Vinos y negocios: ¿por qué las bodegas facturan menos si ahora venden más?
A primera vista, la situación de la industria vitivinícola parecería ser positiva: según destacaron desde el INV, "los despachos de vino al mercado interno muestran datos sorprendentes".
Sucede que, comparado junio de este año con el de 2019, "encontramos un aumento de más del 25% y a nivel semestral el aumento es del 7%".
"Esta es una noticia que sorprende estando en pandemia es indudable que el sector viene mejorando su consumo, no solamente en el mercado interno sino también en el externo en el cual, durante el mismo semestre el crecimiento fue del 52%, con respecto a igual periodo del año anterior. Estos datos son más que interesantes para el sector", explicaron desde el INV.
Sin embargo, desde Bodegas de Argentina advierten que que si bien los volúmenes crecieron, "es más contundente lo que han caído los precios; por ende, la facturación total y el valor agregado también, que es lo que realmente cuenta a la hora de analizar la situación del sector que, sin dudas, no es buena".
Hot Sale 2020: 5 vinos de Bodegas Bianchi que te recomendamos comprar con hasta 45% de descuento
"Hasta mayo de este año se verificó el quinto año consecutivo de caída de la facturación de la industria", agregan en el comunicado, para luego alertar que "de la facturación sale la inversión y el empleo, no de las cajas vendidas a un precio más bajo en promedio".
Estos datos fueron presentados por el Centro de Estudios Económicos, recientemente fundado por Bodegas de Argentina, la cámara vitivinícola de Argentina con más de 250 bodegas socias.
Se vende más, pero menos premium
Patricia Ortiz, presidente de Bodegas de Argentina, ve "con preocupación la caída del precio promedio y por ende de la facturación, la falta de premiumización en los mercados externos y la agresiva promoción en el mercado interno".
Según Bodegas de Argentina, para los doce meses cerrados en mayo de este año se observa un importante crecimiento de los despachos de vino desde las bodegas (alza del 4,7%) y un crecimiento de los volúmenes de exportación, en especial de vino granel de bajo precio (suba del 24,3%), lo que generó un aumento del volumen total, del 9,9% en relación al mismo periodo del año anterior.
David Bonomi, enólogo de Norton: "Nuestro objetivo es pensar los próximos 100 años del vino argentino"
Sin embargo, el problema está en los precios promedio medidos en moneda constante, dado que se advierte una caída muy importante.
"En el mercado interno, medido después de los sustanciales descuentos que se realizan como promoción, el precio promedio ha disminuido en moneda constante casi un 15% en relación a un año atrás, que ya había tenido una importante caída en relación a 2018", explican desde la entidad.
En el mercado externo, en tanto, la disminución total (vino fraccionado más granel) ha sido aún más importante dado que lo que se expandió fue la exportación de vinos a granel de bajo precio. El precio promedio de cada caja equivalente vendida cayó casi un 14% y dejó la cotización en niveles por debajo de 2009.
"Las variables macroeconómicas que explican este comportamiento de precios son la tasa de interés, que obligó a las bodegas a liquidar stocks para disminuir la carga financiera de la inmovilización de inventarios, y el tipo de cambio, que permitió vender volúmenes importantes de granel en el mercado externo", explicó Ramiro Barrios, director del área de Comercio Exterior de la entidad.
Vinos online: bodegas chicas también se suman al boom del ecommerce
Así las cosas, el resultado, según el informe, "es un aumento de los volúmenes despachados y una caída muy importante de los precios, que ha dado como consecuencia una caída de la facturación de la industria en un 5,4% medida en moneda constante en relación al año anterior".
"Se observa que fue el mercado interno el de mayor caída con casi un 11%, mientras que en la exportación, gracias a un mejor tipo de cambio, se observó un aumento suave del 1,2% que no pudo compensar lo sucedido en el mercado nacional", completan.
"La ecuación entonces para la vitivinicultura en su conjunto, es una caída de facturación y una disminución del margen de contribución de los productos, dado que cayeron los precios promedio y los costos variables aumentaron a la par del aumento de volumen", concluyen desde Bodegas de Argentina.