Diez increibles parrillas de Buenos Aires para probar los mejores cortes de carne

Nuevas y clásicas parrillas conviven en Buenos Aires a la espera de locales y turistas que buscan probar la mejor carne. Actualizamos nuestras listas para que los amantes de la carne en todas sus expresiones encuentren cortes tradicionales, ahumados, carnes maduradas y todo lo que las parrillas tienen para ofrecer. 

PALERMO HOLLYWOOD

Todo Brasas

Las jaulas de Todo Brasas en el Bocha Polo.

Ubicado en el paseo gastronómico de Bocha en el Campo Argentino de Polo, Todo Brasas cocina sus carnes en unas jaulas de metal diseñadas especialmente por su chef Pablo Antoyán. Las llamas altas del quebracho blanco y el espinillo dan el sabor característico de la parrilla, donde los cortes estrellas son la costilla entera y el vacío. Ambos cuelgan de las jaulas y se cocinan por 4 horas.

Para potenciar su sabor, se bañan con ramas de romero impregnadas con una salmuera especial que incluye ajo, laurel, pimienta, pimentón y sal. A la mesa llegan súper tiernas y jugosas. Campo Argentino de Polo en Palermo, Av. del Libertador 4096 CABA. 

PALERMO SOHO

Casa Pasto

Una selección de carnes especiales y la habilidad de un gran asador.

De reciente apertura, Casa Pasto cuenta con carnes de novillos pesados, criados 100 % a pastura. A cargo de los fuegos está Nacho Bravo, chef y experimentado parrillero, que selecciona las carnes meticulosamente, solo cortes raza Angus y Hereford. Las achuras y embutidos, como el chorizo 100 % de cerdo, la morcilla o las mollejas confitadas son perfectas, una gran entrada para arrancar el banquete carnívoro.

Entre los cortes, el bife de chorizo y el ojo de bife se llevan los aplausos. Para acompañar, hay ensalada de kale con rúcula y rabanitos, verduras frescas, cocidas y claro, papas fritas, que salen en bastones finos y largos. Nicaragua 4557, Palermo.

PARQUE LELOIR 

Bruce Grill Station

Inspirado en el Lejano Oeste y digno representante del agite del Oeste, la propuesta de Bruce se enfoca en carnes ahumadas y asadas al estilo norteamericano. Las piezas se cocinan en la parrilla con brasa de quebracho colorado y hay tanto cortes clásicos como opciones especiales. Imperdible el asado banderita de 800 gramos, que se extrae del centro del animal, cortando transversalmente las costillas para obtener una carne muy tierna. Una vez cocido, se termina con una sal de especias.

Otros must: el T-Bone de carne de pastura de 500 gramos y la entraña de 500 gramos, que nunca fallan. Para acompañar, papas al horno, ensalada de rúcula y parmesano o la clásica mixta. Martín Fierro 3246, Parque Leloir y Mayor Irusta 2921, Bella Vista, BS.As.

PUERTO MADERO

La Cabaña

El asado banderita Angus de La Cabaña.

La Cabaña es una de las icónicas parrillas de Puerto Madero, con casi 90 años de historia. La parrilla funciona con un mix de leña y carbón y allí se asan los cortes tradicionales de raza Angus; piezas dry aged (maduradas en seco) y carnes de la raza Wagyu. Para los que les cuesta decidir, hay una degustación de Carnes Premium para compartir que trae los tres tipos de carne. Se sirve con papas soufflé, espinacas gratinadas y ensalada.

La hamburguesa de Wagyu grillada, con rúcula, panceta, tomates confitados y provoleta, acompañada de papas rústicas eleva la categoría y nos deja muy bien parados en un barrio donde abundan los turistas. Alicia Moreau de Justo 580, Puerto Madero.

RECOLETA

Rufino

Rufino, una parrilla escondida en un subsuelo de Recoleta.

