¿Encontró la fórmula?: con la ayuda de los bancos públicos, Sandleris le toma el tiempo al mercado del dólar
Parecía que el ruido político sumiría al Banco Central en otra etapa de presión y crisis cambiaria. Sin embargo, todo estuvo mucho más calmo de lo esperado.
Si bien los analistas apuntan a que ayudó el mercado externo, también es cierto que en las últimas ruedas el Gobierno modificó su estrategia para contener al dólar y, poco a poco, parece tomarle el pulso al mercado de cambio.
A las operaciones en futuros que prácticamente a diario realiza el Banco Central se sumaron las entidades oficiales, con pequeñas ventas en los últimos minutos de la rueda, que hunden el precio de la divisa sin tener que echar mano a las reservas.
El dato llamativo, de todos modos, es que antes de recurrir a esta estrategia sufrían el efecto inverso: sobre el cierre, el dólar solía encarar una trepada debida a escasas operaciones, ante un Central que sólo observaba la jugada.
"No puede ser que con un menos de u$s10 millones nos hagan saltar el precio", se reprochaban en ese momento las autoridades del organismo monetario.
"Se lo llevaban puesto todos los días. Me parece que faltaba un poco de picardía", reconoce, del otro lado, el jefe de la mesa de dinero de un banco local.
Una idea que quedó en el camino
Para evitar esos movimientos "disruptivos", como lo definían técnicamente en el BCRA, una de las primeras medidas que se barajó fue la de crear la figura de market maker (hacedor de mercado) para la plaza cambiaria.
Así, a cambio de ofrecerles algunos beneficios, las entidades que se inscribieran se comprometerían a mantener siempre una postura de compra o de venta para cuando no estén las dos puntas de la operación.
La idea, que buscaba replicar el buen resultado que mostró en el mercado de Lecaps, finalmente quedó en la nada. Si bien hubo varias reuniones entre los técnicos del BCRA y algunos directores con los gerentes financieros, el Central postergó ese plan.
"Seguimos analizando esa alternativa, pero no vemos que la implementemos en el corto plazo", aseguró a iProfesional una alta fuente del Central.
De todas formas, en las últimas semanas, la mesa del BCRA demostró que tiene otras herramientas con las cuales cumplir su objetivo de mantener el mercado cambiario relativamente estable. La nueva estrategia coincide con el aval del Fondo Monetario Internacional para que la autoridad monetaria pueda intervenir con reservas a fin de contener a la divisa.
"La mesa del Central tiene gente muy idónea, no son académicos, es gente del mercado. Entonces, cuando le das libertad para actuar, saben cómo contener al mercado", explica Daniel Vicien, director de Fondos Comunes de Inversión de Balanz. "Ahora, la expectativa es que al BCRA no le ganan", agrega.
En la misma línea, Leonardo Svirsky, analista de Bull Market Brokers, destaca que predomina un nuevo clima en la City desde que la entidad tiene el aval para intervenir. "El mercado está un poco más calmo. Acompañamos a la región y a los emergentes. Cuando el dólar se devalúa en el mundo acá devaluamos; y cuando se aprecia, se apreciaba acá también. Estamos más en línea", sostiene.
La ayuda de la banca pública
Respecto a la nueva estrategia oficial, Svirsky reconoce que en los últimos minutos de las jornadas cambiarias hay posturas que desinflan el precio, pero no puede confirmar que sea consecuencia del accionar de la banca pública.
"Se dice que son el Nación o el Ciudad, pero tampoco es gran cosa, es poco lo que venden", destaca. Sin embargo, sí ve una mayor intención del BCRA de domar al dólar: "creo que están más en el día a día".
En tanto, en la mesa de dinero de una entidad extranjero confirman que es la banca pública la que está detrás de estas ventas, y agregan al Provincia como otra de las "manos amigas" que, con pocas operaciones, ayuda a que el precio baje.
Consultado al respecto en la última conferencia de prensa, el propio Guido Sandleris descartó que el Nación opere por cuenta del BCRA, aunque no desmintió que sea el que hace las ventas en el momento previo al cierre.
