JUNTO AL GREMIO

Más créditos y menos impuestos: los detalles del "agresivo" plan que el sector automotriz le planteó al Gobierno para impulsar las ventas

Préstamos blandos, tasas a un dígito, mayores plazos y exenciones impositivas son parte de las medidas que el sector reclama para reactivar las operaciones
NEGOCIOS - 21 de Mayo, 2020

Si bien terminales y concesionarias retomaron sus actividades, el daño generado al sector automotriz por el parate sufrido durante estos dos meses de cuarentena no sólo provocará un efecto negativo en la producción y ventas para el 2020, sino que también causará un enorme agujero a las arcas fiscales del Estado.

El derrumbe de la recaudación tributaria por la caída en las ventas de autos ya estimada para este año es de 260.000 unidades con respecto a los 460.000 vehículos que se comercializaron durante el 2019.

Es decir, el mercado ya descuenta que, en el mejor de los escenarios, las concesionarias tendrán la posibilidad de colocar 200.000 autos 0 Km entre enero y diciembre próximo.

Con esta cifra, las terminales estiman que por la fuerte disminución de las ventas, la recaudación tributaria caerá en un 56,5% con respecto al año pasado, llegando a un total de $107.747 millones y siendo $140.063 millones menos que en el 2019.

A partir de estas conclusiones, las cámaras que nuclean a los concesionarios y fabricantes (Adefa y Acara), junto al gremio de Smata elaboraron un nuevo plan para incrementar las ventas y reactivar el sector que le acercaron al Gobierno.

La propuesta se basa en negociar con las autoridades nacionales medidas que permitan el otorgamiento de líneas de crédito blandas y a tasas menores a un dígito; mayor plazo de financiación; deducciones impositivas para algunas categorías; exención de Bienes Personales y préstamos exclusivos para la compra de vehículos pesados de uso comercial.

Poca fe en el "efecto dólar blue"

En el sector se relativiza el impacto positivo que la brecha cambiaria puede tener para incrementar las ventas, en especial de modelos recién salidos de fábrica y los que las concesionarias tienen en stock, ya que consideran no tendrá una vigencia de mediano y largo plazo y está atado a una situación cambiaria coyuntural. Y por eso, sostienen la necesidad de consensuar con las autoridades nacionales un proceso más consistente y con respaldo de medidas concretas.

Según el documento, al que pudo acceder iProfesional, el costo fiscal para el Estado sería cercano a los $20.000 millones pero permitiría vender otras 70.000 unidades durante este año a partir de las bajas en los precios que se darían con la reducción del peso tributario.

Es decir que por efecto de las medidas propuestas, en sector asumen que la recaudación por las ventas incrementales será de $37.709 millones, con lo cual a las arcas nacionales podría ingresar un 38% más de lo que se destina para la reactivación.

El sector plantea que una ayuda estatal implicará una mejora en la recaudación impositiva por mayor actividad comercial

De no implementarse estos estímulos, los empresarios automotrices anticipan que la mayor caída en la recaudación estará reflejada en impuestos nacionales como el IVA, Bienes Personales, Débitos y Créditos, Ganancias y aranceles, con $104.000 millones menos.

Le seguirán los provinciales como Ingresos Brutos y Sellos, con una caída de $29.660 millones, mientras que las tasas municipales se reducirían en $5.618 millones.

Los números surgen de tomar un precio promedio por unidad de $1.8 millones y multiplicar este valor por la cantidad de autos estimados para la venta, un índice que ya venía golpeado a principios de año con patentamientos que en el primer bimestre cayeron 27,5% y una proyección anual que, en ese momento ya arrojaba descenso de 95.000 unidades con respecto al 2019.

Sin embargo, la llegada del coronavirus al país y el fuerte impacto negativo que tuvo en la industria automotriz, con fábricas y concesionarias sin actividad por casi 60 días, enfrenta al sector a una caída mucho más profunda, con una pérdida estimada de 260.000 unidades que marcaría un derrumbe del 56,5% en términos de ventas respecto del año pasado.

Esta caída abre un escenario de deterioro que no solo impacta en la comercialización sino también en los fabricantes, ya que con 200.000 unidades, el negocio se torna insostenible, implica importantes pérdidas de fuentes de trabajo, cierre de concesionarios y puntos de venta y talleres.

"Sin mercado interno no hay terminales, no hay concesionarios, no hay trabajadores. Y además el Estado pierde de recaudar $140.000 millones", plantea el documento en donde se recuerda, por ejemplo, que las concesionarias sostienen a más de 75.000 familias y las terminales a otras 28.000.

El plan, punto por punto

Para revertir esta situación, el sector elaboró una serie de propuestas "con el objetivo de lograr una ruptura de la inercia que nos impone la situación económica actual, con la necesidad de implementarlas inmediatamente a fin de cambiar, o más bien crear, un clima de negocios que hoy no existe en el mercado".

Según terminales, concesionarias y el gremio, las propuestas permitirán recuperar la capacidad de compra de los clientes y tendrán un efecto indirecto en los propios salones de venta, debido al shock que genera la posibilidad de comprar un vehículo y a las intenciones de los automovilistas de acceder a un 0km.

Las empresas plantean que el alivio crediticio es una de las claves para reactivar las ventas en concesionarias

Este escenario, suponen, movilizará aún más el mercado y generará ese impacto que se necesita para el desarrollo de la actividad.

En este marco, entre las principales características del plan de incentivo se destacan:

Líneas de créditos blandos a tasas bajas

• Hasta 80% del valor de la unidad.

• En 36 meses.

• Tasa nominal anual (TNA) del 9,9%.

• Cuotas fijas con sistema francés y para todos los vehículos.

• Cuota (capital interés) : $3.222 mensual, sin gastos y para un préstamo de $100.000

Mayor plazo de financiación

• Hasta el 80% del valor de la unidad

• Financiación de hasta 84 meses

• Tasa (TNA): 19,9%

• Cuota fija sistema francés.

• Comprende a todos los vehículos

• Cuota (capital interés): $2.215 mensual, sin gastos para un préstamo de $100.000.

Deducción para la cuarta categoría

• Descuento del 10% del valor del auto en la liquidación mensual que corresponda.

• El mayor beneficio se verá reflejado en sueldos netos mensuales de $100.000.

• Es un pago a cuenta que no genera saldo a favor.

Exención de bienes personales

• Personas humanas que no tengan otro vehículo a su nombre.

• Su cómputo no producirá exceso en el monto no imponible.

Planes para vehículos comerciales pesados

• Semejante a la línea de crédito para la Inversión Productiva (LiCIP)

• Se fondea con el 18% de los depósitos que los bancos deben destinar a préstamos productivos

• Financiación no menor a 36 meses.

• Tasa (TNA) fija: 17%.

• Cuota fija sistema francés.

• Comprende vehículos comerciales pesados.

Te puede interesar

Secciones