Alerta por el precio del dólar: este es el verdadero nivel de reservas que tiene el Banco Central
La cantidad de reservas internacionales que tiene disponible el Banco Central es una cuestión fundamental, debido a que es lo que garantiza el normal funcionamiento de la economía local y para afrontar una crisis o sobresalto en los mercados.
Los números oficiales hoy informan que, en total, hay unos u$s43.000 millones en las arcas públicas, pero si se descuentan los diversos ítems que no son tenencias propias del Estado y se contabilizan allí (encajes, swaps, entre otros), la cifra de los dólares cash que se cuenta como real poder de fuego es muy inferior.
Algo que toma trascendencia, sobre todo en estos momentos de profunda recesión doméstica por el freno en la actividad, causada por la actual pandemia de coronavirus, como así también por el arrastre previo de una suma de desacertadas políticas económicas. Hechos que han generado corridas cambiarias y la consecuente implementación de un cepo al dólar por parte de los últimos gobiernos.
En concreto, por las inestabilidades domésticas, las cifras reales de las reservas son importantes como termómetro y como seguimiento de la solidez que tiene la economía de un país. Por eso su bajo nivel pueden inquietar a varios.
Los dólares son elementales, hoy por hoy, para que cualquier economía pueda funcionar. Y no es una frase hecha. La moneda estadounidense es la insignia de cambio que se utiliza para casi todas las transacciones internacionales y para importar insumos, servicios y productos terminados que utilizan empresas y personas.
Esto se debe al respaldo y reconocimiento mundial que tiene como medio de pago esta divisa. Un prestigio que carece el peso argentino por la golpeada economía nacional y por una inflación constantemente alta a lo largo de los años, que hace perder el valor de nuestra moneda de forma permanente.
"Las reservas internacionales juegan un rol estratégico en la macroeconomía global de los países, ya que por ejemplo permiten intervenir en el mercado de cambios acotando una devaluación y así defender el valor de la moneda", detalla a iProfesional Roberto Geretto, economista jefe del banco CMF.
También acota que las mismas influirán en el esquema cambiario a elegir, porque "ante un bajo nivel de reservas es menos probable poder sostener un tipo de cambio fijo, debiendo considerarse un tipo de cambio flotante y, en el peor de los casos, añadirle a este último controles a los movimientos de capitales y regulación de la compra de divisas".
En este sentido, Iván Cachanosky, economista de Fundación Libertad y Progreso, dice a iProfesional que las reservas internacionales del Banco Central "vuelven a cobrar protagonismo en estos días".
Y completa: "Es que con un mercado cambiario que cada vez exige más intervenciones, en un contexto de brechas crecientes, las municiones con las que pueda contar el BCRA para manejar la situación son sumamente importantes. Estas municiones son las reservas".
Por ende, la cantidad concreta y real de dólares que dispone el Banco Central es fundamental.
Reservas en foco
En principio, un dato que no pasa de largo es la abrupta caída de las reservas brutas que hubo desde la previa electoral de las elecciones presidenciales del 2019 hasta el presente.
Los números son impactantes si se parte que el 9 de abril del año pasado, por los fondos aportados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), tras el rescate realizado a la gestión de Mauricio Macri, el Banco Central informó contar con u$s77.481 millones. El monto más alto registrado en las reservas en los últimos 20 años.
Hoy, tras las sucesivas corridas cambiarias que hubo en poco más de un año, las reservas totales que informa el BCRA a diario se ubican en torno a los u$s43.000 millones.
Es decir, en unos 14 meses "se esfumaron" de las reservas del Banco Central unos u$s34.000 millones de su contabilidad, o lo mismo a decir que cayeron alrededor del 45% en ese lapso.
Pero la cuestión fundamental es que las divisas disponibles cash que precisa el BCRA para "apagar incendios" son muy inferiores a la cifra que informa.
Simplemente, porque la autoridad monetaria incluye en su contabilidad total una serie de variables que no se puede utilizar, como es el caso concreto de los dólares encajados que pertenecen a ahorristas y empresas.
