¿Cuáles son los mejores autos usados para comprar y de cuáles conviene "escapar"?
En la decisión de compra de un auto semi nuevo, por lo general entra en juego muchos a factores. El año de antigüedad, la cantidad de kilómetros y el estado general del coche.
Sin embargo, es cada vez más habitual que los clientes se interioricen sobre el respaldo de marca, reventa del modelo (para luego venderlo) y principalmente el costo de mantenimiento.
De hecho, de la amplia gama de autos usados, hay modelos que se destacan del resto y que por ende son los más buscados y valorados por los más entendidos. En contra partida, hay autos usados que si bien pueden resultar tentadores por los precios en los que se ofrecen y prestaciones que ofrecen, suelen ser modelos "conflictivos" al momento de reponer algún repuesto o cuando se necesita un respaldo de la marca.
En este informe, te damos un pantallazo de los mejores autos para comprar con kilómetros encimas, y cuáles precisan de un mayor análisis de compra.
Las marcas y modelos de autos usados que mejor cotizan
Al margen del modelo del auto en cuestión, hay muchos clientes que empiezan la búsqueda de su futuro vehículo desde la marca.
Este aspecto es muy importante no solo por el respaldo que otorga la terminal, sobre todo en la post venta, sino por la reventa del modelo en sí.
De la mayoría de los consultados coinciden en que las marcas de autos para "elegir con los ojos cerrados" son: Toyota, Volkswagen y Ford.
Si de modelos se trata, hay usados que son muy buscados. Entre los más accesibles, el Volkswagen Gol Trend, Chevrolet Onix, Ford Ka y Ford Fiesta, son los que en las concesionarias de usados más se venden por el precio de venta.
Se trata de autos que se encuentran en un rango de precios de entre $7.000.000 y $12.000.000, dependiendo el año (desde 2014 hasta 2020) y del nivel de equipamiento.
Los que no se fabrican más ¿sirven?
Es muy común que la mayoría de los modelos usados ya dejaron de producirse. Sin embargo, hay autos que pese a ello, siguen siendo muy buscados.
Uno de los ejemplos más claro se da con la Ford EcoSport, el SUV pionero del segmento que ya no se fabrica. No se produce más, pero se la sigue buscando.
"Nosotros tomamos muchas EcoSport, las pagamos muy bien en base a ello", explicaron desde un concesionario oficial de Ford.
Una Ford EcoSport modelo 2013 a 2014, que no supere los 100.000 kilómetros, puede encontrarse entre u$s8.000 y u$s9.500. En tanto que una más nueva (la última generación que se vendió en Argentina), ya parte en los 14.000 dólares.
Las camionetas: las más caras
En el segmento de las camionetas hay tres claros dominantes, si de pick up con reventa se trata. La Toyota Hilux, es la líder indiscutida en este aspecto. Pero la Ford Ranger y Volkswagen Amarok, no se quedan atrás.
Las tres pick up forman un tridente imbatible a la hora de inclinarse por una "chata" con kilómetros. "Cualquiera de esos modelos, representan un cheque al portador, pues lejos de perder valor, se cotizan mes a mes", argumentaron desde un concesionario multi marca.
El fenómeno que percibido en la búsqueda de camionetas es lo sobrevaluada que están las pick ups, posicionándose, por lejos como los usados más costosos.
Así, hay modelos de Toyota Hilux doble cabina modelos 1998/1999 con un promedio de 250.000 kilómetros a valores de entre u$s12.000 y 15.000 dólares.
En el caso de Ford Ranger, la diferencia de precio cambia mucho con respecto a la generación de la camioneta. Una de las más buscadas por los amantes de esta camioneta es aquella que se produjo entre 2010 y 2012 encontramos opciones en muy estado entre u$s10.000 y 13.000 dólares.
A no tentarse con los autos importados
Sobre las marcas que no hay que dejarse tentar, la mayoría apuntó contra las importadas, haciendo alusión a lo tedioso/difícil que resulta conseguir piezas originales.
La mayoría de los concesionarios consultados, coinciden que todos aquellos modelos importados con más de 100.000 kilómetros, son realmente difícil de vender.
"Hay marcas de autos muy bien valuadas en otros países, que se bien hoy siguen vendiéndose en Argentina, no ofrecen postventa de modelos que se comercializaron años atrás", nos comentó un ex directivo de una firma europea.