Rufino se ubica en el subsuelo del hotel boutique Mío Buenos Aires, un lugar lejos de las miradas indiscretas tranquilo y de linda decoración para disfrutar de una buena parrilla moderna. Hay morcilla asada con chucrut de repollo, pasas de arándanos y nueces, y chutney de tomate y manzana;  mollejas con puré de coliflor; y la estrella: el costillar del centro, cocido a baja temperatura por seis horas: El  ojo de bife a la parrilla con manteca de chimichurri y ajo es una bomba así como el bife de chorizo con manteca de hierbas y jugo de carnes; y la infaltable entraña con ajíes en vinagre y romero. Un tributo a la clásica parrilla argentina. Av. Pres. Manuel Quintana 465, CABA.

NORDELTA

Hierro

Con tres sedes, Hierro propone un menú con grandes cortes.

Con otras sedes en Palermo y Málaga (España), Hierro se especializa en cortes típicos. Cada pieza es especialmente seleccionada y sometida a un proceso de maduración al vacío, mejorando su terneza y sabor. La cocción se realiza con carbón y quebracho colorado, que aporta matices ahumados. Las achuras más representativas son las mollejas a la parra con puré de coliflor y ajos asados; y los chinchulines asados con crema cítrica de limón y limón quemado.

De los cortes especiales, el ojo de bife con hueso de 750 y el bife de chorizo de 500 gramos, ambos con 45 días de maduración son un manjar para los amantes de las carnes. Boulevard del Mirador 220, Nordelta

PILAR

Malcriado

Selección de carnes premium en Malcriado.

Con otra recién inaugurada en el shopping Tortugas Open Mall, Malcriado es un restaurante y wine bar donde probar exclusivos cortes de carne y acompañados por una amplia variedad de vinos por copa para elegir. En la sección "Al Fuego" de la carta figuran las cartas que se asan con leña de quebracho. Entre los más pedidos está la picaña de ternera que sale tierno y jugoso; el asadito criollo de pastura, un clásico que resalta por la poca presencia de grasa, una presentación de 800 gramos que se sirve al punto deseado.

En carta también hay bife de chorizo con hueso; matambre de ternera tiernizado; vacío de 800 g; y el Tomahawk Steak para compartir de 1.5 kg. Colectora Norte 4002, km 36.5, Shopping TOM. Bs As.

PARQUE CHACABUCO

Mondongo & Coliflor

Una nueva propuesta en un lugar histórico Parque Chacabuco.

Esta pintoresca cantina de barrio está ubicada en un edificio centenario y tiene a "Cabito" Massa Alcántara y a Quique Yafuso entre sus dueños. Además de la parrilla tradicional, cuentan con un kamado para darle unos toques diferentes a las cocciones.

Entre los cortes clásicos salen el emblema porteño: el asado banderita así como también entraña; un generoso bife de chorizo, el matambre, y una abundante parrillada para compartir, de esas que te tientan desde la mesa de al lado y de la que todos tienen algo para picotear. Se sirven en parrillas de acero inoxidable especialmente diseñadas. Del Barco Centenera 1698, Parque Chacabuco.

COLEGIALES

Olegario

Olegario, el clásico de Colegiales.

Esta enorme parrilla es punto de encuentro de todo el barrio. Tiene un gran jardín cerrado que permite comer muy tranquilo, con mucho repelente encima (¡los mosquitos no dan tregua!) o un salón igualmente cómodo para estar más guarnecido. El maestro parrillero saca cortes con rapidez y precisión, todo al punto requerido. Los chinchulines crocantes y las mollejas jugosas pero bien cocidas son la debilidad de varios de sus habitués.

La carne es tierna, sabrosa y llega con la temperatura adecuada a la mesa. Una auténtica parrilla de barrio donde volver siempre es un acierto. Gral. Ramón Freire 1931, CABA.

JOSÉ LEÓN SUÁREZ

Los Talas del Entrerriano

Tradición parrillera en José León Suárez.

Lo hemos mencionado varias veces, pero vale la pena volver a hacerlo. Los Talas es una parrilla de las de antes, donde aún, además de parrilla, sobrevive la estaca. Nada es glamoroso ni moderno, todo es rústico, clásico y efectivo como las viejas parrillas. Bandeja de acero inoxidable, tablitas de madera, cuchillo con serrucho, todo lo que uno imagina.

Tiene uno de los mejores vacíos del país, jugoso y tierno y el lechón es una absoluta delicia. Hay que llegar temprano, porque se arma cola. Av. Brig. Gral. Juan Manuel de Rosas 1391, Bs. As.