• 21/11/2024

El Gobierno quitará 1 punto de coparticipación a la Ciudad para solucionar conflicto policial: ¿a cuánta plata equivale?

El Presidente anunció la conformación de un "fondo de fortalecimiento financiero" que se nutrirá de recursos que estaban asignacos a CABA
09/09/2020 - 21:05hs
El Gobierno quitará 1 punto de coparticipación a la Ciudad para solucionar conflicto policial: ¿a cuánta plata equivale?

En medio de una jornada de alta tensión por las protestas de la Bonaerense, el presidente Alberto Fernández solicitó este miércoles a los policías que reclaman armados que "depongan su actitud", al tiempo que anunció un fondo para Buenos Aires que le quita coparticipación a la Ciudad.

El Presidente reconoció que el reclamo salarial es legítimo y anunció que creará un fondo de fortalecimiento financiero para Buenos Aires que se financiará con un punto de coparticipación que se le quitará a la Ciudad, lo que representaría unos 35.000 millones de pesos.

En términos comparativos, la Ciudad de Buenos Aires planteó un proyecto de Presupuesto 2020 estimado en $480.833 millones.

En materia de Seguridad, por ejemplo, para este 2020 la administración de Rodríguez Larreta estará destinando $75.800 millones. De modo que los $35.000 millones a los que equivaldría ese punto de coparticipación representaría el 46% del gasto en el rubro seguridad para todo el año.

Además, los $35.000 millones equivaldrían a: 

  • 42% de todo lo que este año el Gobierno porteño destinará a la educación ($83.467 millones).
  • Al 50% de lo presupuestado este año para salud ($70.100 millones), si bien esta cifra terminará siendo mayor por el impacto del Covid-19. 
  • Superaría en un 65% al presupuesto anual del Ministerio de Hábitat y Desarrollo Humano ($21.278 millones). 
  • Sería cuatro veces superior a todos los fondos que este año el Gobierno porteño destinará a la cultura ($8.694 millones). 

Alberto: "Nadie se puede sorprender"

"Para tener garantizada la seguridad tenemos que tener una buena Policía", argumentó el Presidente, que dijo que nadie se puede "sorprender" con la medida, ya que había hablado del tema varias veces con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

Al respecto, indicó: "Aspiramos a que ese punto de coparticipación que vamos a ceder a la provincia sirva para que tenga recursos administrativos y que una parte se derive para llevar adelante el plan de seguridad que presentamos el último viernes".

El Presidente explicó que la Ciudad había comenzado a recibir, después de un decreto del ex presidente Mauricio Macri, 2,1 puntos de coparticipación para cubrir los gastos del traspaso de la Policía.

De acuerdo a los cálculos de Nación, "para cubrir el gasto del paso de la Policía solo hacía falta un punto, por lo que había otro punto que la Ciudad no estaba utilizando para cubrir los gastos de sueldo y funcionamiento de esa fuerza de seguridad".

Alberto Fernández, rodeado de intendentes.
Alberto Fernández, rodeado de intendentes.

Larreta, en la mira del Gobierno nacional

En medio de una crisis nacional, el jefe de Gobierno porteño atraviesa con relativa facilidad la restricción económica –a pesar de haber otorgado eximiciones impositivas a sectores en crisis. Y su imagen está en alza no solamente en la Ciudad sino también en otras zonas del país, al punto que tiene 64% de aprobación en Córdoba y 70% en el conurbano bonaerense –superando en cinco puntos a Axel Kicillof-.

Alberto Fernández entendió la situación. Tiene una multitud de víctimas a las cuales hacer una reparación y tiene un "villano". Que, además, es un eventual competidor suyo en el plano nacional. Todo encaja para que el Presidente tenga el incentivo de avanzar contra el jefe de gobierno porteño.

Es por eso que todas las miradas apuntan a la apetecible "caja" de la Ciudad. Ya sea por la vía presupuestaria o por modificaciones en la coparticipación impositiva, los objetivos son inequívocos: desviar parte de esos recursos hacia otras provincias.

El diagnóstico es claro: para quienes cultivan la filosofía de la "suma cero" –según la cual para que alguien gane es imprescindible que otro pierda-, a esta altura la Ciudad es un impedimento para el desarrollo de otras áreas.

En este cuadro de situación, Rodríguez Larreta ya se hizo a la idea del embate presupuestario que le espera. Y mientras extrema su capacidad negociadora para acotar el daño, eligió un tono moderado en sus recientes declaraciones públicas

Habló de "nivelar para arriba" cuando el Presidente habló sobre la opulencia de la Ciudad.

Y el vicejefe, Diego Santilli, planteó el problema con el mismo léxico peronista del Alberto: "La Ciudad es muy solidaria, produce muchísimo más de lo que recibe por coparticipación. Y atiende en su sistema de salud pública a muchas personas que no son de la ciudad. Algo similar sucede con respecto a la educación pública", argumentó.

Habrá que esperar al reacción ahora que Alberto oficializó su intención de traspasar ese punto a la Provincia para solucionar el conflicto policial. 

Tensión en Olivos

La jornada en Olivos había sido de extrema tensión, ya que un grupo de policías con armas y a bordo de patrulleros se apostaron en el ingreso para reclamar por sus salarios y mejoras salariales.

Por esa razón, el Presidente convocó al encuentro con Kicillof y los intendentes -sin la presencia del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni-, para mostrarse respaldado a la hora de los anuncios, poco después de las 19:10.