"Aquí resulta necesario distinguir entre las reservas internacionales brutas, las reservas internacionales netas y las reservas internacionales disponibles", desglosa Cachanosky.
Según afirma este economista, las reservas internacionales brutas son el total de reservas que figuran "en la vidriera" del BCRA. Es decir, son todos los dólares que están en su cuenta, que en la actualidad rondan en torno a los citados u$s43.000 millones.
"No obstante, no todos esos dólares le pertenecen al Banco Central. Por esta razón es que deben comenzar a netearse algunos conceptos", agrega Cachanosky.
En este marco, destaca que las reservas internacionales brutas están compuestas por:
-Encajes de los dólares de bancos de los particulares y empresas.
-Swap con China.
-Obligaciones con Organismos Internacionales.
-Depósitos del Tesoro Nacional
-Dólares que le pertenecen al BCRA.
¿Cuántos dólares "reales" tiene el BCRA?
Lo concreto es que el Banco Central informa una cantidad de divisas muy superior al que tiene disponibles netas para hacer frente a la demanda.
Entonces, ¿cuántos dólares tiene a disposición inmediata el Banco Central? De acuerdo al relevamiento que hizo iProfesional entre economistas, el consenso absoluto es que el nivel real de reservas disponibles oscina entre u$s5.000 millones y los u$s11.000 millones, ya que depende mucho de qué tipo de activos se considera para un uso inmediato.
De hecho, un reconocido economista y ex funcionario dijo a este medio pidiendo anonimato: "El verdadero nivel de reservas es un misterio que jamás pude conocer".
Al respecto, Juan Luis Bour, economista jefe de FIEL, le dijo a iProfesional que si las reservas brutas al último día de mayo (u$s42.589 millones) se les restan los pasivos en moneda extranjera (DEG, Encajes, y organismos internacionales), que suman u$s14.200 millones, quedan u$s28.400 millones.
Ahora bien, Bour agrega que hay otros pasivos por u$s22.411 millones por los swap con China, entre otros.
"Lo que deja unos u$s6.000 millones. Pueden tomarse sólo una parte de los pasivos y estás en u$s9.000 millones disponibles. Pero lo importante no es tanto el monto (bastante exiguo), sino que la evolución es endógena a la política", reflexiona el economista de FIEL.
Aquí está el desglose que realiza Bour a iProfesional:
¿Por qué varían los cálculos de las reservas reales respecto a estos datos? Algunos analistas restan otras cuentas, como las obligaciones con organismos internacionales y otros pasivos.
Por lo tanto, "el neto podría ser más bajo, o más elevado, si se usan los recursos prestados por China o si se pudieran ´tradear´ los DEGs (no líquidos)", concluye Bour.
Desde la perspectiva de Geretto, si bien en el corto plazo las reservas brutas son el stock que tiene disponible el Banco Central a mano, "es muy importante el concepto de reservas netas".
"Esto es, a las reservas brutas se le restan las reservas ´prestadas´ que tiene el BCRA, para que de ese modo se vislumbren las reservas realmente propias de la entidad", afirma.
Es decir, para Geretto, la importancia radica en que "tarde o temprano ciertos componentes que se contabilizan dentro de las reservas brutas tienden a ser transitorios (por ejemplo, un préstamo), o en momentos de crisis se correlacionan con las tensiones del mercado de cambios, que es justo cuando más reservas se necesitan para afrontar dichas tensiones".
A modo de ejemplo, la salida de depósitos en dólares tiende a incrementarse en momentos en que el dólar se dispara.
En cifras, si a las reservas brutas actuales de casi u$s43.000 millones se les restan el swap con China (u$s18.200 millones), los encajes en dólares que tienen los bancos en el Banco Central (u$s11.190 millones), y el préstamo del Banco de Pagos Internacionales (BIS) (u$s2.700 millones), "se tienen reservas netas en el orden de u$s10 mil millones, calcula Geretto.
