Empezó como un parche, ahora es el corazón del negocio: Uber, Beat y Cabify están jugados al delivery
Lo que comenzó como una estrategia de reinvención para enfrentar el parate que provocó la cuarentena por el coronavirus terminará siendo un negocio más para las aplicaciones de movilidad.
Los servicios de envíos, el costado que encontraron Uber, Cabify y Beat para seguir activos desde que se inició el aislamiento obligatorio, serán uno de los negocios que se consoliden a medida que se vaya afianzando la "nueva normalidad".
Uber activó Uber Flash. Cabify habilitó Envíos, el mismo nombre que eligió Beat que, además, hace unas semanas incorporó el servicio de motos a su propuesta. Con más o menos números, lo que dejaron estos primeros 45 días de inicio de estas prestaciones es que serán alternativas que se mantendrán aun cuando haya mayor flexibilidad de la cuarentena, más personas que necesitarán trasladarse, y también más paquetes que deberán llegar a destino.
Beat, la más joven de las aplicaciones de movilidad, mostró números que son excepcionales en medio de un maremágnum de noticias donde la caída de la actividad es la regla. "En abril y hasta el 8 de mayo, que hicimos el corte, entregamos más de 25.000 paquetes", dijo a iProfesional Patricia Jebsen, gerente general de Beat Argentina.
Se trata de un primer número que no tiene comparación porque la app de origen griego comenzó a operar en noviembre pasado en el país, es decir, hace apenas seis meses. Pero que reveló también otros datos, tal vez mucho más interesantes que la cantidad de paquetes entregados.
"Lo que vimos con el servicio de Envíos es que los viajes son un 40% más largos que los normales que venían haciendo los pasajeros, y que rondan en promedio los 10 kilómetros, lo que nos mostró que la gente comenzó a usar el servicio para mandar cosas a personas que estaba más lejos. Porque nuestro servicio no se trata de la típica app que hace envíos en zona de cercanía, y entonces fue aprovechado por aquellos que están más alejados", agregó Jebsen.
Desde Cabify también se mostraron satisfechos con el resultado del servicio Envíos, también orientado a enviar y recibir objetos o productos, aunque no dieron precisiones sobre datos.
"Con este lanzamiento, como empresa de transporte, buscamos seguir siendo útiles para nuestros usuarios y para la sociedad en general, habilitando una solución para que puedan enviar aquello que sea necesario, además apoyar a los ingresos de los usuarios conductores, los que se han visto afectados a raíz de esta coyuntura", señalaron desde la empresa de origen español.
Mejor funcionamiento que en la región
Tanto en el caso de Beat como en el de Cabify, que opera en Rosario y Mendoza, además de Buenos Aires, coincidieron en que donde mejor funcionaron estos servicios fue en la Argentina, al compararlos con el comportamiento que experimentaron con las mismas prestaciones en otros países de la región en donde ambas tienen presencia.
¿Por qué un buen funcionamiento o un mejor comportamiento, tal como lo aseguraron dos de las tres empresas de movilidad, de los servicios de envíos en estas latitudes? Una primera respuesta es que Buenos Aires es grande y hay mucha gente, entendiendo a Buenos Aires como la Capital y la Provincia, aspecto que no suelen interpretar del mismo modo los funcionarios públicos. Y que su tamaño justifica la necesidad de contar con diversas opciones de transporte y traslados.
Jebsen, de Beat, detalló que muchos emprendedores, empresas que se volcaron de manera directa al comercio electrónico en alguna de sus formas, o personas de manera independiente que comenzaron a hacer cosas para generar dinero, fueron los clientes que ganó la compañía en este tiempo en que las actividades económicas quedaron restringidas. Situación que, por la descripción que hicieron las otras apps de movilidad en cuando a horarios y demandas del servicio, podría equipararse.
Las personas que se pusieron a hacer tortas para enviar a un determinado lugar que se celebraba un cumpleaños vía Zoom, laboratorios que debían continuar enviándoles muestras gratis a los médicos, voluntarios que les hacían compras a adultos y que debían hacerle llegar esos pedidos fueron algunos de los que se volcaron de manera decidida a usar los servicios para suplir diversas necesidades.
"La gente buscó el modo de generar afecto virtual, y entonces, como nadie podía acercarse al otro a darle un abrazo encontraron en estos servicios la manera de hacerle llegar su afecto virtual", agregó Jebsen.
Desde Uber explicaron que con Flash capitalizaron parte de los envíos que se generaban a través de las compras vía comercio electrónico que, de acuerdo a los datos de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) experimentaron en estos 60 días de cuarentena el crecimiento previsto para los próximos dos años.
