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La economía que viene: las dudas y temores que genera 2023 para los economistas

El año que viene, marcado por un contexto electoral, presenta desafíos en cuanto precio del dólar, inflación e índices de pobreza. Alerta de economistas
14/12/2022 - 18:20hs
La economía que viene: las dudas y temores que genera 2023 para los economistas

A pocas semanas para finalizar el año, los analistas ya están planteando cuáles serán los desafíos que traerá 2023 para la economía y la política argentina, sobre todo con variables que se encuentran en una "tensa calma", como la inflación, el precio del dólar y la deuda en pesos.

Lo concreto es que se viene un año impar y electoral, donde se definirá el próximo Presidente de la Nación, en un escenario que luce complejo porque requerirá que se profundice el ajuste.

Ello en un escenario que, según los economistas de la consultora LCG, fundada por Martín Lousteau, va a estar signado por "dos amenazas constantes".

La primera de las amenazas mencionadas es el riesgo del roll over (renovación) de la deuda y la necesidad de conseguir fondos para cubrir el déficit primario y financiero.

"A medida que se acerque el período electoral, las chances de renovación de la deuda van a bajar y las carteras de los fondos cautivos en el mercado local corren el riesgo de dolarizarse", advierte el informe.

En segundo lugar, se resalta la suba de la pobreza: "Si bien creemos que la actividad no entrará en una recesión profunda, la elevada inflación en conjunto con una economía estancada son un combo para que la crisis social siga agotando a la sociedad", alertan los expertos de LCG.

El atraso del precio del dólar por la mayor inflación no luce como un aspecto de fácil resolución.
El atraso del precio del dólar por la mayor inflación no luce como un aspecto de fácil resolución para el Gobierno y el índice de pobreza.

Ajustar el dólar, problemas sociales y una economía estancada

De acuerdo a los analistas, el conflicto distributivo es el "escollo más grande" pensando más allá de 2023. "La necesidad de corregir el tipo de cambio, dada la escasez de divisas, implica, al menos por un tiempo, asumir una mayor pobreza", subrayan los economistas.

Y completan: "Más aún, las chances de dar ayuda social por sobre el actual nivel de gasto es limitada. La capacidad de financiar una transición con deuda también se achica, dado el contexto internacional".

En resumidas cuentas, las dificultades que tendrá el Gobierno de continuar con el señoreaje "acotan" la capacidad de dar señales de las autoridades de reducir la inflación.

"Las opciones se reducen a una reorientación del gasto desde el que era ´necesario´ para impulsar el crecimiento hacia el gasto social para aliviar tensiones, al menos durante la transición", indican desde LCG.

Por lo tanto, se considera que el Banco Central tendrá que manejar una política monetaria "algo ambigua", debido a que deberá tomar en cuenta que las decisiones respecto al tipo de cambio impactan en la distribución del ingreso.  

Otros desafíos económicos

Entre otros aspectos que tiene pendiente el Gobierno, el Ministro de Economía, Sergio Massa, anunció recientemente un acuerdo con el Club de París para renegociar la deuda externa en dólares con este organismo por unos u$s2.400 millones, "algo que podría ser una buena señal incluso para los títulos en general".

El escenario electoral de 2023, donde se elegirá Presidente, genera tensiones entre la necesidad política y las medidas económicas
El escenario electoral de 2023, donde se elegirá Presidente, genera tensiones entre la necesidad política del oficialismo y las medidas económicas.

"El otro frente sin resolver es, justamente, la cuestión cambiaria. No parece que haya razones para posponer un aumento del tipo de cambio más que la restricción política interna del oficialismo. Sobre este punto es donde no encuentra el aval el Ministro de Economía, y esto obligará a convivir con la demanda de cobertura por el miedo a la corrección cambiaria y la necesidad política de evitar esa corrección", reflejan los analistas de LCG.

En resumidas cuentas, los economistas sostienen que, de continuar con esta situación actual, "se vivirá el próximo semestre con inflación alta, múltiples tipos de cambio y una actividad estancada sólo sostenida por la impaciencia que genera en el consumo la suba sostenida de precios".

El gran interrogante que se abre es saber hasta cuándo el mercado estará dispuesto a financiar esta situación llena de parámetros frágiles y con poco sustento en el largo plazo.

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