El Banco Mundial vende sus acciones en una de las principales energéticas de la Argentina
El Banco Mundial quiere dejar de ser accionista de una de las principales transportadoras de energía del país. Se trata de Yacylec, en donde la entidad posee el 11% de las acciones a través de la Corporación Financiera Internacional (CFI).
La compañía es la encargada de transportar la energía que genera la central hidroeléctrica Yacyretá y hasta el 2016 también tuvo como accionista al presidente Mauricio Macri, quien debió ceder esas tenencias a Sideco, la empresa de su familia para cumplir con leyes de transparencia en la gestión pública. Otra parte de las acciones se distribuyen entre el grupEn el caso de Yacylec, el resto de su capital social se reparte entre grupos extranjeros como los italianos de Salini-Impregilo; los franceses Dumez S.A y los alemanes de Dyckerhoff & Widmann A.G.
También participan los italianos de Enel, dueño de la distribuidora Edesur, y la empresa cordobesa Electroingeniería, vinculada al kirchnerismo y con sus fundadores, Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta, el primero preso por la causa de los cuadernos y el segundo también investigado en el mismo caso.
En 1993, obtuvo la concesión para construir, operar y mantener la línea de transmisión de 500kV que une la central hidroeléctrica de Yacyretá, en la provincia de Corrientes, con la subestación de Resistencia, en la provincia de Chaco, para suministrar energía a la Red Nacional de Alta Tensión.
Bayer y Monsanto, blindados en Argentina: pese a nueva condena en EE.UU. contra el glifosato, el Gobierno lo considera inocuo
La empresa inició operaciones comerciales en 1994 y mantiene la concesión por un período de 95 años, además de realizar servicios de operación y mantenimiento para terceros en la subestación Rincón de Santa María.
La salida de la CFI del capital de Yacylec fue solicitada por la propia entidad del Banco Mundial a las autoridades del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), el año pasado.
Lo hizo mediante el expediente N° 51.206/2018 en el que se dejó constancia del pedido de la CFI transferir sus tenencias al resto de los accionistas de la transportadora energética.
Según el documento, la CFI buscaba transferir 22,2 millones de acciones Clase B de Yacylec, de valor nominal $0,10 cada una y representativas del 11,1% del capital social a favor del Grupo Eling y Enel Américas. En el caso del primero, se trata de la razón social de Electroingeniería que debía comprar 8 millones de esas acciones de la CFI que representan el 4% del total, mientras que la sociedad que controla los negocios regionales de Enel debía asumir la misma cantidad de acciones que la firma cordobesa. En tanto que el 3% restante se traspasaba a Sistranyac, una firma controlada por los mismos accionistas de la transportadora energética.
Zona de turbulencia: las nuevas líneas aéreas se achican por la crisis y el salto del dólar
Según el expediente, la transferencia fue instrumentada mediante el contrato de compraventa de acciones sellado por los dueños del capital de Yacylec y en el que se detalla la obligación de contar con el aval del Gobierno para modificar el paquete mayoritario.
De acuerdo al documento, el cambio accionario no afecta la garantía de cumplimiento de las obligaciones de operación y mantenimiento asumidas por Yacylec en el contrato y el derecho del Estado Nacional de quedarse con la propiedad de los bienes de la sociedad.
En este sentido, la CFI invocó la posibilidad de ceder acciones en Yacylec dispuesta por el contrato, vencido el término de cinco años desde la habilitación comercial.
Y luego de un año de análisis del pedido, el ENRE acaba de autorizar el traspaso asegurando que la operación "no transgrede las limitaciones establecidas en el contrato de concesión de la transportista y la participación de los accionistas de Yacylec en el mercado eléctrico mayorista.
En sólo tres meses, Arcor ya acumula pérdidas por casi $1.000 millones
Pero en otra resolución, publicada en el Boletín Oficial de este viernes 16 de mayo, el ENRE permite un nuevo traspaso accionario en Yacylec. En este caso, del 1,75% del capital en manos de Dywidag Internacional, una empresa europea propiedad del fondo inversor Triton. Como en el caso de la CFI, los compradores son Electroingeniería y Enel Américas.
Pero si bien la operación ya tiene el visto bueno de las autoridades regulatorias locales, es más que probable que quede en suspenso debido a que los grupos compradores habrían desistido de concretar el acuerdo.
Según admitieron ante iProfesional, fuentes de Electroingeniería, el grupo cordobés no tiene intenciones de quedarse con esas tenencias en Yacylec. Lo mismo habrían decidido los ejecutivos de Enel Américas.
En ambos casos, el cambio de escenario económico, la volatilidad financiera local y la inestable cotización del dólar habrían jugado en contra, por lo cual la CFI deberá seguir buscando nuevos interesados en quedarse con las acciones que controla en Yacylec.
En el caso de Electroingeniería también pesaría la causa penal en la que están involucrados sus dos fundadores, vinculados al pago de coimas a ex funcionarios del gobierno kirchnerista para favorecerse de millonarios contratos de obras públicas.
Tanto Ferreyra como Acosta permanece en prisión por orden del juez Claudio Bonadío en la causa iniciada tras conocerse las anotaciones que Oscar Centeno, el ex chofer de Roberto Baratta, volcó en una serie de cuadernos y en las cuales describía la trama del pago de estos sobornos durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.