"Todo reclamo tiene un modo de hacerse, no vale cualquier cosa, no todo está permitido a la hora de reclamar", dijo Fernández al hablar en la Quinta de Olivos, rodeado por el gobernador Axel Kicillof y una veintena de intendentes del oficialismo y la oposición.

Y enfatizó: "Vamos a buscar y darles una solución a la provincia de Buenos Aires, pero no vamos a aceptar que sigan con este modo" de protesta.

La policía bonaerense se agrupó frente a la residencia presidencial.
La policía bonaerense se agrupó frente a la residencia presidencial.

El jefe de Estado, tras recibir el respaldo de todas las fuerzas ante la protesta con patrulleros que durante casi toda la jornada rodeó la residencia oficial, les pidió a los uniformados que "cesen cuanto antes con esta dinámica".

"Quiero que sepan que soy un hombre de diálogo. La política es diálogo. Es el mecanismo que tenemos que fortalecer seriamente para avanzar en la Argentina que se viene. Escucho los reclamos, las necesidades de la gente, todo me preocupa porque sé que venimos y estamos en un tiempo difícil. Atender reclamos es parte del diálogo", expresó Fernández.

En Olivos estuvieron los intendentes de Escobar, Ariel Sujarchuk; General Rodríguez, Mauro García; General San Martín, Fernando Moreira; Hurlingham, Juan Zabaleta; Ituzaingó, Alberto Descalzo; Luján, Leonardo Boto; Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini; Marcos Paz, Ricardo Curutchet; Mercedes, Juan Ustarroz; Merlo, Gustavo Menendez; Morón, Lucas Ghi; Navarro, Santiago Maggiotti; Pilar, Federico Achaval; San Fernado, Juan Andreotti; Tigre, Julio Zamora.

También estuvieron los jefes comunales de Almirante Brown, Mariano Cascallares; Avellaneda, Jorge Ferraresi; Berisso, Fabián Cagliardi; Ensenada, Mario Secco; Esteban Echeverría, Fernando Gray; Ezeiza, Alejandro Granados; Florencio Varela, Andrés Watson; La Matanza, Fernando Espinoza; Lomas de Zamora, Martín Insaurralde; Presidente Perón, Blanca Cantero; Punta Indio, Hernán Yzurieta; Quilmes, Mayra Mendoza; San Vicente, Nicolás Mantegazza; Campana, Sebastián Abella.

Completaron la nómina de intendentes los de Lanús, Néstor Grindetti; Lobos, Jorge Etcheverry; San Isidro, Gustavo Posse; San Miguel, Jaime Méndez; Tres de Febrero, Diego Valenzuela, y Vicente López, Jorge Macri.

Rechazo y alarma en el arco político

La protesta de la Policía Bonaerense con patrulleros en la Quinta de Olivos despertó este miércoles un fuerte repudio de dirigentes del oficialismo y la oposición, que coincidieron en que es "inadmisible" una manifestación con armas frente a la residencia del presidente Alberto Fernández.

"Un reclamo laboral de quienes deben trabajar por la seguridad de los argentinos es legítimo, pero es inaceptable que su canal de expresión sea una manifestación de los uniformados ante la Quinta de Olivos. No se puede poner en jaque las instituciones democráticas de ese modo", resaltó el presidente del interbloque de diputados nacional de Juntos por el Cambio, Mario Negri, en su cuenta de Twitter.

La senadora nacional del Frente de Todos Anabel Fernández Sagasti, a su vez, cuestionó que los policías rodearan "con armas la residencia donde se encuentra el Presidente" Alberto Fernández, y recalcó: "Repudiar este hecho y defender la democracia es una obligación ética y moral".

El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, por su parte, consideró que "es inadmisible ir con armas y patrulleros a la Quinta de Olivos para condicionar a un gobierno electo democráticamente que mostró total voluntad de resolver los problemas a través del diálogo".

A su vez, el diputado nacional de Juntos por el Cambio Fernando Iglesias expresó: "A favor de las legítimas reivindicaciones de la #PolicíaBonaerense. En contra del reclamo frente a la Quinta de Olivos. No es el lugar".

Por la oposición también se manifestaron el ex senador Federico Pinedo, que afirmó que "la democracia debe respaldar a su policía, la policía debe estar subordinada a la democracia y nada tiene que hacer un reclamo en la sede presidencial".

El diputado de la UCR Facundo Suárez Lastra afirmó: "La Quinta de Olivos no es el lugar donde el personal de la policía de la Provincia de Buenos Aires debe hacer sus reclamos. Este accionar genera incertidumbre y preocupación. No es el momento, el lugar ni el modo".

A su vez, el bonaerense Fabio Quetglas destacó que "los reclamos siempre deben guardar una proporcionalidad", tras advertir que "los excesos, deslegitiman y distraen la atención".

"Rodear la Quinta de Olivos es inaceptable. Si al reclamo justo. No al apriete", criticó.

En tanto, el bloque de diputados nacionales del Frente de Todos enfatizó que "rodear la Quinta Presidencial y la Casa de Gobierno de la Provincia con efectivos armados que de ninguna manera representan al conjunto de la policía bonaerense, es una actitud de amedrentamiento que no puede aceptarse en democracia y debe ser repudiada por todo el arco político".

"Las armas y los patrulleros que le otorgan la Constitución a las fuerzas de seguridad son para cuidar a los ciudadanos y ciudadanas", agregaron.