Dejó Villa Devoto y se mudó a Texas: hoy es accionista de una de las firmas de software más importantes del mundo
"Viajé rumbo a Chapel Hill, Carolina del Norte, para comenzar mis estudios en la universidad", cuenta Juan Pablo Giometti (prefiere presentarse como JP) a iProfesional. "Siempre fui muy curioso. De muy chico me la pasaba leyendo libros y revistas de tecnología, negocios y el área automatización industrial y productividad. Lo heredé de mi padre, fue él el que me inspiró a investigar y siempre estar aprendiendo".
A los 13 años, JP ya era SySop (operador del sistema) de un BBS de packet radio, y estaba en contacto con varias organizaciones académicas y de investigación de Estados Unidos. "Pasaba muchas horas aprendiendo sobre el futuro de las comunicaciones digitales y nuevas formas de colaborar y trabajar en línea", cuenta. "A los 15 años formé parte junto a un grupo de argentinos y americanos para el lanzamiento del primer microsatélite aficionado argentino, LUSAT. Estábamos en la vanguardia desde Argentina, conectados al mundo. Estados Unidos fue siempre un referente tecnológico para mí".
Siguió estudiando sistemas en la Escuela ORT Argentina y luego obtuvo una Licenciatura en Administración de Empresas, a la vez que trabajaba en el área de telecomunicaciones, informática y seguridad. "Empecé entonces a plantearme la idea de realizar una Maestría en Administración de Empresas en el exterior, lo cual implicaba un programa a duración de dos años, y así expandir mis horizontes como ejecutivo de negocios a nivel global", explica. "En función de mis objetivos Estados Unidos era el mejor país donde hacerlo, no solo por la currícula del programa, sino por la oferta alrededor del mismo en cuanto a ofertas laborales, por el acceso a industrias, el reconocimiento del título a nivel global, la proximidad con Argentina".
En ese momento JP aplicó en varias universidades y recibió ofertas de beca de varias, "lo que redujo significativamente el costo, ya que me ofrecieron dinero para estudiar", cuenta. "Decidí aceptar la oferta de la Escuela de Negocios Kenan-Flagler perteneciente a la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, debido a su foco en el área de emprendedorismo y al perfil colaborativo y de trabajo en equipo que fomentaba su programa".
A su vez, dice, "Carolina del Norte es un estado con gente muy amable y muy familiar". Allí desarrolló un MBA de UNC Chapel Hill.
Hoy es Director Ejecutivo de Estrategia Global y Desarrollo Corporativo en HCSS, una empresa estadounidense que desarrolla software de construcción y soluciones de aplicaciones móviles para las industrias pesada civil, de transporte y de servicios públicos. También ha estado a cargo del grupo de Investigación y Desarrollo global para la empresa de materiales geosintéticos Blackstone y lanzó la gestión inteligente de flotas y la telemática de Hyster-Yale, así como las tecnologías IoT / RFID de Motorola en proyectos de capital en todo el mundo.
A su vez, Giometti es Chairman y Board Member de NHEO Institute, una organización sin fines de lucros dedicada a educar e inspirar a los más jóvenes en los temas de innovación, diversidad e inclusión, productividad, seguridad, la cual ofrece cursos, eventos y programas de crecimiento, con un rol muy activo post COVID-19.
Los primeros pasos en el extranjero
"El primer año fue duro", cuenta Giometti. "El programa de estudios es muy exigente, sumado al ajuste cultural. Durante el verano, hice una pasantía con Pepsi en Nueva York, liderando el desarrollo de un sistema de logística para su embotelladora y su flota de reparto. Fue una gran experiencia dada la magnitud del proyecto, siendo una iniciativa estratégica para la compañía para digitalizar la cadena de suministro".
El segundo año hizo un intercambio académico con la Escuela de Negocios León Recanati, de la Universidad de Tel-Aviv en Israel, donde estudié el ecosistema emprendedor israelí, el área de tecnología e innovación, y el capital de riesgo.
Al volver a Estados Unidos a graduarme, "acepté una oferta laboral para sumarme a un grupo multinacional industrial, en su programa de desarrollo de líderes, lo cual me dio una base sólida en liderazgo, finanzas y desarrollo de nuevos negocios aplicado a muchas industrias", complementa.
El recorrido profesional
"Mi recorrido profesional fue muy dinámico", narra Giometti. "Previamente a mi rol actual con HCSS, fui reclutado por Blackstone. Fue una experiencia desafiante liderando un equipo global, con el objetivo de consolidar operaciones, crear valor mediante innovaciones tecnológicas, y posicionar a la empresa para su venta. Cumplido el objetivo de vender la empresa, me sumé a HCSS, una empresa líder en el sector de software utilizado en la gestión de proyectos de ingeniería y construcción, de la cual me convertí en socio accionista. En ese momento me mudé a Houston, Texas, donde luego conocí a mi mujer y nació mi hijo".
"En HCSS me dedico al área de estrategia e innovación. Exploramos constantemente nuevas tecnologías aplicadas a mejorar los procesos de construcción e ingeniería e imaginamos cómo será la fuerza laboral móvil del futuro", explica. "Nuestro software es utilizado en muchos proyectos de infraestructura, como ser aeropuertos, rutas, puentes, autopistas, proyectos de minería o del área energía también. Por ejemplo, el proyecto de transformación del Aeropuerto Internacional de LaGuardia en Nueva York, utilizó nuestro software de estimación de costos para varios segmentos al comienzo del proyecto. Estamos en pleno crecimiento, actualmente me encuentro trabajando en un plan de expansión global".
Desarrollarse en otro país
De acuerdo con JP Giometti, "trabajar en países como Estados Unidos implica muchas cosas positivas, "como los recursos financieros, un ecosistema muy fuerte que promueven nuevas iniciativas y un gran mercado con un marco legal predecible".
Como contrapartida, agrega, "los desafíos pasan por el alto nivel de competencia y demanda de excelencia en todas las áreas. Acá todos quieren triunfar, y se compite con gente y empresas de todo el mundo. Siempre hay que cumplir y hay que demostrar resultados. Así como se puede triunfar rápidamente, lo contrario puede ser aún más veloz, por lo cual las expectativas son altas".
Sin embargo, dice el emprendedor, "los argentinos tenemos muchas cosas positivas, que en países como Estados Unidos son muy valoradas. Somos sociables, creativos y tenemos iniciativa. A lo largo de toda mi carrera conocí varios argentinos exitosos y me gusta ayudar a que sean cada vez más".
"Extraño mi familia, los amigos y la espontaneidad de la gente", dice. "Tengo pensado viajar en septiembre. Con HCSS, siempre estoy buscando talentos, como programadores, startups o empresas tecnológicas que puedan ser alianzas estratégicas, o proveedores de servicio, Argentina tiene una gran fuerza laboral", plantea.
Para JP emigrar implica adaptarse, reinventarse, ceder, confiar y dar antes de recibir. "Para irme sacrifiqué la proximidad a mi familia, la comodidad de estar en una sociedad que conocía muy bien, pero entendí que para crecer debía hacer un cambio", expresa. "Pero gané en visión a largo plazo, perspectiva global y la posibilidad de maximizar mi potencial".