Marzo rojo: las acciones derraparon y solo dos bonos en pesos se salvaron del desplome
Marzo fue sin dudas un mes complicado para los mercados globales. El mes había empezado con algunos temores sobre el devenir de lo que en aquel momento era un brote de coronavirus que empezaba a expandirse en Europa.
Poco después se desató un conflicto entre las potencias petroleras que hizo que el barril de crudo tocara mínimos. El petróleo (WTI) terminó perdiendo 54,8% en el mes.
En un clima que ya venía complicado, los contagios de coronavirus se multiplicaron y el 11 de marzo la OMS declaró pandemia a la enfermedad. A esa decisión siguieron los paulatinos cierres de fronteras, vuelos y economías, lo que terminó de asestar el golpe de gracia a los mercados globales.
Argentina, que además lleva varios años de recesión y se encamina a una nueva renegociación de su deuda, se acopló al derrumbe internacional y cerró marzo con una fuerte sangría, tanto en acciones como en títulos públicos.
Acciones, teñidas de rojo
Todas las compañías que cotizan en Bolsas y Mercados Argentinos (Byma) registraron pérdidas en términos mensuales. El índice S&P Merval, el líder de la plaza bursátil porteña, se derrumbó 30,28% en pesos y 34,17% medido en dólares.
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"Marzo de 2020 será recordado por un impresionante sell-off para la renta variable, con caídas pronunciadas en todos los papeles, que se acumulan a las bajas del mes pasado", escribió la casa de bolsa Tavelli y Cía. en un informe para sus clientes". Y ejemplificó: "Papeles ligados al sector bancario mostraron derrapes del orden del 40% en promedio. Papeles ligados al sector de Utilities acompañaron con bajas de hasta 35%".
Precisamente, la acción más afectada fue la de YPF, que perdió 47,6%, de la mano del derrumbe del petróleo. El podio de las peores performances del mes lo completaron dos bancos: Galicia, que retrocedió 43,57%, y Macro, que cayó 40,55%.
Los mejores desempeños del mes también fueron para empresas cuyas cotizaciones terminaron en terreno negativo. En este caso, las que menos perdieron durante marzo fueron Pampa Energía, cuya cotización bajó 8,58%; Ternium, que perdió 11,74%; y Byma, cuyo papel se hundió 15,79%.
"Cuando se producen estas grandes caídas, suelen bajar menos los sectores menos cíclicos y más defensivos. Por ejemplo, las empresas de telecomunicaciones. Acá está Telecom, por ejemplo, que perdió menos que el resto. Dentro de las que más cayeron, acá y afuera, están las energéticas y las cíclicas industriales. Cuando uno lo distribuye por sector, en Argentina se observa un comportamiento bastante similar al del resto del mundo", explicó Leonardo Chialva, socio de Delphos Investment.
Wall Street también sufrió
En Nueva York tampoco hubo buenas noticias para las acciones de origen local. Los ADR argentinos terminaron el mes con sangrías que superaron el 40% en varios casos. En Wall Street, al igual que en la plaza local, la peor parte se la llevó YPF. El ADR de la petrolera estatal derrapó un 47,8% en el mes. La siguieron Grupo Financiero Galicia, con una merma de 44,2%; Supervielle, que cayó 41,8%; y Macro, que retrocedió 41,4%.
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Esto se dio en sintonía con los rojos de los principales índices bursátiles estadounidenses, que acumularon fuertes caídas en el primer trimestre del año, pese al plan de estímulo anunciado por la Reserva Federal para apuntalar la economía en el contexto de la crisis global desatada por el coronavirus. El Dow Jones se derrumbó 22,43% entre enero y marzo, en lo que representó su mayor retroceso trimestral desde 1987. El S&P500, en tanto, se hundió 19,87% y anotó su peor trimestre en la historia. Por su parte, el índice Nasdaq cayó 15,85% en los primeros 3 meses del año.