"Con respecto al Nación, un punto importante a recordar es que es el banco más grande del país. Tiene un flujo propio de sus clientes, que no necesariamente es el Tesoro", afirmó el titular del Central. Y concluyó: "No ha sido el BCRA quien ha intervenido a través del Nación".
De ese modo, Sandleris buscó bajarle el tono a las ventas de la banca pública y, como es de esperar por su cargo en la autoriad monetaria, sólo confirmó que ellos no están detrás de esas intervenciones.
"Sandleris no va a reconocerlo. Nunca dan esa información desde el BCRA y menos lo van a hacer ahora que están tratando de no mostrar sus cartas", comenta un operador de la City porteña.
Sin mostrar las cartas
El titular del organismo monetario reconoció que, ahora que pueden actuar en el mercado, no quieren develar la estrategia que van a usar.
"No necesariamente la vamos a anunciar (la intervención). No vamos a estar mostrando nuestras cartas con anticipación al mercado. El Banco Central va a estar interviniendo cuando lo considere necesario", afirmó Sandleris cuando se le pidieron detalles.
"Tenemos una variedad de herramientas para hacerlo", agregó.
En uno de sus últimos informes semanales, desde Consultatio Investment señalaron el buen recibimiento del mercado al nuevo esquema cambiario, con mayor discrecionalidad de parte del BCRA para actuar.
"Es importante destacar que bastó solo con el anuncio: el BCRA no necesitó intervenir en el mercado spot porque el mercado parece creer que su poder de fuego alcanza", señalan José Echagüe, Francisco Mattig y Federico Bruno en el informe.
"Si bien trascendió que en ciertos momentos de esta semana el Central intervino en el mercado de futuros, la realidad es que no fue algo significativo", agregaron los analistas de Consultatio Investment.
Según explica Svirsky, el BCRA se viene mostrando activo en el mercado de futuros y hay días en que a media rueda vende 5.000 contratos en varios plazos. "En el mercado en spot no se lo ve. Tiró la carta en la mesa de que podía intervenir, pero no se lo ve", acota.
En la conferencia de prensa, Sandleris dejó trascender que están interviniendo en el mercado de futuros, aunque prefirió no dar demasiados detalles. "Futuros es una de las herramientas que el Banco Central utiliza cuando ve que las condiciones son disruptivas", explicó.
Con todas esas herramientas, pero fundamentalmente con las expectativas de que tiene poder de fuego para intervenir, el dólar ya acumula un par de semanas de estabilidad. Para Vicien, de Balanz, "es bueno que la divisa cierre sin cambios por unos cuantos días, como para que salga de primera plana", una pax cambiaria que repercutió en la inflación, que anotó un alza del 3,4% en abril.
Desde Consultatio Investment advierten que el hecho de que el mercado confíe por el momento en el nuevo esquema cambiario, no quiere decir que el tipo de cambio vaya a quedar "planchado" hasta agosto.
"Si bien es cierto que lo sucedido en las primeras dos semanas nos llevan a ser más optimistas, la realidad es que todavía vemos una serie de riesgos en el horizonte que nos llevan a mantenernos cautos en el posicionamiento de las carteras recomendadas", aseguran.
Por lo pronto, el Central está jugando otro partido y sus autoridades se encargaron de dejar en claro que no van a mostrar sus cartas.
"No vamos a preanunciar exactamente cuál es nuestra estrategia de intervención", insistió Sandleris, para justificar que ni siquiera al cierre del mercado van a informar su intervención de ese día, como sí lo hacían hasta el viernes previo a que el FMI le desate las manos.
En la City creen que el Central de una vez por todas le encontró la vuelta a una plaza con poco volumen, y que hasta hace un par de semanas parecía no poder controlar.
Es cierto que el hecho de poder intervenir cambió las expectativas, pero las ventas sobre el cierre que hacen los bancos públicos y le nueva estrategia de no mostrar las cartas hacen que el mercado piense dos veces antes de salir a testear a la mesa del BCRA.