Tensión en el mercado: Gobierno confirma el "impuestazo" a las viviendas ociosas
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La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, subrayó este jueves que las viviendas ociosas destinadas "como ahorro o especulación inmobiliaria" son de los factores que influyen en los precios de los alquileres, y anticipó que el Gobierno espera "tener medidas pronto" frente a la problemática. La vocera de Alberto Fernández dijo esto en referencia el polémico impuesto a la vivienda ociosa, que impulsan sectores del oficialismo y que genera alarma entre los inmobiliarios.
"Está claro que la Ley de Alquileres, así como está, no cumplió con la función esperada ni por los inquilinos ni por los propietarios y hay que mejorarla", aseveró Cerruti en su habitual conferencia de los jueves en Casa de Gobierno.
La problemática de los precios de la vivienda es tal que, según Cerruti, "hay familias en las cuales el pago del alquiler implica casi el 36% al 40% de sus salarios".
"En la ciudad de Buenos Aires sabemos que cada vez hay más inquilinos que propietarios, pese a que no ha subido en cantidad de habitantes", recordó la funcionaria.
Se viene el impuesto a la vivienda ociosa
Consultada por la posible aplicación de un impuesto a la vivienda ociosa, tributo que se comenzó a aplicar en otros países y ciudades para desalentarlas, Cerruti reconoció las unidades sin habitar representan uno de los factores que inciden en los precios.
"Hay mucha vivienda ociosa que se compró como una medida de ahorro o de especulación inmobiliaria, y que no está puesta en el mercado de alquileres; y por lo tanto eso también, junto a la inflación y la mayor cantidad de inquilinos, hace que el precio de los alquileres empiece a ser prohibitivo para muchas familias y sobre todo para los jóvenes", remarcó la portavoz presidencial.
Cerruti recordó que la problemática de los alquileres comenzó a tratarse en una mesa de trabajo que se inició ayer con la participación del secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, y representantes de los inquilinos, inmobiliarias, desarrolladores urbanos, propietarios y organizaciones de la sociedad civil.
"Ayer fue la primera reunión y van a haber más. Esperamos tener medidas pronto", anticipó la funcionaria.
El Gobierno busca impulsar una solución a las dificultades que encuentran los inquilinos a partir de la implementación de la Ley de Alquileres vigente y el incremento anual de los montos de los contratos, y que generó descontento también en los propietarios, al punto de que se asegura en el sector que la normativa contribuyó a la retracción de la cantidad de unidades en oferta del mercado.
En la primera reunión de ayer, Feletti les pidió todas las organizaciones y asociaciones presentes que envíen a la brevedad sus propuestas, las cuales serán procesadas y circuladas entre todos los integrantes de la mesa, para luego convocar a otra reunión.
Los participantes del encuentro coincidieron en que hubo coincidencias en la importancia de generar las condiciones y los mecanismos necesarios para producir una ampliación de la oferta de unidades habitacionales destinadas al alquiler, especialmente en lo relativo a las viviendas ya existentes y más allá de las nuevas construcciones, informó Comercio Interior.
Inquilinos piden la aplicación del impuesto
El pedido concreto del nuevo tributo surgió de Inquilinos Agrupados, que exigió la aplicación de un impuesto a la vivienda vacía, particularmente para quienes tengan más de una propiedad. Además, solicitaron la creación de un programa de alquiler social.
En ese sentido, se propuso realizar análisis de la cantidad de inmuebles que tenga cada propietario y estudiar las razones por las cuales no les da uso. Una vez realizada esa evaluación, se determinaría si tiene que pagar cargas extras por esas propiedades o terrenos ociosos o no.
Bennazar dijo que "otra de las cuestiones que se analiza es la posibilidad de lanzar un blanqueo de las unidades usadas y también se prevé la posibilidad de que se firmen contratos de alquiler por un año en el caso de unidades nuevas, lo que soluciona en un principio la variable de incertidumbre para el propietario". De esta manera, se bajaría el plazo mínimo que fijó la última ley, que es de tres años.
Asimismo otro de los objetivos del Gobierno es construir casas sin que el sistema financiero sea el eje para resolver la cuestión de la adjudicación de la vivienda, sino que ahora sea el Estado el que lo haga, con programas como Casa Propia.
Alquileres: inmobiliarias se reunieron con Feletti
El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Alejandro Bennazar, aseguró que en la reunión con el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, de la que participaron inquilinos, propietarios e inmobiliarias se llegó a varios puntos en común, entre los que se destaca el de "intentar aumentar la oferta, que tanto nos preocupa a inquilinos como a inmobiliarias".
Bennazar señaló en declaraciones radiales que en lo que a ellos respecta, una mayor oferta de inmuebles en alquiler "nos da más fuente laboral".
Asimismo, consideró que "lo anterior podía gustar o no pero funcionaba", refiriéndose a la Ley de Alquileres vigente desde julio de 2020. En ese sentido recordó que se trataba de "términos de contrato de dos años, índice de actualización alternativo aplicable cada seis meses" ya que "no se podía actualizar alquileres o indexar", entonces "se hacía una previsión de 15 + 15, y eso daba un seguimiento al salario".
Además resaltó que a los desarrolladores "la ley también los afectó porque los inversores para futuras ventas locativas ya no están". En tanto que agregó que "si vos basas toda la solución de los inquilinos en la argentina solamente en los privados tenés que incentivarlos".
En referencia a la posibilidad concreta de impulsar un impuesto a la vivienda ociosa, Bennazar indicó que "lo que pedimos ayer fue segmentación, estadísticas y ver la problemática de cada situación de vivienda", apuntando a detectar la circunstancia particular de cada caso para generar medidas en consecuencia.