Golpe a los títulos públicos
El plan original del Gobierno era cerrar marzo con la propuesta a los acreedores sobre la mesa. El cimbronazo en los mercados globales por la baja del petróleo primero y por la expansión del coronavirus después, dilató las proyecciones iniciales y el equipo de Martín Guzmán todavía ultima los detalles del canje.
En ese contexto, la deuda local ya estaba en la cuerda floja a comienzo de marzo y el mal clima global no hizo otra cosa que profundizar las caídas. Salvo algunas excepciones, los bonos soberanos cerraron el mes con pérdidas.
"Fue otro mes de rendimientos negativos para la renta fija, en un contexto en que la plaza local se contagió de la incertidumbre global. Bonos denominados en moneda local ajustables por CER mostraron bajas moderadas en el tramo largo de la curva de rendimientos. Los títulos denominados en dólares arrojaron comportamientos más intensos: fuertes caídas del orden del 25%/30%, sin distinción de plazos", resumió Tavelli y Cía.
De hecho, los mayores derrumbes mensuales las anotaron los bonos en dólares. El Discount en moneda estadounidense (DICAD) lideró las bajas, con una pérdida de 41,30%. El podio se completó con el Bonar 2037 en dólares (AA37D), que retrocedió 39,50%, y el Discount (DICA), que bajó 38,10%.
Los fuertes descensos de la deuda soberana en moneda dura repercutieron en el riesgo país, que tocó en marzo niveles que no se veían desde la crisis de 2001/2002. El indicador elaborado por JP Morgan mide la diferencia entre la tasa de los bonos argentinos y las de los títulos estadounidenses, considerados los más seguros del mundo. Al 31 de marzo, el riesgo país mostró un aumento mensual de 1621 unidades (+177%), ya que pasó de 2263 a 3884 puntos en los últimos 30 días.
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"En cuanto a los bonos, sufrieron mucho más los de países menos confiables, como Argentina. Por otro lado, con la caída del petróleo, que está cerrando el peor trimestre de su historia, los bonos corporativos energéticos argentinos han sufrido mucho. Es el caso de la deuda de YPF, por ejemplo. Eso se agregó a esta debacle que hemos observado en este mes y este trimestre tan atípicos", apuntó Chialva.
Las excepciones a la regla fueron algunos bonos en pesos, que lograron mantenerse en terreno positivo durante marzo. Fue el caso del Boncer 2020 (TC20), que ganó 9,7%, y el Bocon 2022 (PR15), que aumentó 3,3%.
Al respecto, Diego Martínez Burzaco, economista de Inversor Global, consideró: "Lo mejor, relativamente, del mes han sido los bonos en pesos, que supieron capear la tormenta de mejor manera antes que los títulos en dólares y las acciones". Consultado sobre las razones de ese desempeño, el especialista afirmó: "El Tesoro, tras el fallido canje del Bono Dual (AF20), aprendió la lección y se acercó a los bonistas dialogando y con ofertas de canjes más realistas".
De cara a la reestructuración de la deuda, Martínez Burzaco explicó que el deterioro de los títulos locales "da margen para oferta muy agresiva" pero alertó que si el Gobierno toma ese camino, "no va a haber ningún acuerdo en absoluto".
Activos de refugio
En un mes de gran incertidumbre, algunos inversores optaron por volver a los activos considerados más seguros. A nivel mundial, el oro es el refugio por excelencia. En el mes, la cotización de este metal precioso llegó a alcanzar máximos de los últimos 7 años aunque luego retrocedió. Finalmente, la onza cerró marzo con un alza de 2,3%.
El índice dólar, que lo mide contra una canasta de monedas, también alcanzó un máximo de 102,99 el pasado 19 de marzo por la búsqueda de refugio en moneda dura. No obstante, finalmente cerró marzo en 98,95 y el saldo mensual fue una suba de 1,85%.
A nivel local, el dólar oficial se acopló a la tendencia y también mostró un alza durante marzo, del orden del 3,6% en el mercado mayorista, donde cerró $64,47. Para los minoristas, en tanto, el billete se vendió a $66,58 en la última rueda del mes, lo que significó un aumento de 3,4%.