Marca histórica de donación y trasplantes: este año el INCUCAI registró un número récord de donantes

El 2018 fue un año disruptivo para la donación y el trasplante de órganos en Argentina. El debate y posterior aprobación de la hoy vigente en todo el país Ley Justina sentó un precedente en la sociedad y cambió por completo la normativa en el área.

Casualmente, en un año que fue testigo de este cambio, la cifra de donantes aumentó y superó los números que el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI) tenía registrados hasta el momento.

De acuerdo a lo publicado en la web oficial de la institución, en lo que va del año el INCUCAI y los organismos jurisdiccionales alcanzaron 633 donantes de órganos. Así, registró una marca histórica en el sistema nacional de donación y trasplante, una noticia altamente positiva dado que, de esa forma, será posible salvar más vidas. El único precedente similar sucedió en 2012, cuando el INCUCAI registró 630 donantes.

Es importante aclarar que los 665 donantes fueron generados por la intervención de los profesionales y técnicos de 225 establecimientos hospitalarios. Además, los procesos de donación se concretaron en 23 provincias del país.

Además del récord nacional, cabe aclarar que Tucumán, Mendoza, Santa Fe, Córdoba, Misiones y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires también alcanzaron marcas históricas y registran tasas de donante superiores al 19,00 PMH (por millón de habitantes) en algunas de ellas.Además de la cantidad de personas que se han convertido en donantes, hay otro dato relevante que registró una marca histórica. La cantidad de trasplantes que se realizacon en Argentina con órgano proveniente de donante cadavérico fue de 1595 en lo que va del año. Esto no solo implica que en Argentina ese número de personas ha recibido un órgano, sino que indica que actualmente se encuentran en un proceso de evolución de la patología que los aquejaba y han recibido una nueva oportunidad en la vida.

Del total mencionado 886 fueron trasplantes renales, 76 fueron renopancreáticos, 371 hepáticos, 21 hepatorenales, 110 cardiacos, 39 pulmonares, 6 cardiorenal, 5 pancreáticos, 1 cardiopulomar y 1 hepatointestinal.

La nueva normativa, identificada bajo el Nº 27.447, entró en vigencia en el mes de agosto. A partir de ese momento, fortaleció el sistema de procuración y agilizó y simplificó los procesos de donación y trasplante. Entre los principales cambios de la norma se encuentran la prioridad del traslado aéreo y terrestre de pacientes con operativos en curso y la creación de Servicios de Procuración en establecimientos hospitalarios, destinados a garantizar cada etapa del proceso de donación.

Además, incorpora el procedimiento de donación renal cruzada, simplifica y optimiza los procesos judiciales y posibilita la obtención de autorización para la ablación por ambos progenitores o por aquel que se encuentre presente, en caso de menores. Según indican los números oficiales del INCUCAI, se incrementó la donación de órganos en un 59% y la oposición a la donación pasó de un 42% a un 17%. De este modo, Argentina se posiciona como un país líder en la región en materia de donación y trasplante de órganos y tejidos.

Si bien todos los temas mencionados son fundamentalmente técnicos, el cambio provocado por la norma está relacionado a la lucha de la familia de Justina Lo Cane, la niña cuyo nombre lleva la ley, que falleció a la espera de un trasplante. El proceso estuvo acompañado por una gran campaña de concientización, que acabó por impactar fuertemente en la sociedad, con resultados visibles en los números publicados por el INCUCAI.