Cristina puede ser la llave para un acuerdo con el FMI: posible cumbre con vice de EE.UU.
El viaje de Cristina Kirchner a Honduras, que la vicepresidenta inició en la tarde del martes para asistir a la asunción de Xiomara Castro de Zelaya como primera presidenta de ese país, podría ser clave para las negociaciones de la Argentina con el FMI, de acuerdo a las expectativas que dejan trascender desde la Casa Rosada.
La atención estará puesta en un posible encuentro entre CFK y la también vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, cuya presencia en Tegucigalpa también está confirmada.
Al cierre de esta edición, la reunión bilateral Kamala-Cristina no fue confirmada a iProfesional. Esta es la primera incursión oficial en el exterior de CFK como vicepresidenta.
Desde el Gobierno creen que ese encuentro sería clave en el último tramo de las negociaciones de la Argentina con el Fondo Monetario.
Ayer mismo, la economista Gita Gopinath, flamante vicedirectora ejecutiva del FMI, dio a entender que las próximas horas serían determinantes en las conversaciones entre las partes: "Entendemos que la situación económica y social (en Argentina) es desafiante. Por eso estamos adoptando un enfoque flexible y pragmático y esperamos tener progresos en los próximos días", dijo Gopinath durante una conferencia de prensa en la que presentó las nuevas proyecciones del organismo para la economía global, y en la cual le preguntaron sobre el estado de las negociaciones con el gobierno argentino.
De todas maneras, la economista repitió que, un eventual acuerdo, "requiere un programa sólido y creíble que enfrente los desequilibrios que tiene el país".
Anoche, la expectativa en la Casa Rosada era que un eventual acercamiento entre ambas vicepresidentas podría ser una continuación del diálogo que -en otro nivel- tuvieron el secretario del Tesoro americano, Anthony Blinden, y el canciller Santiago Cafiero en Washington, con el objetivo de acercar a Estados Unidos a un voto favorable para la Argentina en el Fondo Monetario.
La agenda de Kamala Harris en Honduras se relaciona con lo que Estados Unidos denomina el "triángulo norte", conformado por los países Honduras, Guatemala y El Salvador.
La vicepresidenta lleva adelante personalmente esa agenda, en la cual el tema de la democracia en esos países es clave. Y, también, le busca solución a la inmigración ilegal de ciudadanos de esos países hacia los Estados Unidos.
En el Gobierno consideran que son contadas las ocasiones donde confluyan los intereses de países tan distintos -desde Argentina a EE.UU y Centroamérica-, como en esta oportunidad, a favor de la democracia. Y que el país debe aprovechar esta cumbre en torno a la asunción de Xiomara Castro.
La relación entre Cristina y Zelaya es histórica: se afianzó hace ya más de una década, cuando Néstor y Cristina Kirchner respaldaron a Manuel Zelaya -esposo de Xiomara y por entonces presidente de Honduras-, que fue derrocado por un "golpe blando" a mediados de 2009.
"A Cristina Kirchner la consideramos un símbolo de lucha democrática", consideró Zelaya antes de fin de año, ya con su esposa elegida como futura presidenta de Honduras.
Zelaya también se considera muy cercano al Presidente argentino. "Nos mantenemos en contacto tanto Alberto (Fernández), que ya habló con Xiomara también, como Cristina", dijo el hondureño.
Cristina, en sus últimas declaraciones públicas sobre el FMI, viene siendo muy crítica del acuerdo firmado en 2018 y revisado un año más tarde, durante la administración Macri y con la complacencia de Donald Trump desde la Casa Blanca.
La última vez fue hace una semana, a través de una carta pública. "Lo que nosotros sí sabemos es que en Argentina lo que nunca se va acabar es lo que nos pasó -y nos pasa- por la pandemia macrista, cuando en el año 2018 Macri trajo al FMI de vuelta a la Argentina", comenzó la ex presidenta.
Y siguió: "Le dieron un préstamo excepcional de u$s57.000 millones para salvarle el gobierno y ayudarlo a ganar las elecciones. No sólo no ganó las elecciones, sino que además no se sabe dónde están esos dólares".
En un principio, cuando CFK no había confirmado el viaje a Honduras, en la Casa Rosada hubo zozobra. Los funcionarios consultados por iProfesional temían que esa postura muy férrea de Cristina podría embarrar más la cancha con el Fondo.
"Una cosa es que lo haga en la Plaza frente a los suyos, a los militantes kirchneristas, y otra muy distinta es que se pronuncie afuera del país, en la etapa decisivas de las negociaciones", comentó a iProfesional un referente político del "albertismo", si es que vale esa definición.
Evo Morales y el paraguayo Fernando Lugo ya confirmaron su asistencia; y en los próximos días harían lo mismo Lula, lo que convertiría a ese acto en una verdadera cumbre de líderes de la izquierda latinoamericana.
Ahora, a pocas semanas de vencimientos impagables con el FMI, la postura de los "albertistas" es que se han desplegado distintas estrategias para lograr el aval de Estados Unidos y del FMI, que impida un agravamiento de la crisis.
Ayer mismo hubo una novedad que habla de una nueva señal de la Casa Rosada a la administración Biden: Argentina, que preside desde hace un mes y medio el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), reclamó a Venezuela que ponga en marcha investigaciones sobre las denuncias de violación de los derechos humanos.
Un giro notable en la posición que venía evidenciando el gobierno nacional, que se había iniciado hace un año, pero que había sido muy criticado por el ala kirchnerista de la coalición
¿Habrá también un giro que lleve a un acuerdo con el FMI? No queda mucho tiempo para averiguarlo. En pocos días vencen u$s1.100 millones y otros u$s2.900 millones a mediados de marzo. Reservas para pagar esos montos ya no quedan. Se vienen las definiciones.