Vinos de Córdoba: qué tenés que saber sobre una provincia con historia y mucho futuro
El vino en Córdoba nace con los jesuitas, que en el siglo XVII plantaron las primeras cepas en las Estancias de Jesús María. Luego, hacia finales del siglo XIX, la inmigración friulana de Colonia Caroya las mejoró.
La industria tuvo su máximo esplendor en tamaño hacia finales de los 70 pero, debido a inclemencias climáticas y económicas de la zona y el país, se redujo a casi el 10%. Hacia finales de la década de los 90 en adelante comenzó un paulatino aumento a través de inversiones nacionales, instalando nuevas bodegas en los valles turísticos y nuevas regiones, con el objetivo bien claro en elaborar vinos de gran calidad.
Con variedad de climas, áridos, de sierras, otros más húmedos, cada valle con sus características hacen de Córdoba un lugar que genera curiosidad. Por ejemplo, en la zona de sierras la humedad y las lluvias son menores, pudiendo controlar el riego, sobre todo en invierno; los veranos, en tanto, son más lluviosos y hacen que el trabajo en el viñedo se diferencie según cada región.
Podemos dividir las regiones de Córdoba con viñedos activos en cinco:
- Valle de Calamuchita
- Valle de Traslasierra
- Valle de Punilla
- Sierras Chicas
- Región Norte.
Según datos del INV del 2020, encontramos: 13 bodegas inscriptas (3 en Colonia Caroya, 2 en el Norte, 1 en Suroeste, 4 en Calamuchita, 3 en Traslasierra). Además, cuenta con 13 elaboradores de vinos artesanales, 21 elaboradores de vino casero y 4 fábricas de espumoso.
En relación con los viñedos, se desarrollan 280 hectáreas en la provincia, con un promedio de superficie por viñedo de 2,1 hectáreas.
Las variedades más plantadas son las tintas (80%), luego las blancas (13%) y por último las rosadas (7%). De esas variedades la más cultivada es la Malbec, luego el Pinot Negro y tiene un lugar especial la Isabela, uva emblemática cordobesa, ya que solo en la provincia se encuentra este varietal, también llamada Frambua o, de manera coloquial, ¨uva chinche¨.
Como dato curioso, Córdoba es la segunda productora de jugo de uva del país luego de la zona Sur de Mendoza.
El vino y su cultura, producción e historia, forman parte de la importante oferta turística de la provincia. En relación con esto, se firmó un convenio con la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), en el cual la provincia de Córdoba es reconocida oficialmente como provincia vitivinícola argentina. Este organismo gestiona y coordina la implementación del Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2020 (PEVI) que tiene entre sus programas el Turismo del Vino.
Así, la Córdoba enoturística empieza a mostrar todo lo que tiene para dar.
Judith Barengo es sommelier WSET 2, docente en Escuela de Gastronomía Azafrán: Vitivinicultura para gastronómicos. Además, es locutora y forma parte del equipo de programa radial "Más Vinos que Nunca", en radio Continental Córdoba. También, es parte del equipo de Joint Group, empresa que organiza ferias de alimentos y bebidas en Córdoba.