Inteligencia emocional: de qué se trata y cómo ejercitarla

La inteligencia emocional es el conjunto de habilidades que todas las personas deben tener para poder desarrollarse y relacionarse con su entorno. La inteligencia emocional está tomando cada vez más protagonismo al ser considerada una herramienta fundamental tanto en el mundo laboral como social.

La inteligencia emocional influye en el modo en que las personas se relacionan y actúan frente a diversas situaciones. Tener la inteligencia emocional desarrollada implica tener un buen manejo de las emociones, lo que permite tener un mayor control y comprensión en los comportamientos.

¿Qué es la inteligencia emocional?

La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender, utilizar y administrar las propias emociones y las ajenas.

Desarrollar la inteligencia emocional ayuda a nuestra vida personal como profesional ya que permite ser consciente de lo que decimos, cómo actuamos y la manera en que nos relacionamos con terceros.

Las personas con inteligencia emocional tienen vínculos más sanos y duraderos.

Las personas emocionalmente inteligentes suelen tener vínculos y relaciones sociales saludables debido a que son productivas, pueden comprender las situaciones, los sentimientos involucrados y lidiar con el estrés.

La inteligencia emocional se compone de cinco habilidades principales, ellas son las siguientes.

Autoconciencia

La autoconciencia es fundamental para reconocer y comprender las emociones, sean propias o ajenas. Esto es importante para entender los sentimientos y los impulsos que pueden provocar en nosotros.

Se trata de reconocer la forma en la que el estado anímico influye en el comportamiento.

Autorregulación

La autorregulación consiste en tener la capacidad de controlar las emociones y los comportamientos, sobre todo los sentimientos que generan negatividad.

No se trata de reprimir estas emociones, sino poder reconocerlas, encontrar el equilibro y poder controlarlas para no dejarnos llevar por ellas.

Motivación

Las personas con motivación tienen la capacidad de perseverar en sus objetivos y no rendirse en el camino.

Tener inteligencia emocional permite tener voluntad y fuerza para alcanzar lo que se propone. El optimismo es una de las herramientas más importantes para mantenerse motivado.

Empatía

Al tener desarrollada la empatía, las personas con inteligencia emocional tienen la capacidad de identificar, comprender y compartir los sentimientos de los demás.

Tener empatía ayuda a establecer vínculos estrechos, duraderos y de confianza con tu entorno.

Habilidades sociales

Las habilidades sociales ayudan a construir y mantener relaciones sociales sanas. Contar con habilidades sociales implica crear vínculos que busquen el beneficio tanto de los otros como el propio.

La meditación puede ayudar a ejercitar la inteligencia emocional.

¿Cómo ejercitar la inteligencia emocional?

La inteligencia emocional es una habilidad que se puede aprender y mejorar con el tiempo. Se debe dedicar esfuerzo para ejercitar las habilidades emocionales para poder crear buenos vínculos que enriquecerán todos los ámbitos de la vida.

Desarrollar y ejercitar la inteligencia emocional implica cultivar la capacidad de comprender, gestionar y utilizar las emociones de manera efectiva, tanto en uno mismo como en las relaciones con los demás.

Algunas estrategias que pueden ayudar a desarrollar y ejercitar la inteligencia emocional son las siguientes.

Autoconciencia

• Llevar un diario emocional: esto ayuda a registrar las emociones a lo largo del día. Es importante anotar lo que las desencadena y cómo te hacen sentir.
• Meditación y mindfulness: practicar la atención plena puede ayudar a estar más consciente de tus emociones y a responder de manera más reflexiva en lugar de reactiva.

Autorregulación

• Practicar la gestión del estrés: tratar de identificar la causa del estrés y tomar medidas para aliviarlo. Desarrollar técnicas para manejar el estrés, como la respiración profunda, la meditación o el ejercicio regular.
• Establecer límites: aprender a decir no cuando sea necesario y establecer límites saludables en las relaciones.

Motivación

• Establecer objetivos significativos: definir objetivos que te inspiren y te den un propósito.
• Buscar el significado en el trabajo: buscar el significado en lo que haces, puede aumentar la motivación intrínseca.
• Mejorar tu autoestima: es importante reconocer tus fortalezas y logros. Hay que trabajar para desarrollar una imagen positiva de uno mismo.

La inteligencia emocional es una herramienta fundamental para la vida profesional

Empatía

• Escucha activa: prestar atención completa a lo que dicen los demás, sin interrumpir. Tratar de comprender las perspectivas de los otros.
• Ponerse en el lugar del otro: imaginar cómo se sienten las otra personas en determinadas situaciones.

Habilidades sociales

• Desarrollar la comunicación efectiva: aprender a expresar tus emociones de manera clara y a escuchar a los demás.
• Colaborar: trabajar en equipo, compartir momentos y celebrar los logros del grupo.

Autoevaluación

• Retroalimentación: pedir a amigos, familiares o colegas que te den retroalimentación constructiva sobre tu inteligencia emocional.
• Aprender de las experiencias: reflexionar sobre situaciones pasadas para identificar cómo podrías haber manejado mejor las emociones.

Desarrollo continuo

• Leer libros y recursos: hay muchos libros y recursos sobre inteligencia emocional que pueden proporcionarte perspectivas útiles.
• Participar en cursos o talleres: asistir a programas de desarrollo personal puede ofrecerte nuevas habilidades y enfoques.

Desarrollar la inteligencia emocional es un proceso continuo que requiere práctica y paciencia. Estas estrategias pueden ayudar a mejorar gradualmente en cada área, y es posible que encontrar otras técnicas que sean útiles para cada uno.