Su perro muerto, esoterismo y la "misión" de Dios: los secretos de Javier Milei
Javier Milei, precandidato a presidente por La Libertad Avanza (LLA), ya tiene su biografía en las librerías realizada por el periodista Juan Luis González, "El loco" revela algunos de los secretos mejores guardados de Milei, entre los que están sus charlas con su perro muerto, su devoción por el esoterismo y hasta una "misión encomendada por Dios" que definió sus aspiraciones presidenciales.
La idea de González era hacer una "radiografía de la nueva derecha argentina", pero los "secretos místicos de Milei" hicieron que el libro cambiara totalmente su rumbo. "Con el correr de los meses, de las entrevistas, de los encuentros off the record, de seguir facturas, sellos y papeleríos, el trabajo pasó de ser uno de campo con ribetes casi académicos a un thriller tragicómico, a medio camino entre los policiales negros de Raymond Chandler y La conjura de los necios de John Kennedy Toole", escribió el periodista en el prólogo.
¿Qué se puede encontrar entre las tantas historias que tiene Milei? No faltan anécdotas con sus perros, aunque un poco más exóticas: hay clones de sus mascotas y hasta conversaciones con su "perro hijo" Conan. También hay una misión que le encargó Dios, "el número 1", para ser presidente. Pero no solo habla con Dios: también tiene conversaciones con seres del más allá.
Milei y la "venta de candidaturas"
Fue el empresario Juan Carlos Blumberg quien dijo que La Libertad Avanza "hizo de la política un negocio" y ocasionó la furia del precandidato a presidente, quien negó que hubiera lugares pagos en sus listas para las PASO. Sin embargo, los rumores también vienen de otro lado.
"La investigación se topó con la trama prohibida de un movimiento que vende sus cargos, que entabló relaciones con barrabravas involucrados en casos de asesinatos, que plagó sus filas con miembros de larga data dentro del Estado y con condenas por corrupción, que dejó entrar a neonazis y a apologistas de la última dictadura", se lee en el prólogo de El loco.
González denunció que Milei "se dejó financiar por gobiernos provinciales, recibió ayudas técnicas, logísticas y monetarias del peronismo que dice combatir, amenazó a todos los que quisieron abrir la boca, como le pasó a una sus propias legisladoras que tuvo que vivir medio año con custodia policial, y que, montados sobre la ilusión de una 'nueva política' que esperanzó a jóvenes que habían perdido las esperanzas, oculta la manera más vieja de hacer plata y negocios de Argentina. Y que, además, comenzó cuando a una de las personas más adineradas del país se le ocurrió crear y financiar, para cuidar sus propios intereses, a un fenómeno mediático que luego se llamó Milei".
Conan, el amor de Milei
González recordó un programa en el que, en medio de la entrevista, la producción sin aviso una foto de Conan, el mastín inglés fallecido de Milei, y el libertario no pudo sacar los ojos de la pantalla. Estaba hipnotizado. Conan fue, según él, su "verdadero y más grande amor", fue quien lo acompañó en sus peores momentos y quien ahora protege a Dios.
El perro murió en 2017, después de sufrir por un cáncer de columna que lo tumbó en sus últimos días. Pero si Milei lo había salvado de un incendio, hasta prescindiendo de su propia vida, también lo debía acompañar allí, en su lecho de muerte. Y por eso contrató un parapsicólogo y una telépata que leían la mente del can y lo "comunicaban" con su dueño. Su muerte lo cambió por completo, y ni los clones del animal que mandó a hacer en Estados Unidos lograron reemplazarlo.
"Karina, su hermana, indispensable para él como Conan, intentó ayudarlo. Estudió para convertirse en medium, y empezó a ser ella misma quien comunicaba al recién fallecido Conan con su dueño, una actividad que al día de hoy es central en la vida de la menor de los Milei, que dice poder hablar con animales vivos y muertos y que en base a eso toma decisiones importantes", contó González.
"Pero eso no fue suficiente. A los que querían escucharlo, Milei les comenzó a contar historias cada vez más llamativas: que Conan en verdad no había muerto -'fue su desaparición física'-, sino que había ido a sentarse al lado del 'número 1' para protegerlo, y que gracias a eso había comenzado a tener charlas con el mismísimo Dios. 'Yo vi tres veces la resurrección de Cristo, pero no lo puedo contar. Dirían que estoy loco', le dijo a un amigo de aquellos años, en un chat que esta persona todavía guarda", relató el periodista en El loco.
Según el libro, Dios le reveló a Milei que charla mucho con él porque tenía una "misión" para el economista. "Tenía que meterse en política. Y le dijo algo más: que no tenía que parar hasta llegar a ser Presidente", contó.
"¿Qué pasa si en una Argentina corroída por más de una década de crisis económica y política, golpeada por una pandemia que dejó 130 mil muertos, agotada por años de inflación y de inseguridad, enojada por vivir siempre con la soga al cuello, alguien empieza a decir que la culpa de todo es de quienes la manejan y la manejaron? ¿Qué pasa si ese discurso incendiario, que está quemando también otras latitudes, prende?¿Qué pasa si en un país inestable aparece un líder inestable? La respuesta los sorprenderá", concluye el prólogo.