La nueva pelea por los precios: cuál es el plan del Gobierno para "disciplinar" a las alimenticias
A partir del paulatino desarme del congelamiento de los precios que llega desde enero, el Gobierno usará Precios Cuidados y la Ley de Góndolas para "disciplinar" a las empresas del sector alimenticio durante el 2021.
Tanto el programa oficial como la norma aprobada por el Congreso Nacional serán los ejes centrales de la gestión que el Ministerio de Desarrollo Productivo que dirige Matías Kulfas llevará a cabo para controlar la evolución de los valores del consumo masivo en todo el país.
Es decir, más control de precios para las empresas y cambios en las políticas comerciales de las grandes cadenas de supermercados marcarán las políticas oficiales que las empresas critican y rechazan de manera permanente por entender que profundizan los controles y regulaciones.
Entienden que tampoco contemplan el crítico escenario que atraviesan las compañías y cadenas del sector, que desde marzo pasado viene soportando un incremento promedio de sus costos del 26%, alcanzando subas de algunos de sus componentes superiores al 80%.
Precios cuidados
En el caso de Precios Cuidados, las compañías advierten que los aumentos permitidos por el programa no reflejan la realidad económica, dado que los alimentos industrializados alcanzados por esta resolución solamente lograron este año incrementos de hasta un 10% cuando el acumulado del IPC desde marzo a la fecha supera el 30%, según lo publicado por el INDEC.
Actualmente, el programa establece precios de referencias para alimentos, bebidas, artículos de higiene personal y limpieza de manera anual y con renovaciones trimestrales.
La última actualización, de octubre, contiene 401 productos, entre ellos 29 sin TACC, incorporó más frutas y verduras, además de nuevas categorías de productos. A las primeras marcas, sumó mayor cantidad de productos PyMEs.
Ley de góndolas
En lo que respecta a la Ley de Góndolas (27.545), fue reglamentada el pasado 15 de diciembre y tiene como objetivo permitir una mayor oferta de productos en las grandes cadenas de supermercados, tanto física como virtualmente.
También busca, según su texto, posibilitar que las micro y pequeñas empresas, cooperativas y emprendimientos de la agricultura familiar tengan un trato equitativo en el espacio que ocupen en las góndolas.
El decreto del Poder Ejecutivo Nacional que reglamentó la norma establece a la Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación como autoridad de aplicación y establece un plazo máximo de 90 días para su implementación.
"La Secretaría de Comercio Interior no tiene en cuenta la verdadera situación de las empresas, algunas de las cuales deben operar a pérdida o con drásticas reducciones en sus márgenes para sobrevivir a estas medidas reguladoras", advierten desde voceros de las alimenticias.
De hecho, desde la COPAL, cámara que agrupa a las empresas de este sector, vienen reiterando su rechazo al sostenimiento de esta política por entender que pone en riesgo en lo inmediato el normal abastecimiento de los alimentos y bebidas, así como la continuidad de las empresas y la consecuente pérdida de fuentes de trabajo, actualmente más de 400.000 puestos directos.
Esto, a pesar que desde el comienzo de la pandemia, la industria de alimentos y bebidas ha sido declarada actividad esencial. Es decir, continuó operando, aunque con las limitaciones impuestas por las medidas sanitarias para combatir el Covid-19.
En el sector anticipan que Precios Cuidados y Ley de Góndolas "agravarán la situación de la crisis sin precedentes que sufrimos".
Mientras desde la secretaria que dirige Paula Español entienden que la Ley de Góndolas busca democratizar la oferta en los supermercados, el argumento de la Copal es técnico por entender que se trata de una norma difícil de instrumentar.
Así lo anticipó en varias oportunidades Daniel Funes de Rioja, titular de la Copal, para quien "los espacios tienen que ver no sólo con que entre todo el mundo sino también con la rotación del producto. Porque puede ser que una pyme no tenga el stock en ese punto de venta, entonces se acaba rápido en los supermercados y queda el lugar vacío".
De todos modos, las autoridades insistirán con las políticas de control al punto que sumarán a los intendentes y gobernadores para reforzar el monitoreo de Precios Cuidados en el 2021 y sumar versiones locales del programa.
Lo mismo ocurrirá con los organismos distritales en la implementación de la Ley de Góndolas en todo el territorio nacional.
Administración de precios
Paula Español entiende que esta "sociedad" con los mandatarios del interior es fundamental para hacer efectiva la política de administración de precios y abastecimiento para enfrentar la pandemia. "La buena ejecución de las políticas públicas que llevamos adelante desde el gobierno nacional, requiere una buena ejecución en cada una de las provincias y municipios", dijo la funcionaria durante un encuentro con funcionarios provinciales llevado a cabo la semana pasada.
La funcionaria también hizo referencia a la centralidad que tendrá Precios Cuidados el próximo año teniendo en cuenta que se le sumarán miles de productos que se encuentran todavía abarcados por Precios Máximos, programa que a su vez se irá desarmando de manera paulatina.
"Va a haber más productos, más variedades y más marcas, y va a requerir colaboración de todos los organismos del Estado para la fiscalización y el monitoreo", resaltó la funcionaria en esa reunión.
Además, planteó que "el principal objetivo del 2021 es trabajar para ampliar el alcance de los acuerdos de referencias de precios a nivel local, sea provincial o municipal".
Español considera que de esta manera se podrá representar, en cada canasta, el consumo regional e incorporar pequeños proveedores que no tienen alcance nacional pero sí local para aumentar la oferta de productos de referencia
Con respecto a la Ley de Góndolas, la funcionaria considera que "la clave para la mejor implementación de esta normativa tiene que ver con fortalecer y consolidar a los pequeños actores de las economías regionales y las empresas de la economía popular".
Es decir, sumar a todos aquellos que van a tener espacio en los supermercados porque, por ejemplo, van a tener mejores formas de pago, pero que muchas veces tienen determinadas limitaciones técnicas, sanitarias, de financiamiento, de ampliación de sus capacidades productivas.
En este sentido, subrayó que "desde el Estado Nacional y los gobiernos provinciales tenemos que ayudarlas a superar esas limitaciones para que puedan acceder y permanecer en las góndolas".