En este sentido, Mariela Díaz Romero, economista Senior de la consultora Econviews, detalla a iProfesional que "las reservas netas del Banco Central se componen de las brutas netas de pasivos".
Por lo tanto, coincide en que los principales pasivos en dólares son los mencionados anteriormente, y en que las reservas netas rondan los u$s11.000 millones.
Con este panorama, el poder de fuego oficial se limita. Por ejemplo, según analistas privados, se estima que entre mayo y abril pasados la autoridad monetaria debió vender más de u$s1.500 millones en el mercado para calmar la demanda y falta de oferta. Más allá que en el corriente mes algo puedo recuperar la entidad monetaria.
"La intervención cambiaria pesa sobre las reservas netas. En junio, el Central corrió de escena a la demanda de dólares para importaciones, poniendo trabas adicionales para que los importadores no adelanten pagos, como había pasado en mayo. De esa manera, a comienzos de mes el BCRA pudo retomar la compra de reservas", resume Díaz Romero.
Dentro de los pronósticos que indican que el nivel es aun inferior a lo reflejado antes, para Cachanosky las reservas internacionales netas del Banco Central se encuentran en alrededor de u$s5.000 millones, lo que es tan sólo un 11% de las reservas internacionales brutas, "un nivel sumamente bajo".
"Vale la pena aclarar un punto adicional. Existen en oro (no dólares), aproximadamente u$s3.400 millones, que algunos analistas suman al nivel de reservas netas. Por lo que, tomando este monto, las reservas internacionales netas ascenderían a casi u$s8.500 millones. Sin embargo, se podría poner en tela de juicio esto porque no es tan sencillo transformarlas en dólares líquidos", acota el economista de Fundación Libertad y Progreso.
¿Es sólido el Banco Central?
Ahora bien, la tranquilidad o no que brindan las cantidades netas disponibles dependen de la lupa con la que se las mire a las reservas.
"Por tanto, si consideramos que el PBI de Argentina en 2019 cerró en casi u$s449.000 millones, tendremos que las reservas brutas son menos del 10% del PBI, mientras que las netas menos del 2,5% del PBI, los cual son niveles bajos", alerta Geretto.
Según Santiago Rodríguez Lucca, CEO de Bergson, "el swap con China se puede afectar sólo a exportaciones bilaterales entre los dos países. En tanto, el préstamo del FMI y los fondos del BID no son de libre disponibilidad, con lo cual se le acotan las posibilidades del intervenir en el mercado de cambios y contener un desborde como los sufridos durante el último Gobierno".
En este contexto, Geretto afirma que los controles cambiarios en el corto plazo han aliviado la sangría, "pero están lejos de resolver los problemas de fondo, originados en un bajo flujo exportador, lo cual llevaría a analizar problemas como la inestabilidad macro e institucional, el déficit fiscal con alta carga tributaria, alta inflación, entre otras cuestiones. Salir del default debería ser solo un paso de un largo camino por recorrer".
Al respecto, Bour cuenta que las restricciones generan brecha, "la brecha genera expectativa de devaluación, eso acelera compras y posterga ventas, hasta que devaluás. La obligación de usar dólares propios para importar es una componente más del ´no te vendo´. Eso más la indefinición sobre deuda y la vaguedad del ´programa económico´ potencian exceso de demanda".
En ese ítem, Díaz Romero agrega a iProfesional que, con el reperfilamiento de los vencimientos en dólares bajo Ley local en abril, el Gobierno "se ahorró pagos por unos 10 mil millones de dólares, y este año no efectuará pagos de bonos en dólares bajo Ley extranjera, por la restructuración de la deuda bajo default".
De esta manera, sostiene que los pagos de bonos en dólares no afectarán a las reservas netas este año, pero que sí se verán afectadas por los pagos de deuda con organismos multilaterales (excepto Club de París).
Por ello, será central para el futuro del país y los dólares disponibles lo que ocurra con la renegociación de la deuda y las decisiones políticas y económicas.-