Por ejemplo, modelos como Subaru Impreza (2.0 Sportshifht de 150 CV año 2009 a u$s10.000) Mitsubishi Montero (2.8 litros GLS modelo 2002 a u$s16.500) Volvo C30 (2.4 litros de 220 CV modelo 2012 a u$s15.500), Honda Accord (2.4 litros AT año 2009 a u$s8.900) hasta un Audi A3 (TDI 2.0 de 140 CV 2012 a u$s13.900), resultan autos muy tentadores por la calidad y prestaciones que ofrecen, pero que pueden generar grandes dolores de cabeza a la hora de reponer una pieza original, por la falta de disponibilidad y elevado precio.
Dentro de los modelos de marcas generalistas, hay varios que suelen ser costos al momento de repararlos. "El Peugeot 308 y 408, tienen el tren delantero bastante delicado. Si de motores se trata, tanto de Peugeot como de Citroën, no es tan costoso realizarle la distribución, salvo aquellos que llevan el THP turbo naftero", coincidieron desde dos agencias de venta.
Dos autos cuyas piezas del sistema de suspensión suelen ser costosas son el Renault Kwid y Fiat Mobi. Desde un local de suspensiones, mencionaron también en este aspecto al VW Up: "sus rulemanes viene con masa incluida y eso hace que la pieza tenga un precio elevado a comparación de otras marcas en este segmento", detallaron.
Siguiendo con autos que suelen entrar con mayor frecuencia a los talleres, aparecen el Ford Fiesta KD, y Peugeot 206 y 207.
"El Fiesta sufre desgaste prematuro de la cremallera de dirección, lo mismo que los bujes de suspensión.". "El Citroën C3 viejo tiene parrillas de suspensión con rotula incorporada, obligando a reemplazo de brazo de suspensión completa".
¿Auto usados con caja automática no?
Otro dato interesante que nos remarcaron varios mecánicos es sobre las versiones con caja automática. "Siempre hay mayor riesgo en optar en una caja automática de un usado, que aquel que disponga una transmisión manual", detalló un especialista en transmisiones.
Es importante tener en cuenta entonces que las cajas automáticas suelen precisar un mantenimiento cada 60 mil kilómetros. "Hay que reemplazar los aceites y los filtros, mínimamente, y por lo general la mayoría no lo hace. Por ello si la idea es buscar versiones con cajas automáticas lo ideal es que no tenga muchos kilómetros".
Si de todas las opciones de transmisiones automáticas hay alguna que sobresalga, los especialistas mencionaron a las CVT (variador continuo), principalmente por su bajo costo de mantenimiento.
¿Comprar el auto a un particular o una agencia?
A diferencia de la compra de un auto 0km, la búsqueda de un auto usado precisa de un trabajo más pormenorizado.
Independiente del modelo, lo primero que se debe definir es la modalidad de compra, que en este caso pueden ser dos: comprar a un particular o a una agencia.
En caso de que el vendedor sea un particular, este debe ser el titular registral, nunca un tercero. A si mismo, se sugiere que la titularidad del auto tenga al menos un año de antigüedad.
A su vez, cuando se realiza una operación de compra de un vehículo con un particular, hay un dato crucial que se debe saber: no hay respaldo legar para recurrir a Defensa del Consumidor frente a algún inconveniente con el vehículo, como sí ocurre cuando se opera con una agencia.
Las ventajas de una agencia de usados
Si el auto deointerés se encuentra en una agencia, esta debe estar inscripta en el Registro de Agencias de Vehículos Usados, la cual se puede buscar a través de la página del AFIP con el CUIT del concesionario.
Otro plus que tiene cerrar una operación de compra por medio de un concesionario o agencia de autos, tiene relación directa con el estado no solo del coche en sí, sino también de todo que involucra el "papelerío".
"Cualquier concesionaria seria se encarga de hacer un peritaje al coche antes de ponerlo a la venta y ofrecen una garantía, la cual suele ser de seis meses", sostuvo un titular de un concesionario multi marca consultado.
Paralelo a ello, el concesionario se encarga de descartar que el auto en cuestión, pueda tener un embargo, una inhibición, deudas o multas. Todas cuestiones, que puede aparecer sorpresivamente al momento de hacer la transferencia y que, en el caso de operar con un particular, es muy probable que no responda, como sí es el caso de una agencia de autos habilitada e inscripta en la actividad.