Empieza a circular el nuevo billete de $2.000: cómo es y a cuántos dólares equivale
Los billetes de $2.000 comenzarán a circular a partir de hoy. La semana pasada, ya se estuvo realizando la prueba en cajeros que cuentan con los nuevos billetes.
La confirmación de la salida del billete de $2.000 fue anunciada en febrero de este año por el Banco Central (BCRA) y estaba previsto para el segundo semestre de este año. Por lo cual, si bien se adelantó unos unas semanas, está dentro del plazo estipulado.
Comienza a circular el billete de $2.000
A principios de mayo, la Casa de Moneda Argentina (CMA) había informado que "pudo agilizar los procesos productivos y adelantar tiempos de entrega de los productos contratados", según se informó a comienzos de este mes. Y aseguraron que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) ya contaba con el nuevo billete.
Los billetes de $2.000 ya están distribuidos a los bancos y será el nuevo billete de mayor valor en la Argentina, reemplazando al histórico de $1.000 que cuenta con la figura del hornero.
El nuevo papel fue diseñado en colaboración con Casa de Moneda y conmemora el desarrollo de la ciencia y de la medicina en la Argentina, por lo que tiene como protagonistas al Instituto Nacional de Microbiología Dr. Carlos Malbrán, en el reverso, y a los doctores Cecilia Grierson y Ramón Carrillo, precursores en el desarrollo de la medicina en nuestro país, en el anverso.
Este billete llega a la calle en el marco de un contexto fuertemente inflacionario, por lo que muchas voces critican el lanzamiento y opinan que debería emitirse uno de mayor valor, teniendo en cuenta que el anuncio se realizó en febrero, con una inflación del 6,6%, muy inferior al 8,4% que se registró en abril. Así, señalan que el poder adquisitivo del papel de $2.000 es muy bajo, teniendo en cuneta la proyección de inflación para todo el año ya alcanzan el 140%.
Aún no se sabe cuántos billetes de $2.000 saldrán a la calle en la primera "tirada", pero, por el momento, según datos del BCRA al 2 de febrero de este año, hay en circulación 489,2 millones de papeles de $10; 407,3 de $20; los de $50 son 191,4 millones, los de $100 suman 2,055,8 millones en total, los de $500 son 487,7 millones y los de $1.000, 1.346,7 millones. En total, hay 7.993 millones de billetes en la calle.
Aunque el dato oficial es secreto bancario por el momento, por lo que no se puede saber exactamente cuántos habrá en la calle este año, la expectativa en el mercado es "que debería haber para julio entre 200 millones y 300 millones de papeles de $2.000 en una primera etapa y que, hacia fin de año, esa cifra aumente", según una fuente. Esto, teniendo en cuenta que se emiten algo así como 200 millones mensuales de billetes de alta denominación.
La presión de la inflación exige billetes de mayor denominación
Analistas de La City financiera justifican esta aseveración por el continuo aumento del costo de vida. Para tener una dimensión de la tragedia monetaria que vive la Argentina basta con señalar que si el billete de $2.000 estuviera en manos de los tenedores de pesos en el día de hoy, contarían en su haber con u$s4,55 según el tipo de cambio paralelo. En el mes de febrero, $2.000 equivalían u$s5,29. En los países vecinos, el papel moneda de mayor valor equivale, en promedio, a u$s30.
Por otra parte, el público aún desconoce la cantidad de billetes que circularán en el mes previo a las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) de agosto, ni que imprenta llevará adelante el mandato de la Casa de la Moneda, teniendo en cuenta que ya se utilizan los servicios de varias empresas en tres continentes distintos que no dan a basto para imprimir "los horneros" de $1.000 que en la actualidad, equivalen a u$s2,27 por unidad según "los arbolitos" que vocean cotizaciones de la calle Florida.
Asesores económicos de la administración de Alberto Fernández señalaron que "...de junio a octubre no serán muchos los billetes de $2.000 que se verán en la calle y hay que olvidarse hasta noviembre, después de las elecciones, para pensar en emitir un billete de $5.000. Uno de $10.000 y otro de $20.000 es una quimera para el Gobierno".
Las razones para no avanzar con una medida que sería completamente lógica dado el contexto inflacionario actual, así como de cuidado del balance del Banco Central (BCRA), su titular, Miguel Pesce, no deja de señalar que el año pasado hubo un déficit superior a los u$s20 millones, justificados en los gastos para imprimir billetes por varias ciudades del mundo y los gastos de logística que implica importarlos, tiene una explicación política y una especulación electoral.