La pregunta del millón: ¿habrá aumento de sueldos tras la cuarentena?
Pese a las demora para acceder a la ayuda del Estado para pagar los sueldos a los empleados y mantener las empresas en medio de la rotunda baja de actividad que implicó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, aún son muy pocas las compañías que optaron por pagar en cuotas el salario a sus empleados.
La rotura de la cadena de pagos hizo que las cajas de muchas compañías se encontraran extenuadas a la hora de abonar los haberes, y por eso sí se tomaron medidas drásticas tanto en lo que refiere a los aumentos de salario para este año como para el pago de bonos por desempeño.
"El principal problema al que se enfrentan las organizaciones es la cadena de pagos y la baja en la facturación, (exceptuando algunos rubros como los alimenticios), y en muchos casos se resienten las operatorias normales de las empresas que retoman la operación pero no en su máxima capacidad y con personas que no están pudiendo realizar sus labores por ser consideradas grupo de riesgo", evaluó Miguel Alfonso Terlizzi, presidente de la consultora de Recursos Humanos, HuCap.
Este experto considera que, a pesar de la apertura que se viene realizando para algunas actividades en medio de las medidas de aislamiento social, no todas las empresas lograron salir de ese agujero financiero, y "continúan con problemas financieros en las cadenas de pagos principalmente. No se cobra en tiempo y forma, lo que genera una cadena de incumplimientos frente a las obligaciones de cada empresa", dijo Terlizzi.
Más allá de algunos casos emblemáticos que resonaron en los medios de comunicación –en el sector de servicios, medios y salud- , los pagos parcializados no fueron implementados como tendencia.
Sí fueron más las empresas que decidieron bajar salarios, ya sea aprovechando la oportunidad que ofrecían ciertos convenios colectivos o por medio de acuerdos con las centrales gremiales, para preservar los puestos de trabajo de empleados que no están cumpliendo tareas.
Pero el pago en cuotas de los salarios de los empleados no es tan frecuente como esas otras medidas. Las consultoras que procesan las nóminas de grandes empresas y multinacionales en el país dijeron a este medio no tener registro de ningún caso o de solo un caso que optó por esa opción entre cientos de sus clientes. No lo detectan como una tendencia que pueda expandirse.
En cuanto a pequeñas y medianas firmas, el panorama es diferente. Carlos Contino, socio gerente de CONA RH, aseguró que ya en abril el último relevamiento de salarios y compensaciones llevado a cabo por esa firma de talento mostró que entre 25 empresas relevadas, al menos dos estaban ya pagando los haberes de marzo en cuotas.
"Son dos empresas que están paradas", aclaró el titular de CONA RH a iProfesional. Vale la pena recordar que en marzo las medidas de aislamiento social que impidieron a muchas compañías seguir operando las afectaron solo 10 días corridos. Abril fue el primer mes completo que la Argentina transcurrió en cuarentena.
Sobre los pagos de sueldos en cuotas, Contino prosiguió: "Entiendo que se puede dar más en MiniPymes, que habitualmente operan con bastante informalidad en los pazos de pago de salarios. Por ejemplo también en comercios minoristas de hasta tres locales y de un dueño, contratistas pequeños, relación con monotributistas contratados por servicios, etc.".
Miguel Alfonso Terlizzi, presidente de la consultora HuCap echó algo más de luz al asunto: "Conocemos empresas de renombre que están pagando en cuotas o abonan solo lo acordado (N de R: con recortes de salario para personal que no cumple tareas). Y también que han negociado con los sindicatos, en cuyos casos es técnicamente en un pago pero un salario reducido o el 100% con el pago de la ATP", aseguró.
También el presidente de HuCap apuntó que hay otro fenómeno, que es que los trabajadores en algunos casos están cobrando "en días posteriores a lo que cobraban habitualmente, con demoras e incertidumbre por parte de las empresas qué responderles sobre fechas precisas a los empleados".
Pero Terlizzi reconoce que es aún más crítica esa situación en las Pyme: "No pueden pagar directamente a sus empleados, ni siquiera en cuotas, y se encuentran a la espera de más ayuda estatal, préstamos o cobros de cheques rechazados hasta tanto se normalice la cadena de pagos o puedan operar normalmente".
En todos los casos se trata de empresas que no pudieron o siguen sin poder operar durante la etapa de aislamiento social, o que lo hacen con parte de su plantilla y tienen al resto sin prestar tareas. Vale la pena recordar que los acuerdos que realizaron los sindicatos con las patronales para percibir solo parte de los salarios aplicaba a los trabajadores que no están prestando servicios y no a los que concurren regularmente a trabajar.
¿Qué pasará con los aumentos y el empleo?
El último dato disponible acerca de qué ocurrirá este año con los aumentos de sueldo para empleados dentro y fuera de convenio proviene del "Relevamiento de incrementos salariales y proyección de dotación en el contexto del Covid-19" que llevó a cabo HuCap entre el 8 y el 14 de mayo.
