Congelan precios de telefonía, Internet y cable hasta fin de año: Gobierno los declaró servicios esenciales
El Gobierno nacional decidió declarar a la telefonía celular y fija, a los servicios de Internet y a la TV paga como servicios públicos esenciales y se congelan los precios hasta el 31 de diciembre del 2020.
Así fue comunicado desde la Casa Rosada y por el propio presidente Alberto Fernández mediante su cuenta de Twittter:
También hemos dispuesto congelar hasta el 31 de diciembre las tarifas telefónicas, de internet y de televisión paga. Ante las restricciones que la pandemia nos impone, nadie deberá resignar parte de sus ingresos en afrontar aumentos en los precios de estos servicios. — Alberto Fernández (@alferdez) August 21, 2020
La decisión fue adoptada mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), según lo anunció oficialmente el Poder Ejecutivo
"Recuperación" de herramientas regulatorias
Desde el Gobierno destacaron que, de ahora en más, no podrá haber aumento de tarifas en el futuro sin previa autorización del Estado. Esta aclaración llega luego de que a principios de agosto las tres compañías de telefonía móvil anunciaran subas a sus clientes. Estos aumentos iban a estar vigentes desde el 31 de agosto y ahora todo indica que fueron frustrado por la resolución oficial.
"De esta manera estamos recuperando herramientas regulatorias que el gobierno anterior quitó al Estado. El derecho de los usuarios y consumidores es un derecho constitucionalmente reconocido. En lo sucesivo, no podrá haber ningún aumento sin la previa aprobación del Estado", subrayó Fernández.
Y agregó: "La educación, el acceso al conocimiento, a la cultura y a la comunicación son derechos básicos que debemos preservar. Por eso hemos ordenado que de aquí en adelante haya planes inclusivos de prestación básica, universal y obligatoria para quienes menos tienen".
Los aumentos de celular que se frenaron
Las tres mayores operadoras de telefonía móvil habían anunciado a inicios de este mes a sus clientes que los precios de sus planes aumentarían entre el 10% y el 11% en promedio a partir del 31 de agosto, fecha en que iba a vencer el congelamiento acordado con el Gobierno Nacional en el marco de la emergencia sanitaria por la pandemia.
En ese momento, las empresas justificaron la "adecuación" de los precios al consumidor por el aumento de los costos de mantenimiento de infraestructura y servicios de telecomunicaciones y la devaluación del peso en una industria que tiene un alto porcentaje de sus insumos dolarizados.
En el caso de Movistar, había anunciado un aumento del 10% en el "Plan pospago más representativo", mientras que para los prepago indicaron que en octubre "finalizará la bonificación" que habían implementado en noviembre pasado y que a pedido del gobierno extendieron en marzo.
Para la banda ancha fija, según indicó la empresa, el "aumento promedio" serían del 9% y señaló que "no alcanzará a casi la mitad de la base de clientes".
También en septiembre finalizaría la bonificación de $104 otorgada para el bono de telefonía fija.
Además, habían decidido mantener sin modificaciones los planes inclusivos y planes reducidos, así como la bonificación por tres meses de la actualización en las cuentas para pymes con servicio de banda ancha cuyo tráfico disminuyó un 70% o más.
Por su parte Claro, había indicado que los planes más económicos no tendrían aumentos, y que el plan reducido se mantendría en $250 y el inclusivo en $280.
En este caso también el aumento promedio iba a ser del 10% y para los planes prepagos se activarán los aumentos que fueron suspendidos en marzo pasado.
Personal, en tanto, había previsto un aumento promedio del 11% en los servicios móviles (pospago y prepagos) y del 11% en todos sus servicios móviles (prepago, pospago), fijos, TV Paga e Internet fija.
Los precios de los servicios "Reducidos" e "Inclusivos" pensaban mantienen sin modificaciones, según esta compañía.