Créditos personales: ahora la web sale a competir con los bancos
El negocio de los créditos personales comenzó a cambiar.
Las firmas tecnológicas ahora capturan inversores para intermediar entre ellos y el solicitante del préstamo que jamás pasará por la ventanilla de un banco, según publica el diario Clarín en su edición de hoy.
Alejandro Cosentino cree que los servicios financieros del futuro pueden llegar a ser prestados por Google, Amazon, o PayPal. Cosentino es fundador y CEO de Afluenta, dedicada a "préstamos humanos" como los define y autorizada por la Comisión Nacional de Valores.
Un sondeo de Viacom a nivel planetario señala que para los jóvenes, los bancos constituyen cuatro de las diez marcas más odiadas. "La generación del milenio ha sido lenta para acumular riqueza. Está endeudada, se enfrenta a un subempleo sin precedente y no fue tomada en cuenta por los bancos ", explicó Ross Martin de Viacom.
Algunas entidades están reaccionando. El español BBVA, que cerró el Easy bank cuando compró Banco Francés en la Argentina, abrirá ahora el primer banco virtual a escala global. Entre tanto, recluta cerebros en el Silicon Valley. Por aquí se desarrolló el Next Bank Day Buenos Aires, con emprendedores e inversores FinTech (tecnología para servicios financieros) del que busca ser parte la banca tradicional, desde el mencionado BBVA al Hipotecario y el Galicia, relata el matutino.
Cosentino asegura que la tasa de crecimiento de la industria de créditos entre personas es 200%.
En ese sector, familias, fondos de pensión y empresas canalizan inversiones para prestar a los individuos. Unos robots de búsqueda deciden en minutos si se concede el crédito. Y el riesgo se reparte, lo que se traduce en menores gastos y tasas.
El sector de préstamos entre personas está dominado en EE.UU. por Zopa, Ratesetter y Funding Circle. China tiene a Creditease, la mayor plataforma del mundo. Y hay bancos como Barclays que buscan involucrarse. "Vamos a terminar asociándonos con los bancos para transformar la banca", dice Cosentino al matutino que confía en que una gran base de consumidores haga bajar significativamente el costo de capital.