Condenas de hasta seis años de prisión por evasión impositiva en la venta de cereales
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El Tribunal Oral Federal N° 2 de Córdoba condenó a penas de hasta seis años y seis meses de prisión a 13 personas, quienes fueron encontradas responsables de integrar una asociación ilícita que ejecutó millonarias defraudaciones al Fisco mediante maniobras relativas a la comercialización de grandes volúmenes de cereales y soja.
Por unanimidad, los jueces José Fabián Asís -presidente- y Jaime Díaz Gavier y la jueza María Noel Costa impusieron la pena más alta -seis años y seis meses- a Fernando Cuello, a quien consideraron jefe de la asociación ilícita fiscal. Cuello también fue inhabilitado para comercializar granos y actividades vinculadas. A su vez, el contador Rubén Ceva fue condenado a cinco años y medio e inhabilitado para ejercer la profesión.
Por su parte, Jorge Ferrer y Sergio Guevara fueron penados, ambos, a cinco años de prisión, y Julio Luján y Daniel Velayes a cuatro, todos como coautores integrantes de la asociación ilícita fiscal y de la evasión y la apropiación de tributos. Otro grupo de acusados -integrado por Gastón Ludueña, Rosendo González, Néstor Beltrame, Rubén Di Primio, Miguel Ortega, Matías Giuggiolini y Osmar Sismondi- fueron condenados a dos años y medio, al ser encontrados partícipes secundarios de la asociación ilícita. También hubo cinco absoluciones por ese delito, en línea con lo postulado por el Ministerio Público Fiscal.
Los fundamentos de la sentencia se divulgarán el 9 de agosto. El juicio había comenzado a principios de marzo, en tanto que el alegato de la Fiscalía General concluyó a mediados de mayo, cuando se pidieron penas de hasta ocho años de prisión para 15 de las personas que llegaron al debate.
La banda funcionó en distintas localidades de la provincia de Córdoba, como Río Tercero, San Agustín y Despeñaderos, y también en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El volumen operado, según los cálculos que se realizaron, superó 1.500 millones de pesos.
Otra causa por "megaevasión" en Córdoba
En la torre de los Tribunales federales de Córdoba, se conoce a una causa como la "otra" megaevasión. Se estima que cientos de millones de pesos fueronj evadidos, según los cálculos que realizó la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Es que, de manera paralela, desde el segundo semestre de este año dos largas investigaciones por supuestos delitos tributarios, salieron a la luz.
Por un lado, una presunta "usina" de facturas truchas, causa que ya tiene más de 40 imputados. Por el otro, una doble maniobra en la que también se presume que el objetivo era eludir al fiscal, expediente que alberga 19 nombres.
En septiembre de 2020, hubo una puja entre dos jueces para dirimir quién finalmente quedaba al frente del expediente. Bustos Fierro, a quien le tocó el caso por primera vez, pidió apartarse por decoro, ya que dijo conocer a uno de los posibles imputados.
Ante esto, la investigación pasó a manos del juez Miguel Hugo Vaca Narvaja, quien entendió que su colega no tenía argumentos sólidos para dejar la causa. Ante esto, dirimió la Cámara Federal, que ordenó que Bustos Fierro se hiciera cargo.
En Tribunales Federales se habla de una "doble vuelta" para intentar evadir impuestos, sobre todo IVA y Ganancias.
Por un lado, se investiga una maniobra con facturas apócrifas en perjuicio de la AFIP, similar a la megaevasión, que habría comenzado a ejecutarse, al menos, en 2017.
Por otra parte, se sospecha de una triangulación ficticia con las exportaciones, desde 2019, con el objetivo de eludir el cepo y defraudar a la Aduana. El delito bajo sospecha: violaciones al régimen penal cambiario.
"Simulaban exportaciones con el objetivo de poder acceder a dólares legales", sintetizó una fuente que sigue muy de cerca este expediente.
Se sospecha que creaban sociedades anónimas simplificadas (SAS) y que operaban en el mercado único y libre de cambios, entre otros puntos que figuran en la causa.