Espert, polémico: por qué califica a la Argentina como un país "chanta y atorrante"
El economista José Luis Espert fue muy crítico al calificar a la Argentina como "un país chanta, atorrante" ya que "cuando pide prestado, llora y llora para que le presten y está dispuesto a ceder soberanía emitiendo deuda bajo legislación extranjera -que, si hay algún problema, se dirime afuera".
"O sea, cuando necesitamos la plata, rogamos, vamos al Fondo, etcétera, pero cuando tenemos que pagar el Fondo es el malo; el acreedor es el malo y así es cómo nos ven afuera: como poco serios. Hemos caído de nuevo en lo mismo: necesitamos al Fondo, ya no despotricamos contra el Fondo. Ya el Fondo no es el malo de la película. Veremos", indicó el excandidato a presidente.
Esto lo dijo en una reciente entrevista en "Comunidad de Negocios", por LN+, en la que también se refirió al reciente acuerdo con los bonistas: "Es una muy buena noticia que el Gobierno haya enmendado el error que cometió en abril al poner en default la deuda externa. No creo que esto le vaya a llevar financiamiento al Gobierno porque es muy diferente esta reestructuración a otras del pasado como fue el plan Brady en el `93 o la de Néstor Kirchner, en 2005. Fueron con situaciones fiscales muy sólidas, pero hoy estamos reestructurando la deuda con 10 puntos de déficit fiscal. El gobierno no da ninguna muestra de querer contener el gasto, por lo tanto, nadie se va a volver loco en el mundo para prestarle a la Argentina".
Sobre esta reprogramación de la deuda, afirmó que es solo "patear el problema hacia adelante. Por lo tanto, si ese problema que pateaste hacia adelante termina siendo efectivamente un problema va a depender de qué política fiscal seguís hasta que pateaste los vencimientos o durante ese tiempo. Yo te diría que veo que el gobierno pateó hacia adelante y al día siguiente siguió con los anuncios de aumento de gasto público. Así que me parece que esto de patear los problemas hacia adelante si sigue así el gobierno va a terminar siendo un problema para el nuevo gobierno".
"Hay que comprar todos los dólares que se pueda", advierte un conocido economista
Sin default, es posible negociar con el FMI
En cuanto a sus expectativa respecto a la negociación con el FMI, indicó que "el fondo no podía sentarse a hablar de un programa con la Argentina si entraba en default. Ahora sí con Argentina fuera del default se puede sentar a conversar un programa".
Y agregó: "Yo no tengo ninguna capacidad hoy para decir cómo va a terminar la negociación con el Fondo. Sí te diría que cuanta deuda le deje patear para adelante va a depender del programa. Cuanto más quieras patear la deuda hacia adelante más te va a pedir ese programa, porque no hay que olvidarse que el Fondo Monetario es el representante de los intereses de los acreedores de todo el mundo porque los dueños del Fondo son los países. Así que el FMI necesita un programa que balancee lo que la argentina está dispuesta a hacer con lo que Argentina quiere patear hacia adelante de deuda. Esto es lo que pondría blanco sobre negro, pero no cómo termina la negociación".
Procrear 2020: este tiene que ser tu sueldo para sacar uno de los nuevos créditos
Sobre la crisis del país, dijo que "en el caso de la Argentina yo no entiendo cómo no conectamos con el dato de que para fin de año un 63% de los chicos van a ser pobres, según Unicef, cuando hace cincuenta años teníamos 0%. Cómo no nos damos cuenta de que algo estaremos haciendo mal. La Argentina es como una persona que no se hace cargo de lo que pasa. ¿Hasta cuándo vamos a seguir negando que hay algo que estamos haciendo mal? ¿Hasta dónde queremos llegar de pobreza, de inseguridad, de droga, de propagación de villas?".
Y advirtió: "Yo creo que tenemos que cambiar en serio antes de que nos arrepintamos y terminemos armando la villa miseria más grande del mundo en un país riquísimo. Puede ser eso, pero yo te diría hagamos otra cosa: conversemos con el mundo, tengamos un estado más chico, achiquemos el estado para bajarle los impuestos a la gente que no da más. Tengamos otras leyes laborales. Si tenemos 6 millones de trabajadores trabajando en negro ¿cómo no va a haber que cambiar las leyes laborales?".
El teletrabajo y el Banco Nación
Una aerolínea ofreció volar a ninguna parte y vendió todos los pasajes
El economista coincidió con las declaraciones de Mario Pergolini sobre el teletrabajo: "Estoy de acuerdo 101%. Es siempre lo mismo. ¿Hasta cuándo? Acá ya hay perversión y premeditación de la clase política profesional que nos gobierna hace tanto tiempo, que van saltando de partido en partido para no laburar y vivir de la gente que labura y paga impuestos. Es una cosa insólita", manifestó.
"Aparece el teletrabajo como un atajo debido a la falta de trabajo en cuarentena y ya lo dinamitan. Es de una perversión y raya en lo que dice Pergolini", señaló.
Además, advirtió: "Ahora yo, como persona que siempre estuvo preocupada por la decadencia argentina, digo se puede cortar esta decadencia si hacemos algo distinto. La buena noticia es que lo que tenemos que hacer lo hace todo el mundo al que le va bien y son cosas elementales. Me parece elemental que la gente pague por lo que compra un precio razonable no el disparate que acá paga todo. Tenés que tener empresarios que compitan en el mundo no que cacen en el gallinero como acá. Y las cosas además tienen que tener pocos impuestos adentro. Ahora eso implica ponerte a conversar con el mundo, abrir la economía y reducir el tamaño del Estado para que la gente pague menos impuestos".
E insistió: "Y, con las leyes laborales. Cómo no vas a cambiar las leyes si tenés 6 millones de trabajadores en negro ¿A quién le vas a echar la culpa de esos trabajadores en negro? ¿A la peluquera, al carnicero, al industrial? No, son las leyes laborales. Lo increíble es que nosotros tenemos una realidad que nos trompea: la mitad de la población argentina es pobre, un 63% de los chicos van a ser pobres a fin de año ¿Qué Argentina queremos? ¿Vos sabés lo que es tener 8 millones de chicos pobres? ¿Con dificultades para adquirir conocimientos porque tienen mala alimentación?".
Tras asegurar que Martín Guzmán no reúne las condiciones para ser super ministro, señaló que "jamás sería el presidente de un Banco Central que lo único que hace es apretar el on para imprimir billetes y por ahora los está encapsulando con un bono de deuda que son las Leliqs, que son una bomba de tiempo que le explotó a Macri y en algún momento le va a explotar al gobierno de Fernández o a Miguel Pesce que es el presidente del Central. Así que no sería presidente de un Banco Central que solo pone play para imprimir billetes", concluyó.