Atención inversores: cuál es el techo de los bonos de cara a los próximos meses
La suba que tuvieron los bonos en dólares y las acciones argentinas que cotizan en Nueva York (ADR) en las últimas semanas, siguen generando debates, donde mucho se habla de las causas de este rally en los precios y hasta dónde puede llegar esta avanzada.
En general, la lupa está posada en aquellos papeles que sufrieron un rebote "injustificado", y también en los otros activos nacionales que tienen cotizaciones deprimidas y pueden llegar a seguir escalando en su valor.
De hecho, se registran subas en moneda estadounidense de hasta 35% sólo en junio, como es el caso de los ADR de Edenor.
Para resumir la suba importante del precio de muchos de los activos nacionales que cotizan en dólares, y qué puede pasar con ellos en los próximos meses, se deben analizar los factores externos e internos que influyen sobre ellos.
En principio, es indudable que existen factores globales que vienen configurando un buen contexto para los activos argentinos.
Por ejemplo, se observa que los activos de Latinoamérica vienen recuperando posiciones, y también se tiene a la soja en más de u$s500 la tonelada.
"Adicionalmente, es probable que ciertos flujos financieros estén bajando exposición de países como Colombia o Perú, dados los acontecimientos políticos sociales que están atravesando, y así busquen otros destinos de América Latina", resume a iProfesional el economista Roberto Geretto, portfolio manager de Fundcorp.
Por el lado de los motivos locales, se destacan al déficit fiscal y a la marcha de la emisión monetaria.
De acuerdo a Geretto, a nivel interno, el déficit primario para los primeros cuatro meses del año fue del 0,4% siendo el "mejor dato de los últimos 5 años. Así, esto permitió que el Banco Central disminuya notoriamente la monetización del déficit en comparación con lo ocurrido el año pasado", afirma.
Por otra parte, en los últimos meses el BCRA pudo acumular algo de reservas, donde, por un lado, viene teniendo saldos positivos en sus intervenciones en el mercado de cambios.
Por ejemplo, este economista cita que en el mes de mayo la autoridad monetaria compró reservas por aproximadamente u$s2.000 millones, y además en el último mes disminuyeron las ventas de reservas para contener la brecha cambiaria vía bonos.
Así, las reservas brutas pudieron pasar desde los menos de u$s40 mil millones que había a principios de año a los niveles actuales de más de u$s42 mil millones.
"En cuanto a las reservas netas líquidas, pasaron a ser positivas", destaca Geretto.
En cuanto a los compromisos de deuda internacionales que tiene el país, la postergación del pago con el Club de París permitió que, al momento, se evite un pago de u$s2.400 millones, "lo cual ejercería presión sobre el bajo nivel de reservas del Banco Central", acota este analista.
Y agrega que: "Adicionalmente, que el citado organismo mundial haya solicitado algún tipo de aprobación, hizo que se tenga un acercamiento con el FMI por poder postergar dicho pago. De ese modo, se tuvo también como subproducto otro evento considerado positivo para los mercados".
Es decir, se aplazó por algún tiempo las importantes erogaciones de dólares que se debían hacer al Club de París y al FMI.
Valores de Recupero de los bonos
Desde otra óptica, es importante analizar no sólo las causas de la suba de los precios, sino desde dónde se parte.
"Tomando por caso los bonos soberanos en dólares, se tienen que estos parten de valores considerados de recupero, donde las probabilidades de default implícitas en los precios siguen siendo muy altas. Por tanto, ante cualquier catalizador positivo, una suba desde valores de recupero siempre es más factible que si los valores fueran más altos de los que corresponderían", resume Geretto a iProfesional.
Es que el nivel de actividad también tiene demasiado peso, debido a que la "tan temida" Fase 1 que se tuvo por unos días, aparentemente, fue un paso fugaz.
A efectos comparativos, en marzo 2020, cuando se tuvo el comienzo de la pandemia, los 12 días de cuarentena Fase 1 que abarcaron ese mes, hicieron que la actividad económica de desplome un 10,5%.
"Sin embargo, la corta Fase 1 que hubo días atrás, y con menos nivel de adhesión, han despejado los peores temores respecto a tener una caída similar en el nivel de actividad. Después de todo, tasas en dólares del 17% siguen siendo muy altas", concluye Geretto.
Desafíos Futuros
Las elecciones de este año plantearán un gran desafío para el comportamiento que tendrán los papeles argentinos.
"Aun sin grandes ganadores o perdedores, el mayor riesgo que implica el evento político incentiva bajar la exposición en activos domésticos. Más teniendo en cuenta que un resultado electoral puede determinar el rumbo macro de los próximos años, o al menos, de la actual gestión", dice Geretto.
En principio, este economista afirma que el mes comenzó con menos compras de reservas por parte del Banco Central, donde en los primeros 8 días hábiles del mes el organismo compró u$s558 millones, versus los casi u$s620 millones que adquirió en los primeros 8 días hábiles de mayo.
"Así, va a ser difícil repetir la performance de mayo, donde el BCRA registró la mayor acumulación de reservas brutas en casi 2 años, al ir pasando la mayor época de liquidación del agro. Por otro lado, en estos primeros días de junio, el organismo monetario habría estado más activo en la contención de la brecha cambiaria, vendiendo reservas vía bonos", grafica Geretto.
En cuanto al déficit y emisión monetaria, este economista sostiene que el mayor rebote de la actividad post-cuarentena ya haya ocurrido, y la cercanía de las elecciones, "plantean un escenario que incentiva el mayor gasto público".
De ese modo, es probable que "en los próximos meses se vea una aceleración en el déficit fiscal y emisión monetaria respecto a los primeros 5 meses relativamente calmos que ya se tuvieron en 2021. De ocurrir, todo esto también ejercería presión sobre la brecha cambiaria", alerta.
Por el lado de las variables macroeconómicas, Geretto detalla que por más que haya habido una cierta moderación fiscal y monetaria en el comienzo del año, "la inflación sigue en altos niveles, las reservas en bajos valores, así como el país presenta serios problemas de crecimiento a largo plazo y solvencia institucional".
Por tanto, se considera que los drivers que determinan una buena performance de largo plazo para los activos financieros "están lejos de estar presentes".
Hasta dónde pueden llegar los bonos
De acuerdo al análisis de Geretto, existe un piso y un techo proyectado para los bonos argentinos nominados en dólares.
Piso: tomando los últimos meses, estima un piso para los bonos en dólares en un rango de retornos del 20% aproximadamente. Esto traducido a riesgo país equivale a 1.600 puntos, según el experto.
Techo: por otro lado, se considera que, de seguir subiendo de precio, pueden tocar un techo de unos 1.100 puntos, que es lo que se obtuvo con posterioridad a la reestructuración de deuda del año pasado. Es decir, alrededor de 11% de tasa.
Más allá de esta posibilidad, "aun se está lejos" de tocar este nivel, y dependerán de varios factores en los próximos meses para conocer, realmente, cuánto más pueden subir las cotizaciones de los títulos argentinos.-