El haber puesto en marcha estos servicios de traslado de paquetes que, en el caso de Beat se completó con Misión (destinado a los que, en el principio de la cuarentena, pertenecían a las actividades esenciales) permitió que se mantuvieran activos casi la misma cantidad de choferes de antes del inicio del aislamiento social preventivo y obligatorio, el pasado 20 de marzo.
A tal punto que, entre Envíos, Misión y Motos, los conductores ya completaron 2 millones de kilómetros, equivalentes a unas 50 vueltas al mundo en un mes aproximadamente. Cantidad que también se tradujo en ingresos extras por $45 millones, siempre teniendo en cuenta los tres servicios de manera conjunta.
¿Qué pasó con el costo de los servicios en este tiempo? Se mantuvieron en los mismos valores. En el caso de Beat se implementó una reducción de la comisión que pasó de un 20% un 15% desde que se pusieron en marcha las medidas sanitarias de restricción.
Cabify, en tanto, concretó acuerdos con bancos y tarjetas de crédito para ofrecerles descuentos a los usuarios. En alianza con el banco Itaú brinda una rebaja de 30% a quienes usen sus servicios con sus tarjetas, entre otras alianzas con socios estratégicos y comerciales con el que buscaron el mismo objetivo.
Beat, en tanto, sumó este jueves el servicio prepago para que las empresas puedan precomprar crédito en la plataforma y administrarlo a sus empleados. El servicio fue pensado especialmente para ayudar a que las empresas que deben asegurar el traslado a sus empleados durante el aislamiento social puedan hacerlo de una forma más eficiente, segura y económica.
Que Uber, Cabify y Beat hayan continuado gran parte de su actividad con estas opciones de envíos hizo que el trabajo a través de las apps haya sido fundamental para mantener ingresos.
"Antes del covid-19, Beat era la principal fuente de ingresos para el 75% de los conductores, ahora lo es para el 87% de los conductores", agregó Jebsen.
Cuidados contra el coronavirus
Y que para los conductores las apps de movilidad tuvieran esta relevancia como fuente de ingresos también motivó a que las empresas implementaran diversas medidas de cuidado para ellos y también para los pasajeros, cuando se trata de aquellos que cumplen actividades esenciales o autorizadas para realizar aún en medio del confinamiento existente.
"Se extremaron las medidas para evitar contagios en repartidores y usuarios, entregando a kits de protección a los conductores y colocando una mampara de acrílico para separar el espacio del pasajero y el conductor", detallaron desde Cabify.
Situación que se repitió en el caso de Uber donde, además de realizar recomendaciones sobre medidas de limpieza, desinfección y distanciamiento social, también ofrece reembolsos en la compra de mascarillas o tapabocas, gel antibacterial y/o toallas desinfectantes.
A esto se sumó que, antes de realizar viajes, los socios conductores deben verificar que están usando un tapaboca por medio de una selfie en la app de Uber. Y deben confirmar que están siguiendo las guías de salud y seguridad correspondientes, como limpieza de manos, sanitización de vehículos y medidas de distanciamiento social. "Además, tanto socios conductores como usuarios pueden cancelar el viaje si la contraparte no está utilizando un tapaboca y se les solicita que lo informen dentro de la aplicación", señalaron desde la empresa.
Medidas que, en todos los casos, se considera que llegaron para quedarse, tal como ocurrió con la costumbre del alcohol en gel en 2009 cuando se dio la gripe A (H1N1). Ya no sólo las relacionadas con la higiene en particular sino, y principalmente, con el distanciamiento social, con los traslados y el uso del transporte público.
"En principio el servicio de envíos se pensó como un producto coyuntural pensando en ofrecer algo que sea útil a la sociedad pero viendo el volumen y buena recepción que ha tenido, no descartamos continuar con este servicio", aseveraron desde Cabify.
"No hay dudas de que Envíos se va a mantener. Trajo distintos tipos de clientes, diferentes. Y el envío es hoy un servicio diferente que es muy valorado por clientes que lo usan justamente por eso", coincidió Jebsen.
Reinvención rápida para defender el negocio en medio de una pandemia no esperada y con consecuencias aún desconocidas. Y primer paso hacia una nueva normalidad, que ya experimenta la humanidad, y que obligará a nuevos comportamientos.
El rápido viraje que hicieron las apps de movilidad fue gracias al uso de tecnología como base la actividad y su disponibilidad en grandes ciudades encontró rápida valoración por parte de los usuarios que se apoyaron en ellas también para cumplir con las medidas sanitarias impuestas.