Participaron 65 compañías de distintos rubros (Servicios; Retail; Industria pesada; Industria Liviana; Industria Alimenticia; Laboratorios; Industria de la Salud y Laboratorios; Seguridad; Logística; entre otros).
Estas mismas empresas proyectaban, antes de desatarse la crisis sanitaria, dar en 2020 alzas salariales del 38,4% en promedio a los empleados no convencionados.
- El 77% de ellos ya modificó esa proyección en función del contexto actual. En ese grupo, un 35% ya definió brindar en 2020 incrementos inferiores a los proyectados inicialmente. El promedio arroja un 15% menos de lo que tenían planificado.
- Otro 32% han definido no brindar ningún incremento salarial, al menos hasta tener un panorama más claro. Esto ocurre, según apuntan desde HuCap, sobre todo aquellas empresas que tienen cerradas sus operaciones o están siendo muy impactada su facturación y rentabilidad, pero también en un porcentaje de empresas están evaluando o realizando recortes salariales (un 14% específicamente).
- Un 30% todavía no tienen una definición formal sobre qué ocurrirá en sus organizaciones con los aumentos de sueldo. Se encuentran analizando la situación, sabiendo que la modificación será a la baja. También han postergado la fecha en la que van a brindar los incrementos, que muchos casos era marzo o abril.
- Finalmente, un 4% de las empresas que revisaron la pauta salarial 2020 manifiestan que los incrementos se van a mantener, pero los van a brindar una vez "finalizada" o "normalizada" la situación actual.
También Willis Towers Watson condujo en Argentina una investigación en 100 grandes empresas y filiales de multinacionales, entre el 7 y el 14 de abril. Ya entonces en ese "pool" de compañías, un 33% había reducido o retrasado los aumentos de sueldo para empleados fuera de convenio, otro 17% había congelado los salarios hasta nuevo aviso, y hasta entonces solo el 10% había reducido los salarios junto con la jornada laboral en cuarentena.
Por otra parte, la mayoría de las empresas consultadas en los mencionados relevamientos planean hacer todo lo posible para mantener los puestos de trabajo.
"Pocas compañías realizaron despidos hasta el momento, pero un 33% están planeando hacerlo", dijeron desde WTW. Y agregaron que el 65% ya tiene suspendidas las nuevas incorporaciones para lo que queda del año.
Entre las consultadas por HuCap en mayo, un 65% aún no planea efectuar ningún cambio en su dotación.
Hay solo un 3% de las firmas indagadas que tiene planes de incrementar su plantilla en algún momento este año, y ya llegó hasta el 32% el porcentaje de las que estiman que tendrán que efectuar recortes de personal.
¿Qué pasa con la ayuda para pagar sueldos?
Como complemento de las medidas de aislamiento social y para aminorar el impacto económico que éstas pudieran tener en las empresas que operan en la Argentina, el gobierno nacional lanzó el programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y a la Producción (ATP), que entre otras cuestiones evalúa el otorgamiento del beneficio del salario complementario.
Es decir, las empresas que cumplan con ciertos requisitos pueden solicitar ayuda para pagar los sueldos de sus empleados en este momento en el que se encuentran sin poder producir y sin vender.
El porcentaje que aporta el Estado para el salario complementario se define de acuerdo al tamaño de la compañía. Por caso, las que emplean a menos de 25 personas pueden percibir como salario complementario el 70% de lo que reciben los trabajadores, mientras que para las de más de 800 el porcentaje se reduce a 50%.
Para acceder a la ayuda para pagar sueldos las empresas deben cumplir ciertos requisitos, que son:
- Los empleados deben estar inscriptos en una rama que haya estado afectada por las medidas del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
- Las empresas haber experimentado una facturación de hasta el 5% nominal positivo, si se compara el periodo 12 de marzo al 12 de abril de 2020 respecto del mismo lapso de 2019.
- En caso de tener más de 800 empleados, no podrán distribuir utilidades, comprar sus propias acciones; ni adquirir bonos para después fugar los dólares o realizar erogaciones con otras empresas vinculadas o no que estén radicadas en paraísos fiscales.
Unos 250 empleadores ya se registraron para solicitar esta ayuda para pagar sueldos que, y en total dan trabajo a alrededor de tres millones de personas (aproximadamente la mitad de las que se desempeñan en el sector privado en la Argentina, de acuerdo a datos de la Anses).
Sin embargo, según pudo saber iProfesional, son varias las compañías que están evaluando bajarse del programa de Asistencia al Trabajo debido a las restricciones que se implementaron con posterioridad a su lanzamiento para quienes reciben este beneficio.
Esas no son las únicas críticas que recibió esta modalidad. "El programa ATP al que han aplicado muchas organizaciones ha servido para aliviar en cierta medida el impacto económico que la crisis del Covid-19 trajo, pero no soluciona los problemas de fondo y mucho menos en las pymes y mini pymes que, en casos extremos, hasta se plantean la imposibilidad de poder continuar sus negocios", dijo al respecto Terlizzi.
Y cerró: "Para quienes no se encuentran operando han indicado que su situación es muy crítica, sin ingresos y viendo alternativas para poder hacer frente a los egresos que no se detienen".