Finca La Anita, nuevo estilo de vinos e inversiones para crecer
En 2017, el Grupo Origin Wine, que posee bodegas en Europa y Sudáfrica, adquirió el tradicional establecimiento Finca La Anita, enfocado en la elaboración de vinos de alta gama.
Y, desde ese entonces, a partir de un paulatino cambio de estilo -especialmente en los blancos- y de fuertes inversiones, la tradicional bodega comenzó a despegar tanto en el mercado doméstico como en los destinos internacionales.
Según detalló Richard Bonvin, presidente de Mendoza Vineyards una de las filiales del grupo Origin Wine, la compañía ya desembolsó más de 2 millones de dólares en mejoras a nivel bodega y viñedos para incrementar la calidad de los vinos.
En lo que respecta a los viñedos, detalló que "compramos máquinas, tractores, una estación meteorológica, termómetros para analizar la tierra, elementos de tecnología de avanzada a fin de tener un buen control sobre la calidad de la uva y el viñedo. A su vez realizamos estudios de suelo y de los lotes, para conocer mejor nuestra materia prima".
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En bodega, se incorporaron equipos de frío y se reemplazaron tanques con temperatura por 200 mil litros, además de nuevas mesas de selección y otros equipos de última generación para cuidar la recepción de la uva.
Además, para el proceso de elaboración, se importaron dos contenedores de barricas directamente de Francia, tanto para la elaboración de los vinos de alta gama de La Anita, como para los vinos de Mendoza Vineyards, la otra bodega que el Grupo Origin Wine tiene en Mendoza.
Nuevo estilo
En paralelo, Finca La Anita hizo un importante cambio de estilo en sus vinos blancos, que se aprecian hoy más frescos, cítricos y frutados, según destacaron.
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Esto se logró gracias al intercambio con los enólogos del grupo que trabajan los grandes vinos de Nueva Zelanda y Sudáfrica: "Así logramos un Sauvignon Blanc que da fruta más tropical, con hiperoxigenación antes de la fermentación; también elaboramos otro Sauvignon Blanc más ácido, que se logra a través de una fermentación con trabajo de nieve carbónica y levadura de Sudáfrica. Con ambos hacemos cortes y logramos el vino que queremos", comentó.
En cuanto a los tintos, Finca La Anita ha logrado tratando buen equilibrio entre alcohol, estructura y acidez. "La buena calidad de la madera -utilizan una mayor proporción de roble francés que americano- nos ayuda a lograr vinos elegantes, pero con buena estructura, que alcanzan una buena madurez en botella", afirmó Bonvin, en compañía de Manuel Mas, fundador y ex propietario de Finca La Anita, quien continuó vinculado a la empresa tras su venta, representando los vinos como brand ambassador.
En cuanto al aspecto comercial, desde la firma explicaron que el éxito que obtuvo Luna, la línea más económica de Finca La Anita, el año pasado en Estados Unidos y Europa, fue el corolario para que Origin Wine decidiera incrementar este año las ventas de Finca La Anita en el exterior.
"El objetivo es cuidar mucho la marca y posicionarla en el on trade, especialmente vinotecas y restaurantes de nivel, con un precio de u$s24,90" detalló Bonvin.