En el sector tecnológico argentino "nadie habla de recesión"
Las ventas de productos y servicios de tecnología y telecomunicaciones mantendrán en la Argentina la tendencia alcista que caracterizó al sector en el país en los últimos tres años, según diferentes consultoras.
La crisis financiera global puede resultar más un beneficio que un factor negativo, por la ubicación de la Argentina en el grupo de países emergentes dónde las empresas tradicionales de tecnología mantendrán el foco ante la recesión de Estados Unidos y Europa, señalaron los analistas.
Para Alejandro Oliveros, de la consultora IDC, "en la Argentina nadie habla de recesión" y aún teniendo en cuenta que esta industria es sensible a determinados factores macroeconómicos como el tipo de cambio y la financiación "los datos no hacen prever caídas" del consumo.
Oliveros aceptó que "se puede pensar en desaceleraciones" de la venta, pero más enfocada hacia las ventas corporativas donde, "desde antes de la crisis, se observa que se alargan los ciclos de venta".
La industria de las tecnologías de la información tiene su mayor nivel de consumo en Estados Unidos y Europa, donde "hay una recesión, mientras no ocurre lo mismo en la Argentina", apuntó Oliveros a la agencia Télam.
A su vez destacó que desde hace ya un par de años "la tecnología de la información generalizó la idea de que tenía que enfocarse en los mercados emergentes, y no vemos que levanten el pie de estos mercados".
En los últimos cinco años la sigla BRIC se popularizó en el ambiente tecnológico para identificar por sus primeras letras a Brasil, Rusia, India y China, como los países más representativos del grupo de emergentes.
De este grupo "Brasil y China están ahora mejor posicionados que Rusia e India" y esto arrastra a "América Latina en general y la Argentina en particular a un buen posicionamiento dentro de la política de los vendors (empresas de tecnología)".
También señaló que firmas tradicionales del ambiente tecnológico, como IBM, Intel, AMD, Cisco y las de software, entre otras, "tienen ingresos generados por contratos de largo plazo que se pueden rediscutir o renegociar pero que les permiten estimar sus ventas de acá a unos años".
En el mismo sentido, el analista Enrique Carrier consideró que los proveedores de servicios informáticos y de comunicaciones en el mercado local pueden tener "daños controlados", más vinculados a la renegociación de los contratos que a la caída de las ventas.
Carrier cree que los fabricantes de equipos, tanto de computación como de teléfonos, tienen un escenario "más complicado" hacia el 2009, por la presión que significa localmente el alza de la cotización del dólar.
Para Oliveros, las notebooks, monitores LCD y cámaras digitales, que hoy son las estrellas de las ventas, pueden no quedar en primer lugar en las preferencias del consumidor, pero "tampoco se puede pensar que habrá resultados negativos, la situación no es la misma que en el 2002".
Los artículos tecnológicos con garantía de marca y servicios post venta pueden ser el refugio del ahorro de los consumidores locales, así como en Islandia los inversores compran relojes Rolex.
Oliveros consideró que "el equipamiento de TI (tecnología de la información)" puede ser una "buena protección" para los recursos de los consumidores, situación que luego, sujeta a la competencia de precios, puede significar algunos cambios en la estructura actual del negocio.
En ese sentido apuntó que en el mediano plazo es posible que "las marcas multinacionales se posicionen por encima de las locales" por ejemplo en el segmento de computadoras de escritorio y portátiles.
Según Carrier, en ventas de computadoras personales las proyecciones para el 2008 se mantienen tal como previeron el año pasado y "salvo que el último trimestre sea francamente desastroso, el año debería terminar con unos 2,35 millones de PC (de escritorio y portátiles) vendidas, lo que implicaría un nuevo récord".
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