Eurnekian se suma a la carrera de interesados por comprar las operaciones locales de Walmart

A los 87 años de edad, Eduardo Eurnekian mantiene la misma vitalidad para los negocios que la que lo llevó a convertirse en uno de los hombres más ricos y exitosos de la Argentina. El dueño de Corporación América tiene variadas inversiones que alcanzan rubros que van desde aeropuertos hasta cultivos bajo riego y nanotecnología.

Y ahora, estaría dispuesto a desembarcar en el negocio del consumo masivo, siempre que las condiciones económicas de la Argentina y el escenario del país post coronavirus lo permitan.

El canal para ingresar en esta actividad podría ser la compra de una parte del paquete accionario de Walmart Argentina o de un acuerdo de asociación con la cadena de supermercados de origen norteamericana.

Ocurre que Corporación América también forma parte de la short list elaborada por el Citi entre los candidatos a sellar un convenio con uno de los principales jugadores del sector supermercadista del país.

El banco, también de origen norteamericano, sigue buscando candidatos para este proyecto y en ese marco invitó a Eurnekian a estudiar una posible participación en la iniciativa. De hecho, desde el grupo admitieron a iProfesional la invitación de la entidad financiera y aseguraron estar analizando la propuesta de Walmart Argentina.

Si bien la inmensa fortuna de Eurnekian, que llega casi a los u$s2.500 millones, lo ubica entre los cinco hombres más ricos del país, su visión para encarar nuevos negocios en un país inestable y volátil como el argentino lo lleva a mirar su desembarco en el mundo del retail con mucha cautela.

De origen armenio, con un imperio que factura algo así como u$s3.000 millones y que da trabajo a 11.000 empleados repartidos en nueve países, la decisión de avanzar en la compra de parte del capital accionario de Walmart Argentina va a estar atada a lo que suceda con la renegociación de la deuda que el Gobierno busca cerrar con los acreedores externos y que no se inició de la mejor manera para las aspiraciones del presidente Alberto Fernández.

También jugará un rol importante el escenario que ofrecerá el país una vez que desaparezca la amenaza sanitaria de la pandemia del Covid-19 y se despeje el panorama para restablecer las condiciones necesarias para que la economía local pueda reactivarse, aunque sea lentamente.

A Eurnekian le seduce lograr asociarse a una multinacional norteamericana como una estrategia de elección geopolítica en el contexto mundial que presentan los negocios.

Quizá porque entiende que es mejor acercarse a un holding basado en el país que preside Donald Trump antes que con un conglomerado de origen asiático, al estilo de los acuerdos que ya cerraron, por ejemplo, el Grupo Clarín con Huawei; o la familia Bulgheroni con la petrolera estatal China National Oil Offshore Corporation (Cnooc), en Pan American Energy.

De todos modos, en un contexto como el actual, las probabilidades de avanzar que manejan en la Corporación América son escasas al tenerse también en cuenta que lo que más valoran en la cadena supermercadista de su negocio locales tiene que ver con sus inmuebles, que hoy no tienen precio. También se le suma el peso de los 9.000 empleados que dependen de Walmart y que generarían otro freno por la fuerte carga laboral que esto representa, en especial en un momento de fuerte crisis para este sector del consumo masivo.

En el caso de Walmart, la apuesta pasa por encontrar un socio local para refundar su modelo de negocios y dar pelea a los supermercados virtuales, intentando mejorar su logística y distribución para dar respuesta a la demanda de consumidores que dejaron de visitar las góndolas para comprar.

Se trata de un foco en el que el holding norteamericano se quiere basar para crecer y transformar su modelo de grandes superficies, que llegó a su techo y en donde, por lo tanto, no hay más chances de apuntalar con la apertura de nuevas sucursales.

Para lograrlo se necesita de una fuerte inyección de fondos orientada a mejorar su performance en el mundo online. Y allí radica el motivo de la búsqueda de un partner financiero y estratégico con fondos suficientes para encarar el proceso de inversiones en el mundo del comercio electrónico.

Como ya se dijo, le cedió al Citibank un mandato para que salga a ofrecer este proyecto a interesados locales y extranjeros que quieran cerrar una asociación en el país.

Pero la aparición de la pandemia del coronavirus y sus efectos negativos en casi toda la economía local y también en el negocio del consumo masivo congeló este proceso, por lo menos por los próximos meses.