la devaluación del tipo de cambio, por el ajuste de algunos precios como las naftas y por la mayor circulación de plata en la calle que van a traer las medidas del Gobierno, supondrá una presión para la inflación", concluyó Neyro.