¿Me conviene pagar en cuotas?
Pagar en cuotas se ha vuelto una "actividad habitual", sobre todo en compras medianamente "grandes", teniendo en cuenta el contexto de crisis que atraviesa el país, como la compra de un teléfono celular o la adquisición de un nuevo sommier.
Sin embargo, suele surgir la duda sobre en qué contexto es "rentable" pagar una compra en cuotas y en qué momentos es mejor cancelarlo en un pago.
¿Cómo sé si me conviene pagar en cuotas?
Una de las formas más sencillas de saber si es conveniente pagar en cuotas es analizar el costo financiero total de la operación.
En el caso de las cuotas "sin interés" y suponiendo que es el mismo precio que haciendo la compra en un pago, la mejor opción es pagar en cuotas, incluso si contás con el dinero para hacerla en un pago.
Esto se debe a que podés colocar el dinero en un fondo común de inversión money market o en un plazo fijo e ir sacando parte del capital para afrontar las cuotas. Al finalizar los pagos, tendrás un dinero sobrante, producto de los intereses generados en ese lapso.
En el caso de que te hagan un recargo o te ofrezcan un "descuento" por pago de contado, deberás analizar cuánto es ese descuento y cuántas son las cuotas que te ofrecen.
Por ejemplo, si un teléfono celular que cuesta $200.000 tiene 12 cuotas sin interés o un descuento del 20% deberás analizar cuánto dinero obtendrías por colocar esos $140.000 (monto original menos la bonificación) a plazo fijo durante un año.
En este caso, suponiendo que la tasa de los depósitos a plazo fijo se mantiene, obtendrías una tasa del 107,05%. Es decir, luego de 12 meses, obtendrías $289.870, lo suficiente como para pagar los $200.000 y obtener una "ganancia" de $89.870.
Sin embargo, es altamente probable que cada mes hagas un retiro para abonar las cuotas, por lo que el dinero que obtendrás al final será mucho menor. En este caso, suponiendo que colocás $140.000 a una tasa del 6,25% mensual y retiras $16.666 por mes (renovando el saldo) obtendrás, luego de pagar las cuotas, un beneficio de $4.369 aproximadamente.
¿Cómo funciona el pago por cuotas?
El pago en cuotas funciona de la siguiente forma: el banco emisor de la tarjeta de crédito le entrega el total del dinero al comercio en el que se hizo la transacción. Luego, este cobrará un interés por "prestar" ese dinero (por lo general utilizan el dinero de los depósitos que reciben como, por ejemplo, los plazos fijos).
En otros casos, como Mercado Libre, el interés es absorbido por el comerciante, es decir, le descuentan un porcentaje de la venta al comerciante para cubrir los costos de financiar dicha venta (muy común en las "cuotas sin interés").
Sin embargo, por lo general, dicho porcentaje suele ser recargado por los comerciantes en el precio de lista, ofreciendo el precio sin dicho porcentaje como un "descuento" por pago en efectivo o en un pago.
¿Cómo calcular el interés de las cuotas?
Para calcular los intereses de las cuotas que debés abonar tendrás que analizar si te cobran "interés simple" o "interés compuesto".
En el caso de interés simple deberás tomar el capital a financiar en cuotas y aplicarle el interés correspondiente. Luego, lo dividirás por la cantidad de cuotas y obtendrás el monto a pagar.
Por ejemplo, si el capital es de $100.000 con una TNA del 120% y se paga en 3 cuotas, se debe pasar la tasa nominal anual a tasa nominal trimestral. En este caso sería del 30%. Luego, al multiplicar por el capital, obtendrías $130.000 y dicho monto lo dividirás en 3 (cantidad de pagos). En este caso deberías abonar $43.333,33 por mes aproximadamente.
¿Cuándo conviene comprar con la tarjeta de crédito?
Siempre que el pago en cuotas sea igual al pago de contado o el interés sea especialmente bajo, y se coloque el dinero en algún tipo de inversión como un FCI money market, conviene realizar la compra con tarjeta de crédito.
También suele ser una gran opción a principio de mes, ya que, al realizar una compra en un pago (la cual no tiene ningún tipo de recargo) se puede colocar el capital en algún tipo de inversión de bajo riesgo y obtener intereses durante todo el mes.
De esta forma, al mes siguiente, pagarás el precio abonado con la tarjeta de crédito y habrás obtenido un interés por ese capital, lo que, en definitiva, se trata de un menor precio final del bien o servicio.