Euforia en el Gobierno: se cumplirían las metas cuantitativas del primer trimestre con el FMI
La última semana del mes mostró que en el mercado financiero local los inversores locales y extranjeros apuestan en el futuro a las reformas de fondo que plantea el presidente Javier Milei.
Pero lo que más sorprende dentro el equipo económico que lidera el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del BCRA, Santiago Bausilli, quienes están monitoreados diariamente por el presidente, es la mejora en las cuentas fiscales, en el plano monetario y cambiario que se observa en el primer trimestre de este año. Una situación que genera un gran optimismo en el equipo económico.
En la medida que los fundamentals se recuperen y siga bajando la inflación, aumentan las posibilidades de una mejora de la situación económica desde el último trimestre del año, como espera Economía.
Todo esto se da junto a una fuerte acumulación de dólares para lograr luego el levantamiento del cepo cambiario. Según los últimos datos, en marzo las compras oficiales netas de dólares superaron los 2.800 millones, en su quinto mes consecutivo con saldo a favor y por encima del total de febrero de 2.400 millones.
El mercado cambiario desde que llegó Milei
Desde el 11 de diciembre, cuando asumió el gobierno de Javier Milei, el BCRA realizó compras netas por más de 11.500 millones de dólares. Por otra parte, las reservas internacionales brutas totalizan unos u$s27.700 millones frente a los u$s21.200 millones del 7 de diciembre.
Al respecto, el último informe de la Consultora 1816 explica que: "en base a los volúmenes operados en dólar mayorista y las compras que va haciendo el BCRA en el Mercado Único Libre de Cambios (MULC), se puede calcular un proxy de la evolución en el acceso a divisas por parte de importadores durante marzo".
El primer deadline del año marca que a fines de marzo el BCRA debería haber acumulado unos u$s6.000 millones en comparación con el nivel de divisas que tenía cuando asumió el nuevo gobierno.
El informe destaca que: "pareciera ser que este mes las compras de dólares de importadores no crecieron respecto a febrero, lo que sugiere que -salvo que haya habido un derrumbe masivo de importaciones devengadas- la deuda comercial continuó creciendo este mes. Es decir, las compras del BCRA en lo que va de marzo continúan siendo compras apalancadas
La letra chica del acuerdo con el FMI
En relación a las compras de dólares del BCRA, es importante mencionar que en la letra chica de la renegociación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la primera meta que debe cumplir el BCRA es el que tiene como fecha de corte el 31 de marzo.
El primer deadline del año marca que a fines de marzo el BCRA debería haber acumulado unos u$s6.000 millones en comparación con el nivel de divisas que tenía cuando asumió el nuevo gobierno. Las metas trimestrales de acumulación de reservas incluyen en la cuenta los desembolsos que el FMI habilite a lo largo del año para el gobierno.
Las estimaciones de consultoras privadas marcan que las autoridades del BCRA, habrían conseguido llegar al fin del trimestre con un aumento de reservas internacionales por encima de lo comprometido ante el FMI. Para la consultora LCG, la diferencia a favor sería cercana a los u$s2.200 millones, ya que estimaron que desde el 10 de diciembre esa acumulación habría sumado unos 8.200 millones de dólares.
En tanto que, otras consultoras, a través de distintos métodos, calculan que ese sobrecumplimiento llegó a unos 3.000 millones de dólares
En este caso hay que considerar que LCG suele realizar una especie de "descuento" en las reservas por la colocación de Bopreal, el bono en dólares del BCRA para dar curso a pagos de deuda importadora. Con ese descuento el aumento de reservas llegaría a unos 5.400 millones de dólares. En tanto que otras consultoras a través de distintos métodos calculan que ese sobrecumplimiento llegó a unos 3.000 millones de dólares.
A esto, pese a que todavía no estén cerrados los números fiscales de marzo, se sumaría el sobrecumplimiento de las metas fiscales, ya que el Tesoro por primera vez después de varios años habría tenido no solo superávit fiscal primario sino también superávit fiscal total si se descuenta el pago de los intereses de la deuda pública. Una situación que no se observa desde el gobierno de Néstor Kirchner entre el 2003 y el 2007.
Cumplimiento de la meta monetaria
También se habría cumplido la meta monetaria debido al freno de la emisión monetaria del BCRA para financiar al Tesoro. De todas formas, conviene aclarar que la metodología del FMI no hace ese tipo de distinciones, ni tampoco descuenta los propios desembolsos realizados por el organismo.
Lo que se puede observar es que, gracias a la gran compra de dólares del trimestre, el BCRA llegó con comodidad al cierre del primer trimestre pese a la pérdida de unos u$s1.110 millones de reservas brutas de la semana.
En esa caída influyeron el pago a bonistas tenedores de Cupón PBI con un fallo judicial a favor que fue vehiculizado a través de un fondo fiduciario para el que el Gobierno contrató a dos bancos internacionales y que en rigor impactó en la cuenta de reservas el martes, y pagos por u$s272 millones a organismos internacionales (principalmente el BID y el BIRF). También se sumó otro pago de u$s182 millones para cumplir con la cuota semestral con el Club de París.
En la última actualización del programa con el FMI, que se logró a mediados de marzo, le fijó al BCRA nuevas pautas de acumulación de reservas en el camino hasta septiembre de este año.
Más allá de la meta anual, que implica la acumulación de unos u$s10.000 millones en el primer año de gobierno de Milei, hay objetivos trimestrales que contemplan cuál es la dinámica cambiaria estacional que tiene cada año.
En ese sentido, el segundo trimestre del año es el ejemplo más claro. El trimestre entre abril y junio coincide con la liquidación de la cosecha gruesa de la soja. Por tanto, ese lapso del 2024 es el pico de acumulación de dólares en el BCRA con unos u$s9.200 millones más que en diciembre pasado.
Es lo que establece el programa con el FMI y le da al gobierno un margen para incluso perder unos u$s1.800 millones de reservas entre julio y septiembre.
Expectativas de inversores y baja del riesgo país
La lenta mejora de los fundamentals se traduce en lo que se observa en el riesgo país se ubicó en los 1.439 puntos, exactamente la mitad que seis meses atrás y muy cerca de perforar la barrera de los 1.400 puntos.
La baja del riesgo país es el reflejo de la suba de precios sostenida que vienen mostrando los bonos en dólares, que recién ahora están logrando superar los valores que mostraban cuando debutaron tras el canje de deuda que lanzado por el ex ministro Martín Guzmán en septiembre de 2020.
"Esa baja del riesgo país representa las expectativas de los inversores sobre la hoja de ruta económica que está proponiendo el gobierno de Javier Milei y los resultados fiscales que hasta ahora está mostrando la gestión del ministro de Economía, Luis Caputo," comentó a Iprofesional el experto Salvador Distefano, quien sostiene que la baja del riesgo país es prácticamente imparable y el mismo podría perforar la barrera de los 1.000 puntos básicos antes de fines de junio próximo.
En este sentido, un primer desafío del gobierno fueron los u$s1.550 millones de intereses de los Bonares y Globales que se pagaron en enero pasado y los casi u$s500 millones que se pagaron a organismos internacionales. En relación al futuro, hay que mencionar una fecha clave. El próximo 9 de julio vencerá la primera cuota de amortización de capital de los bonos la reestructuración de la deuda pública en dólares realizada en 2020.