Massa, con menos espacio de poder frente a una Cristina Kirchner que tendrá el control de las "cajas" del Estado
Sergio Massa asumió el control que siempre tuvo el ministerio de Economía. El que alguna vez manejó los hilos de las entonces secretarías de Agricultura, Producción, Industria y Comercio. De todos modos, Cristina seguirá conservando los espacios desde los que se recauda y distribuye dinero: ANSES, AFIP, PAMI y Energía.
Se entiende que la Economía necesita de un diseño integral. Lo lógico es que quien maneja la cartera tenga poder de decisión sobre todas las áreas que la componen. De no ser así dificil es pretender un resultado coherente y positivo. Frente a una fragmentación tan importante como la de la coalición de Gobierno, los resultados están a la vista.
Las alianzas electorales hicieron durante años que la política se repartiera los cargos premiando a unos y otros, y elevando las categorías de Secretarías a Ministerios con presupuestos propios que lo único que lograron fue dificultar la coordinación de la gestión.
Si bien la política económica es el corazón del motor del país, las cajas más importantes se convierten en la obsesión de muchos que llegan a manejar los hilos de las definiciones de la Argentina.
Los elegidos de Cristina a cargo de la AFIP, la ANSES, PAMI y Energía
En nuestro país, la AFIP, la ANSES, la Secretaría de Energía y el Banco Central son los lugares por donde es obvio, pasan los billetes que resultan de la política económica que se decide en el ministerio de Hacienda.
Será por eso tal vez, que en la foto que la vicepresidenta le regaló al flamante integrante del Gabinete Nacional, a diferencia de como ocurre con el resto de las visitas que se ubican en los laterales de la mesa que encabeza Cristina en su despacho de Presidenta de la Cámara alta, en este caso los protagonistas se ubicaron en ambas cabeceras.
Sergio Massa en iguales condiciones que la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. En la otra punta. Como un gesto vale más que mil palabras y Cristina entiende mucho de gestos, ambos expresaron repartirse la imagen con la misma centralidad. ¿Solo la imagen? Tal vez, también el poder. ¿Y el Presidente? Bien, gracias. Una hora antes se había sacado fotos con quienes al menos fueron "degradadas" respecto del lugar que ocupaban en el Gabinete: Silvina Batakis, que pasó de ser Ministra de Economía a titular del Banco Nación y Mercedes Marcó del Pont, quien pasó de la AFIP a la Secretaría de Asuntos Estratégicos sin el manejo ahora de la relación con los organismos internacionales de crédito. ¿Massa en foto de ganadores y Alberto con los que no? Son imágenes. Lectura a gusto del consumidor.
Ahora, volviendo a la foto ganadora. Cristina permitió la imagen que esperaban los mercados. La que nunca le ofreció a Batakis. La que aspira logre transmitir esa confianza que el mundo financiero necesita para encontrar la calma cambiaria. De todos modos, en esa foto también está claro que sigue siendo la vicepresidenta quien a través de sus elegidos maneja las cajas de ANSES, desde donde salen todas las asignaciones y jubilaciones del país; del PAMI ente autárquico pero con reporte al ministerio de Salud; y el área de Energía, pilar fundamental para conseguir los dólares que se necesitan.
Medidas iniciales: las claves del éxito de Massa
El Banco Central cuenta con un hombre para cada una de las esquinas de la mesa, Miguel Pesce con el aval de varios sectores dentro del frente de Gobierno, quien resiste aunque en 45 días se vencen los plazos para los cargos dentro del directorio, y a partir de ahora Lisandro Cleri, quien se venía desempeñando como Subdirector de Operaciones del Fondo de Garantía y sustentabilidad de la ANSES, propuesto por Massa para ese lugar.
Históricamente en los distintos gobiernos, Banco Central y Ministerio de Economía suelen entrar en una fricción compleja que sería altamente peligrosa si se diera en este momento de la Argentina.
Massa no es tan súper como parece, aunque es más súper que lo que era Guzmán que se fue acorralado por las balas que llegaban a diario desde el territorio enemigo. La efectividad de las medidas iniciales serán la clave de su éxito. La estabilidad que pueda lograr en el mercado financiero para atraer reservas que eliminen o al menos escondan el fantasma de una devaluación brusca podría ser su paso ahora a un año electoral que le permita, al menos posicionarse.
Cristina sigue manejando las áreas en las que hay plata. Fresca. Sonante. Tampoco puede sola. Sabe que con Massa juega su bala de plata. Justamente aquel que sigue siendo la sombra de sus principales dudas. Aquel que le frenó sus planes de reelección indefinida, pero que le sumó lo suyo en el 2019 para volver al poder. El hombre que a pesar de haber sido el destinatario de sus peores críticas hoy representa al único que puede llevarla bajo un paraguas hacia el final de un período de gobierno que no imaginó ni en sus peores pesadillas. Las mismas que tienen como protagonista a un hombre al que llevó a la Presidencia y hoy, no sale ni en la foto.